GOLF

Las lágrimas de Matthieu Pavon, el hijo de un exjugador del Betis que supera a Jon Rahm y triunfa en Madrid

El francés, que ya fue segundo en 2022, ha sido el mejor durante toda la semana en el Open de España.

Matthieu Pavon, en el Open de España. /Acciona Open de España
Matthieu Pavon, en el Open de España. Acciona Open de España
Óscar Méndez

Óscar Méndez

Para ser jugador profesional de golf hay que tener mucho talento. Un deporte tan preciso y exigente, sobre todo en lo mental, requiere de un nivel de preparación altísimo. Pero hay que ser bueno con las manos y, sobre todo, empezar joven. Casi nadie llega a la élite dando sus primeros golpes en la adolescencia. Y para tener ese gusanillo por este deporte es necesario que alguien te lo meta desde pequeño, algo que es más sencillo si tus padres fueron deportistas. Y ese es el caso de Matthieu Pavon, hijo de un exjugador del Betis.

El jugador francés no es ni mucho menos uno de los más conocidos del circuito. Con participaciones contadas en el PGA Tour, ha centrado su carrera en el DP World Tour que esta semana visitaba Madrid para celebrar el Open de España. Pavon, además, no atesoraba ningún triunfo en el Circuito Europeo y, hasta la fecha, sus mejores resultados se reducían a tres segundos puestos en los últimos seis años, uno de ellos precisamente en el Club de Campo Villa de Madrid en 2022.

Aquello fue solo un aviso, claro. En esta edición, esa en la que ya se había erigido como el rival a batir por Jon Rahm, ha terminado llevándose el título con un nivel imbatible. Su primera vuelta al campo fue todo una declaración de intenciones, y es que el galo cerró el jueves con un brillante -8 que le situaba líder en solitario del torneo, con dos golpes de ventaja sobre sus más inmediatos perseguidores. Sus jornadas de viernes, sábado y domingo no se quedaron atrás, lo que le bastó para triunfar en la capital de España.

Tras sellar el triunfo, y apartado de la multitud, un emocionado Pavon ha hablado con su familia por videollamada. Al colgar, el francés se ha incorporado emocionado para recibir el trofeo de campeón. "Son lágrimas que vienen de todo lo vivido, de mi abuelo, que era de Madrid y ya no está entre nosotros", ha explicado a Relevo en sala de prensa. "Son lágrimas también para mi familia, que siempre está conmigo, que me empuja en lo bueno y en lo malo y que siempre pone todo de su favor para que yo pueda rendir en los torneos".

Un padre de relumbrón

Matthieu, además, es hijo de Michel Pavon, un exfutbolista francés que jugó casi 400 partidos en Ligue 1 entre el Toulouse, el Montpellier y el Girondins. En el año 2000 llegó a España para firmar por el Betis, conjunto en el que apenas estuvo una temporada antes de colgar definitivamente las botas lastrado por las lesiones. Por aquel entonces su hijo todavía tenía nueve años, pero ya había mostrado sus aptitudes para el golf.

Michel Pavon, en el Girondins.  Getty
Michel Pavon, en el Girondins. Getty

Cuando era joven, a Matthieu le tocaba responder preguntas sobre su padre. "Nunca me cansé de hacerlo porque estoy muy orgulloso de su carrera", reconoció en más de una ocasión. Ahora los papeles se han cambiado y es al progenitor al que le toca hablar de su hijo, que esta semana ha aprovechado la gran oportunidad de su carrera al conseguir su primer título de prestigio, derrotando nada más y nada menos a Jon Rahm.

Pese a no ser, todavía, un golfista muy conocido, Pavon si ha tenido algunos momentos destacados en estos últimos años. Participó en una ocasión en el Abierto Británico, donde no pasó el corte, y tres veces en el US Open. Precisamente en la última edición de este torneo dejó un hoyo en 1 para el recuerdo, aunque no le sirvió para evitar la elimiación a las primeras de cambio.

En cualquier caso, la relación entre padre e hijo es muy fluida y es habitual que Michel acompañe al golfista en varios torneos a lo largo del año, también en los entrenamientos. Además, el hecho de haber sido deportista profesional sirve a Pavon de apoyo y ejemplo a seguir. "Cuando llega a entrenar, se queda en el carro a diez metros de distancia porque una mirada nos basta. Me da mucha libertad en mi carrera pero sé que siempre estará ahí para devolverme al camino correcto si considera que me estoy dando contra una pared", comentó el francés, que no solo ha pasado por encima de Rahm, sino que ya se ha consagrado como nuevo campeón en Madrid.