Inglaterra blinda a sus jugadoras ante el furor de la afición y manda un aviso a España

La selección de Inglaterra vivió un antes y un después tras la Eurocopa de 2022. Albergar el torneo en casa y ganarlo fue el escaparate perfecto para que los aficionados se interesasen aún más por el fútbol femenino en el país. Desde entonces, se han abierto grandes estadios y se han conseguido nuevos récord de asistencia, lo que ha traído beneficios consigo, pero también una parte negativa que ha llevado a la selección inglesa a poner medidas más estrictas para el final de los partidos y tratar de evitar las avalanchas de aficionados.

El último caso sucedió en Leicester, donde Inglaterra se impuso a Bélgica (1-0) en la segunda jornada de la Nations League. Para salir del King Power Stadium los aficionados tienen que abandonar el estadio por la zona de pie de campo -algo habitual en algunos estadios de Inglaterra- y, tras el encuentro, muchos aprovecharon para quedarse esperando a las jugadoras, obstaculizando la salida del resto de seguidores.

Fue la gota que colmó el vaso. A partir de ahora, la seguridad será más estricta y establecerán, cuando sea posible, un perímetro de seguridad para evitar que se repitan este tipo de situaciones. Una medida que irán implementando poco a poco y que servirá también para bajar el furor entre la afición, para concienciar a los seguidores.

"Nos encanta conocer a los fans, pero se está volviendo algo muy difícil de mantener", explicó Mary Earps, guardameta de la selección inglesa y del Manchester United en la rueda de prensa previa al encuentro ante Bélgica. Earps, una de las jugadoras más aclamadas por la afición, sabe de lo que habla. Tras el último partido de liga contra el Everton, donde el United ganó 0-5, la portera recibió un comentario en Instagram en el agradecían a Ella Toone y Nikita Parris -compañeras de equipo- por parase con los seguidores, mientras le echaban en cara el no haberlo hecho. 

"Intento ignorar comentarios como este, pero después de una buena victoria y pasar mucho tiempo después del partido conociéndoos a muchos de vosotros. Es doloroso llegar a casa y ser etiquetada en comentarios como este. Sé amable", escribió Earps en su cuenta personal.

"La accesibilidad que la gente tiene hacia nosotros como jugadores es algo que creo que es un tema candente de discusión. Es algo que como jugadoras estamos experimentando de una manera muy diferente a medida que cambia el perfil de juego", continuó la portera en rueda de prensa. Y es que ha llegado un punto en el que parece que las jugadoras deben algo a la afición, ellas son conscientes y es una presión extra a las que están sometidas: "La realidad es que, si esa es la expectativa, siempre nos quedaremos cortos".

La afición también ha empezado a moverse y a crecer en España. Tras el Mundial, el número de aficionados que acude a los partidos y que espera a las jugadoras cuando acaban los encuentros es cada vez mayor. Un fenómeno que lleva pasando con el Barça desde hace años atrás, cuando el equipo empezó a cosechar títulos y a ser más reconocido. Un crecimiento que hizo que, aprovechando las obras de adecuación de la ciudad deportiva, el Barça blindara también a sus jugadoras implementando más intimidad.

Las nuevas medidas que toman en Inglaterra sirven como aviso para el resto de selecciones. Las jugadoras están cada vez más expuestas, como dijo Earps en la rueda de prensa durante el parón, y la accesibilidad está cambiando, algo que ellas mismas están experimentando a medida que crece la afición por el fútbol femenino.