La Superliga presiona en Bruselas: "¿23 estados se personan a favor de la UEFA? No se ha visto ni en casos de Derechos Humanos"
A22, la empresa encargada de su creación, apoya en la capital de Europa un evento de 'Concurrences' a dos meses del fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

"El momento de la verdad se aproxima". La frase no está sacada de la serie House of Cards de Netflix, sino de un nuevo episodio de la batalla entre la Superliga y la UEFA y la FIFA, cuyos actores se multiplican en jornadas maratonianas de lobbying en Bruselas, a dos meses del fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de Luxemburgo.
El 15 de marzo de 2023 fue la fecha mencionada por Javier Tebas, presidente de LaLiga, ayer en la capital de Europa hasta en tres ocasiones. Ese día supuestamente se conocerá la resolución acerca de si los organismos rectores del fútbol ejercen o no un abuso de posición dominante, tal y como alegan desde A22, la compañía en la que cohabitan Real Madrid, FC Barcelona y Juventus para dar forma a una hipotética Superliga. Diferentes fuentes dicen a Relevo que el fallo podría retrasarse unas semanas más.

Si ayer fue Tebas en primera persona quien tomó la palabra; hoy en el evento organizado por la firma Concurrences y con protagonismo de la Superliga, en el céntrico Hotel Plaza de Bruselas, faltaban pesos pesados del Real Madrid y el FC Barcelona, inmersos en la Supercopa de Arabia. Sí acudió Vincenzo Ampolo, jefe de Gabinete de Presidencia de la Juventus, y, por supuesto, el CEO de A22, el alemán Bernd Reichart, pero no intervinieron en las ponencias.
"La UEFA ha aprendido la lección del caso Bosman"
Parlamentario EuropeoLos organizadores sacaron su principal carta en la primera mano de la partida: Melchior Wathelet, otrora vice primer ministro belga y, sobre todo, exabogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea en Luxemburgo (entre los años 2012 y 2018). El jurista repasó la opinión no vinculante de su colega griego Athanasios Rantos, el abogado general encargado del informe del affaire Superliga, y convirtió su intervención en una suerte de segunda opinión dirigida a sus excompañeros del Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

Wathelet, tras hablar del momento de la verdad, sacó la artillería. "23 estados, 21 de ellos de la Unión Europea, se personaron en la audiencia del caso. ¿23 estados para apoyar a la UEFA? No lo había visto jamás, ni en casos de Derechos Humanos", comentó el veterano letrado antes de particularizar. "Es curioso, por ejemplo, el tema de la República Checa, que cambió su versión para dar una antagónica el día de la audiencia", deslizó.
"Con la Superliga se generaría el doble de ingresos que con el modelo actual"
Vicepresidente de Compass Lexecon"La UEFA ha aprendido la lección del caso Bosman, donde se creyó muy independiente, y de ahí la movilización de los estados", completó Antonius Manders, parlamentario europeo. El neerlandés habló sin pelos en la lengua. "El fútbol es una religión y la primera norma en política es no tocar la religión, eso es lo que está pasando aquí. Jamás dispares a tus votantes", exclamó antes de lanzar un vaticinio: "Creo que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea va a ir en la línea del abogado general. El fútbol tiene más que ver con emociones que con estructuras legales". Manders subrayó otra particularidad, que complica más si cabe la coyuntura: "Estas Federaciones se ubican fuera de la UE y muchos de sus miembros no pertenecen a la UE".
"La Euroliga, el Tour, el golf, el tenis... ¿Por qué no el fútbol?"
Vicedecano de la Universidad de PerpiñánEl español Antón García, vicepresidente de Compass Lexecon, consultora que trabaja para A22, recordó el modelo propuesto en su día por la Superliga. Doce clubes fundadores, una competición de 20 equipos y 197 partidos; por los 32 equipos y 125 partidos de la Champions League. "Generaríamos más del doble de ingresos con este modelo y se dedicaría un 8% de los mismos a solidaridad, incrementando significativamente el modelo actual", enfatizó. "Eso que dice el abogado general Rantos de que la Superliga tendría un impacto negativo en las competiciones nacionales sale de la nada. Por ejemplo, con el nuevo modelo, el cuarto, quinto y sexto de LaLiga tendrían mayor interés porque irían a la Champions, en caso de que los tres primeros estén en la Superliga".
Entre los académicos elegidos para el acto, Romain Bouniol, vicedecano de la Universidad de Perpiñán, fue de los pocos que se salió del guion jurídico. "El caso de la Euroliga, el Tour de Francia, el Giro, La Vuelta, competiciones en golf, en tenis... Estos deportes están organizados por federaciones y también por compañías privadas. ¿Por qué no el fútbol?", se preguntaba el francés que intervino por videoconferencia.
La jornada no la clausuró el CEO de la Superliga, sino el propio Melchior Wathelet, omnipresente en el evento, que habló de nuevo de la futura resolución. "Dije ayer que soy algo pesimista, pero el Tribunal tiene la oportunidad de generar un cambio importante. No obstante, los jueces no son legisladores. Lo que me asusta es que los Estados miembro, el Consejo, la Unión Europea y el Parlamento Europeo no tienen ningún deseo de intervenir", se sinceró. Si en algo coinciden las dos partes del conflicto es que la resolución de Luxemburgo será una batalla más, no la definitiva, en una guerra cuyo final no podría predecir ni el afamado guionista de House of Cards.