REAL MADRID 2 - ATALANTA 0

El Real Madrid ya conquista Europa con su nuevo tridente galáctico

El equipo de Carlo Ancelotti venció con goles de Fede Valverde y Mbappé.

Mbappé, contra la Atalanta./EFE
Mbappé, contra la Atalanta. EFE
Rodra P

Rodra P

Varsovia-. "¿Estará nervioso Mbappé?", se preguntaba un compañero en la grada, mientras le veía calentar antes de que arrancara la final. Antes de su debut con el Real Madrid. Cómo se va a poner nervioso Kylian Mbappé. Y más en este equipo blanco, que por si acaso en su primer día le dejaron la tarea medio hecha. Fede Valverde marcó el primer gol con un recuerdo: el número ocho de Toni Kroos. Al que sus compañeros le echaron de menos en la primera parte y le echarán de menos el resto de sus vidas. En la segunda parte el francés hizo lo que todo el mundo esperaba: dictar sentencia.

Ancelotti, sobre el partido.

Mbappé no se puso nervioso pero la Atalanta sí que puso nervioso al Real Madrid en algún momento. Un equipo mancomunado, duro, que juega bien. Un equipo del que te no te acuerdas de sus nombres pero sí de lo que te hizo sentir, bajo la dirección de Gasperini, otro sabio italiano de pelo cano.

Qué iluso. Qué iba a sentir Mbappé. Un tipo sin ningún reparo para machacar a sus rivales en el área. El Madrid esperó su fichaje como aquel niño que se pasó una vida entera esperando la campana del recreo. Y ya mereció la pena. Justo en el minuto 69 de Varsovia, donde Kylian enseñó todos sus colmillos, bien juntitos, para ajusticiar a la Atalanta.

El nuevo tridente galáctico de Europa

Hubo feeling entre el nuevo tridente de Florentino Pérez. Vinicius, Mbappé y Bellingham se buscaron todo el rato. Se gustan. Y eso le gusta más aún a sus aficionados, que disfrutaron de su compás cada vez que intercambiaban pases, todos con sentido, todos bonitos, todos para asesinar a su rival.

Mientras el reloj corría lo hacía más Jude Bellingham. Él no entiende de esquemas: en todos rinde igual. Agarró la segunda mitad por el pescuezo y descabalgó a la Atalanta hasta hacerla trizas. De sus conducciones infinitas fue encontrando los espacios para que los suyos jugaran como más les gusta: a correr.

Aunque fue Vinicius el que encontró el primer hueco. De un regate elástico de los suyos desarmó a la zaga italiana, no una zaga cualquiera, y se la entregó a Fede Valverde para que homenajeara a su ídolo de mismo número. Desde el minuto 59 el Madrid ya no soltó el partido de su dominio. Con Vinicius causando estragos, como un río desbordado.

Ancelotti, sobre Mbappé.

Bellingham aún tenía para más. Va por el campo tan sobrado que parece que juega con una mano en el bolsillo. Diez minutos después del gol de Fede Valverde, el británico le dio una asistencia de oro a Kylian Mbappé, que cumplió con el deseo de todo el madridismo en su primera cita. Derechazo a la escuadra derecha desde dentro del área.

La buena noticia de Militao y el partido de Rodrygo

Militao fue otra de las grandes noticias del encuentro para Carlo Ancelotti. Con él sano no harían falta muchos más centrales. Ha vuelto imponente de su lesión, como si nunca la hubiera sufrido, y comandó a los suyos ante un rival que incomodó con las carreras de Ademola Lookman.

No atinó Rodrygo, que anduvo algo meditabundo y fue el primer cambio de su entrenador, que le abrazó con mimo, junto al resto de su cuerpo técnico. Es el año que tiene más competencia, que más caro está jugar arriba, y empezó con un partido sin gol y un disparo al poste.

Ficha Técnica

2 - Real Madrid: Courtois; Carvajal (Lucas Vázquez, m.88), Militao, Rüdiger, Mendy; Tchouaméni, Valverde, Bellingham (Ceballos, m.88); Rodrygo (Modric, m.76), Vinicius Jr. (Güler, m.88) y Mbappé (Brahim, m.83).

0 - Atalanta: Musso; Djimsiti, Hien (Palestra, m.89), Kolasinac (Bakker, m.70); Zappacosta (Godfrey, m.63), De Roon, Éderson, Ruggeri; Pasalic (Manzoni, m.89); De Ketelaere (Retegui, m.63) y Lookman.

Goles: 1-0, m.59: Valverde. 2-0, m.68: Mbappé.

Árbitro: Sandro Schärer (Suiza). Amonestó a Bellingham (m.35), Vinicius Jr. (m.42) por el Real Madrid; y a Éderson (m.9), Djimsiti (m.64) por el Atalanta.

Incidencias: Final de la Supercopa de Europa disputada en el Estadio Nacional de Varsovia ante 56.428 espectadores.