Italia quiere repetir la gesta de 1990 y ganar las tres competiciones europeas

El mes de mayo de 1990 fue uno de los más importantes de la historia del fútbol italiano. Ya sonaba en todos los rincones del país el 'Un'estate italiana', más conocido como 'Notti magiche', la canción del Mundial que se iba a disputar ese verano y que tenía a la selección local como gran favorita para vencer el título, pero todavía faltaba para ello.

A nivel de clubes, Italia estaba en lo más alto. La Serie A era el campeonato más importante. En él jugaban Maradona, Schillaci, De Agostini, Gullit, Van Basten, Rijkaard, Ancelotti, Baresi, Maldini, Dunga, Baggio, Pagliuca, Carboni, Vialli, Mancini, Alejnikov, Klinsmann, Matthaus, Brehme, Ferrara o Baroni, por citar algunos de los tantos ejemplos.

Estando los mejores, los equipos acompañaban, claro. El Nápoles de Maradona fue campeón, el Milan segundo y el Inter llegó a la tercera posición. Además, la Juventus quedó cuarta, la Sampdoria quedó quinta y la Fiorentina 12ª, tres equipos de los que hablaremos ahora.

En la temporada 1989/1990, se jugaban tres competiciones europeas. Por supuesto, la más importante, la Copa de Europa, que se comenzó a disputar en el año 1956. Más tarde apareció la Recopa de Europa, concretamente en el año 1961, con la participación de las copas nacionales y la victoria de la Fiorentina en esta primera edición. Por último, la más nueva, la copa UEFA, que llegó en el 1972 con la victoria del Tottenham.

Durante 28 temporadas, estas tres competiciones vivieron a la vez. La Recopa, con el paso de los años, iba perdiendo un poco su prestigio, pero para algunos equipos era muy importante. Desde su creación, equipos como Rangers, Magdeburg, Dynamo Kiev, Anderlecht, Barcelona, Valencia, Milan, Dinamo Tbilisi, Aberdeen, Juventus, Everton, Ajax, Mechelen, Sampdoria, Manchester United, Werder Bremen, Parma, Arsenal, Zaragoza, PSG, Chelsea o Lazio la ganaron. Equipos muy grandes e históricos, pero también algún equipo más pequeño, que tuvo la oportunidad de viajar por Europa.

En esas 28 temporadas, varios países metieron a tres equipos en las respectivas finales e incluso consiguieron ganar dos de los tres títulos. Bayern Múnich (Copa de Europa) y Borussia Monchengladbach (UEFA) en 1975, Liverpool (Copa de Europa) e Ipswich Town (UEFA) en 1981, Liverpool de nuevo y Tottenham en 1984, Milan (Copa de Europa) y Nápoles (UEFA) en 1989, Juventus (UEFA) y Parma (Recopa) en 1993, Milan (Copa de Europa) e Inter (UEFA) en 1994 o Parma (UEFA) y Lazio (Recopa) en 1999, última edición de esta.

Pero sólo un país pudo conseguir ganar los tres títulos a la vez. Italia, en 1990, fue el centro del planeta fútbol ganando las tres competiciones. Estuvo cerca varias veces como vimos antes, un total de cuatro veces, pero en el año de su Mundial, Milan, Juventus y Sampodria consiguieron ganar la Copa de Europa, UEFA y Recopa. Incluso la final de UEFA se decidió en Italia, porque el rival de la Juventus fue la Fiorentina.

Para empezar, el 9 de mayo, Estadio Nya Ullevi de Gotemburgo, Suecia. Allí la Sampdoria de Boskov se enfrentaba al Anderlecht de Aad de Mos en la final de la Recopa. En los italianos jugaba un tal Roberto Mancini, en los belgas el número '8' fue Arnór Guðjohnsen, padre del exjugador de Barcelona y Chelsea. El encuentro fue muy igualado, tanto que nos fuimos a la prórroga. En ella, el recientemente fallecido, Gianluca Vialli, marcó dos tantos para darle su primer título al conjunto tricolor.

La siguiente competición en decidirse fue la copa UEFA, que había tenido su primer acto (era final a doble partido) en el antiguo Stadio Comunale de Turín con victoria para la Juventus 3-1 sobre la Fiorentina. Galia abrió el encuentro, Buso empató poco después pero Casiraghi y De Agostini liquidaron el envite. En el encuentro de vuelta disputado en el Stadio Partenio de Avellino, la 'Vecchia Signora' aguantó el envite de los locales y el encuentro terminó empate a cero, dándole el segundo título de la competición al cuadro 'bianconero'.

Por último, 23 de mayo de 1990 en el Praterstadion de Viena, Austria. Allí se daban cita el Milan de Sacchi y el Benfica de Eriksson. El partido fue muy igualado, cerrado. El Milan era favorito pero no encontraba la manera de romper el cero en el marcador, hasta que el neerlandés Frank Rijkaard rompió por el centro de la defensa y con un disparo con el exterior de la pierna derecha batió a Silvino Louro, para conseguir la cuarta Copa de Europa para los 'rossoneri'.

Con el fin de la Recopa en el año 1999, conseguir el 'triplete' de campeones de un mismo país no era posible. Esto fue así hasta el año 2021, cuando la UEFA recuperó la tercera competición continental.

La Recopa de Europa ya era historia, aunque muchos países la pedían de nuevo. En su lugar entró la Conference League, una competición preparada para que los equipos con menos posibilidades de las federaciones menores también puedan competir entre sí.

La temporada pasada, la 21/22, fue la primera edición de la competición, que ganó la Roma de José Mourinho. El Eintracht fue ganador de la Europa League y el Real Madrid, de la Champions. Ningún país repitió campeón.

Esta temporada el discurso puede ser diferente. Primero viviremos hoy la final de la Europa League entre Sevilla y Roma. El próximo miércoles viviremos la de la Conference League, que enfrenta a West Ham contra otro equipo italiano, la Fiorentina. Por último, el plato fuerte, la final de la Champions del próximo día 10 de junio entre el Manchester City y el Inter de Milán.

Inter, Roma y Fiorentina, tres equipos italianos que intentarán repetir la gesta del Milan, Juventus y Sampdoria. Casualmente, ninguno repite, algo que demuestra el cambio y las grandes posibilidades que ofrece el Calcio italiano. Ellos saben que será difícil, pero intentarán quedar en la historia.