TERCERA RFEF

Diego Almeida, el excompañero de Gavi y Casadó que relanza su carrera en el Prat: "Estoy mentalizado, me veo a su nivel"

Hace no tanto era uno de los jugadores con mayor proyección de La Masia. Ahora ha encontrado la felicidad en el Sagnier y lucha por ascender.

Diego Almeida fichó por el Prat el pasado mes de octubre./AE PRAT
Diego Almeida fichó por el Prat el pasado mes de octubre. AE PRAT
Jordi Cardero

Jordi Cardero

Diego Almeida (Rubí, 2004) llega en su Porsche al Sagnier, la casa del AE Prat, y entra en una pequeña caseta prefabricada que funciona como sala de prensa. Hay algo que dice que no le toca estar ahí, pero sus caminos se cruzaron en el mes de octubre. El central prácticamente dio sus primeros toques al balón en La Masia, pero tuvo una salida extraña cuando era juvenil. Entonces ya había debutado con la absoluta de Ecuador. Tras un año en los Estados Unidos, regresó a España para jugar en el Sestao River. Apenas estuvo unas semanas y volvió a casa, con un sabor agridulce.

"No se portaron bien, no hicieron las cosas bien. Es parte del pasado y no hace falta removerlo. Quien tenga que decir algo sobre el tema, lo dirá", dice Diego. El Prat descubrió que el que era uno de los centrales del país con más proyección a sus 20 años se encontraba sin equipo y no dudó en hacerle una oferta. Xavi Vilajoana, con pasado en Can Barça, facilitó el movimiento. El que fuera compañero de Gavi, Xavi Simons, Balde o Marc Casadó juega ahora en la Tercera Federación. Y lo hace feliz y orgulloso. Tiene una mentalidad y habla con una seguridad que es capaz de convencer a cualquier que volará hacia categorías superiores.

Almeida empezó a jugar a fútbol en el 25 de septiembre, el club de su barrio, en Rubí. Con cinco años entró a la escuela del Barça y ni siquiera uno más tarde ya fichó por La Masia, por el fútbol federado blaugrana. Aunque empezó como delantero y centrocampista, pronto se instaló en la defensa. "Siempre he sido grande físicamente para mi edad, tenía como referente a Puyol", cuenta. "Al estar desde pequeño en el Barça, lo tenía todo muy interiorizado. Me salía todo solo. Tenía buena salida de balón, filtraba, daba los pases, tomaba el liderazgo en ese sentido", explica. Los entrenadores que lo ha tenido lo confirman.

El salto con Gavi, Ilias y Alarcón

Cuando dio un salto importante fue en el Cadet A, cuando vivió en La Masia. "Es como una burbuja. Estás todo el día rodeado de la gente del equipo, siempre iba con Gavi. En autobús al cole, a entrenar… Todo el día con los mismos", recuerda. Aquella temporada le entrenador Carles Martínez, actualmente primer entrenador del Toulouse, y Pol Planas, en el Juvenil B. "Me ponían a defender y venían todos. Uno contra uno: Balde, Simons, Leo Dos Reis, Casadó, Txus Alba… aprendías a la fuerza", relata. "Pol y Carles me cambiaron la forma de ver el fútbol", asegura. Almeida se saltó una categoría, el Cadete B, junto a Gavi, Ilias Akhomach y Ángel Alarcón.

Del Cadete A saltó otra vez de categoría, esta vez Juvenil A. Se acercaba al fútbol profesional y apareció un tercer actor, los medios de comunicación. "La prensa está encima, te dicen que estás a un paso, te lo imaginas… se trataba de seguir trabajando. Estaba convencido de que podría llegar", expone. "Siempre supe llevar bien la presión. Cuando aparecía mi nombre en la prensa, no me preocupaba. Si la lías, te ponen abajo. Pero lo llevé bien. En redes sociales intentaba no meterme mucho ni en lo bueno ni en lo malo", relata. Haciendo pareja con Chadi Riad, lo ganó todo. "Es con quien más química he sentido", asegura.

La salida del Barça tras toda una vida como blaugrana

A pesar de que llegó a debutar con el Barça Atlètic, su salida del Barça no fue la mejor. En su tercer año de juvenil apenas tuvo minutos. "Fueron temas que a día de hoy todavía ni controlo ni manejo. Fue un giro muy grande para mí. A día de hoy no entiendo qué es lo que pasó. Estaba desde prebenjamín, estaba muy bien [en el club]", cuenta. "El último año fue complicado. No fue una decisión de que quisiera irme. Pasaron cosas que hicieron que mi salida fuera así. No lo decidí yo, estaba muy a gusto. No entendí por qué pasó", añade.

Diego Almeida habla sobre su salida del Barça.RELEVO

Fue entonces cuando salió la oportunidad de marcharse a los Estados Unidos para jugar en el segundo equipo del Colombus Crew. "Fue algo muy diferente a lo que venía haciendo. Me sedujo el proyecto, lo acepté porque quería jugar ya. Fui sin saber mucho el idioma y ahora lo hablo. Son aventuras que guardas para siempre, un año bonito", señala. Entonces apareció el Sestao. "Volví porque me salió la oportunidad, era lo que quería. Me hicieron venir de Estados Unidos, a renunciar a un contrato con el campeón de la MSL", apunta. El tema ya ha quedado enterrado.

La mentalidad de un futbolista de élite

Regresó a su barrio y se puso a entrenar con su preparador físico. Había empezado la temporada y estaba sin equipo, apenas un año más tarde de estar en una de las generaciones más talentosas de La Masia. "Lo llevé bien. Soy fuerte de mente gracias a los que me rodean. Siempre tenía la mente puesta y dispuesta para aprovechar la oportunidad cuando se diera. Yo sé que soy un jugador de muy buen nivel", asegura. Cuando llamó El Prat, no se lo pensó dos veces. "Es un buen proyecto de club, estoy muy contento aquí", dice.

Diego Almeida, sobre su mentalidad y dónde se ve en un futuro.RELEVO

La primera victoria del Prat con Almeida tardó en llegar. El equipo justo acaba de salir de descenso, pero mantiene como objetivo el ascenso. Los playoffs los tiene solo a seis puntos. "Tengo el objetivo de ayudar a subir de categoría. Este año lo mío es jugar a un buen nivel, tener minutos y lo que tenga que venir, vendrá", comenta. La mentalidad de Almeida le hace distinto. Habla con la firmeza y la seguridad de quien sabe que, a pesar de que está disfrutando su etapa actual, a él le toca competir en categorías superiores.

"Soy consciente de lo que puedo dar, de mi nivel. Sé que con esfuerzo y dedicación me llegará el momento. Estoy mentalizado en eso", cuenta. "Fermín es un buen ejemplo. Estaba en categorías así y míralo ahora. Nada es imposible en esta vida, lo tengo clarísimo. Todo puede dar un giro. El talento, el esfuerzo y el sacrificio tiene que ir de la mano. Yo estoy mentalizado y me veo al nivel de mis excompañeros, que están arriba. Si se me da la oportunidad en una categoría superior, sé que rendiré al 100%", cierra.