Una tienda cerrada en el centro de Madrid salva en tiempo récord a Jon Rahm tras romper su driver

Pocas cosas más curiosas le habrán pasado a Jon Rahm en un campo de golf que lo que ha tenido que 'superar' en la 3ª jornada del Acciona Open de España que se disputa esta semana en el Club de Campo de Madrid. En plena jornada clave para buscar la que sería su cuarta victoria en la cita española del circuito europeo, la estrella del golf español sufrió un inconveniente más que inesperado: de camino al hoyo 6, su driver se descabezaba o, lo que es lo mismo, el palo se separaba de la superficie de golpe.

Para los más novatos en el deporte del golf, los jugadores solo llevan un ejemplar de cada tipo de palo y Rahm se quedaba sin uno de los más importantes, el utilizado para las salidas en cada hoyo. ¿Y entonces?

Si esta situación hubiera ocurrido en Estados Unidos o uno de los grandes campos británicos, el problema se hubiera solventado recurriendo al servicio de tienda habitual o a la infraestructura de camiones comerciales de la marca para los mejores torneos. En caso del Club de Campo madrileño no se cuenta con tienda ni tampoco un servicio provisional para arreglar palosin situ. Todo hacía indicar que el 'León de Barrika' tendría que afrontar el resto del recorrido saliendo con una madera 3 de mucho menor recorrido.

Pero a los problemas se le buscan soluciones y desde la organización no se tardó en encontrar una. A falta de un lugar para resolver la situación en el campo de golf de la carretera de A Coruña, se decidió llevar el palo a una tienda especializada del centro de Madrid lo más rápido posible. Se trataba de Golf Estudio, situada en la Avenida Asturias, cuyo responsable no tardó en llegar al torneo tras ser avisado por el personal del campo y ofrecer los servicios para llevarse el driver de Rahm a toda prisa. No tardó en arreglar la situación.

Se dieron prisa porque el palo no tardó en volver a las manos de su dueño. Antes de afrontar el hoyo 13, y solo siete hoyos después de sufrir el descabezado, Rahm ya pudo realizar la salida con normalidad como si nada hubiera pasado. Recorriendo varios kilómetros desde el hoyo 6 hasta el centro de la capital, abriendo una tienda cerrada para una urgencia y con un trabajo metódico hecho a contrarreloj se resolvió la historia más curiosa del Open de España de golf.