ROMA 1 - MONZA 0

La vida del Monza después del mazazo con el Papu Gómez: "Sabíamos que podía suceder..."

Relevo asiste al Estadio Olímpico para ver el Roma-Monza en el primer partido sin el Papu Gómez para el club lombardo.

Palladino durante un lance del partido. /EFE
Palladino durante un lance del partido. EFE
Julio Ocampo

Julio Ocampo

Corría el año 1966 cuando el periodista y conductor televisivo Maurizio Costanzo escribió una canción icónica para Mina. Se telefonando es una apología al amor intenso y breve. Es adular, homenajear y tributar el final de una historia justo cuando acaba de nacer. Exultar la belleza en su precocidad.

Hay algo de todo eso en el periplo del Papu Gómez con el Monza. Apenas cuarenta minutos sobre el campo en los partidos contra el Sassuolo y la Salernitana, desmenuzados con dos victorias, cuatro goles a favor y ninguno en contra para un equipo que ya puede presumir de haber gozado de un campeón mundial con Argentina y de Europa League con el Sevilla.

"Lo de Alejandro ha sido un golpe duro para todos. Sabíamos que podría suceder, pero esperábamos que fuera lo más tarde posible. Habría sido un privilegio para nosotros, pero veamos qué sucede en las próximas semanas. Los órganos competentes están tratando de comprobar el asunto, pero nosotros confiamos en tenerlo nuevamente. Él está bien, entrenándose. Confía en que todo se resuelva todo lo antes posible para volver a jugar al fútbol", explicó míster Palladino a Relevo en la rueda de prensa post partido.

Mourinho y Palladino se saludan en la previa al partido.  EFE
Mourinho y Palladino se saludan en la previa al partido. EFE

"Él está bien, entrenándose. Confía en que todo se resuelva todo lo antes posible para volver a jugar al fútbol"

Raffaele Palladino Entrenador del Monza

Porque sí. Todo parecía indicar que contra la Roma de Mourinho se habría estrenado como titular, mil días después de la última en un once de Serie A, con la Atalanta. 

Lejos de la realidad, todo saltó por los aires el pasado viernes, cuando Relevo dio la exclusiva: las autoridades antidopaje le comunicaron la sanción por dos años. Ese mismo día el club emitió un comunicado anunciando la recepción -a través de la Federación Italiana de fútbol- de la sentencia de primer grado por parte la Comisión Española antidoping. Además, relataba la nota, "se trataba de una asunción involuntaria" de Terbutalina. Ahora será la iter procesal quien establecerá futuras directrices. Mientras tanto, a Raffaele Palladino (39 años) le corresponderá liderar la difícil situación de seguir siendo osado con su fútbol, de volver a bailar con o sin el Papu.

No fueron fáciles los dos últimos días para el Monza. Mientras que la prensa local (diario Il Cittadino) tildó la noticia como una ligereza total por parte de un jugador -apuesta personal de Galliani- que venía a sustituir al lesionado Gianluca Caprari, en la rueda de prensa previa al partido contra la Roma varios periodistas hablaron de tintes grotescos delante del míster, quien ha reconocido la aparente contradicción: fichar al fantasista a pesar de esta losa que se asomaba por detrás.

"Sentimos mucho perderle, porque se trata de un gran jugador y un buen hombre. Se ha adaptado muy bien al grupo. Pocas veces vi un futbolista hacerlo tan rápido. Sus compañeros le quieren, le estiman… El grupo ha reaccionado muy bien. Sólo espero que demos algo más si cabe por él en los partidos. Tengo una escuadra fuerte mentalmente, capaz de responder a las dificultades", explicó la tarde del sábado.

"Sus compañeros le quieren, le estiman… El grupo ha reaccionado muy bien"

Entrenador del Monza

Así lo hizo contra la Roma, donde se vio un choque poco técnico (triunfo romano 1-0). Aun así, el último sueño de Berlusconi siempre demostró ser una escuadra dinámica, educada con balón, de buenas lecturas con un hombre menos, trabajada bien tácticamente y generosa en las asociaciones. "Tenemos alternativas al Papu. Están Matteo Pessina (capitán), Machín, Dany Mota, Vignato, Carboni, Ciurria…" Futbolistas que se mueven muy bien en la media punta, atrevidos.

Lo pudo comprobar ante la Roma, que se impuso gracias a un gol de El Shaarawy en el minuto noventa. El escenario era un Olímpico sold out. Uno más. Otro tipo de amor el que brinda siempre este estadio. Más carnal, menos utópico. Siempre eterno e incondicional. "Lo del Papu Gómez no es problema mío. No jugó contra nosotros en la final. Tengo tos, pero no tomo nada para no arriesgar con los controles", soltó irónicamente Mourinho en rueda de prensa. Expulsado al final, se perderá el partido contra el Inter en el Meazza. Quien sabe si puso un dique -inconscientemente- a su cariño nerazzurro. Si, como la canción de Mina, tuviera miedo a telefonear por no saber decir adiós.