FEDERACIÓN

Una de las iniciativas estrella de Rafael Louzán encuentra sus primeros detractores: "Genera desigualdad, clientelismo y falta de transparencia"

La RFEF sorteará 47 invitaciones (siete días con todo pagado) entre los clubes no profesionales para acudir a la Supercopa de Arabia. El Olot se niega a participar.

Rafael Louzán camina por los pasillos de la Ciudad del Fútbol de la RFEF después de ser elegido presidente. /REUTERS
Rafael Louzán camina por los pasillos de la Ciudad del Fútbol de la RFEF después de ser elegido presidente. REUTERS
Manuel Amor

Manuel Amor

La UE Olot, club catalán de Segunda Federación, ha expresado a través de un comunicado su "negativa a participar" en una de las medidas estrella de Rafael Louzán desde que asumió el cargo de presidente de la RFEF: el sorteo de 47 invitaciones entre los equipos no profesionales para acudir a la Supercopa de Arabia. Aunque la Federación entiende el gesto como un guiño a los modestos, el Olot manifiesta su "preocupación por la iniciativa" y cree que fomentará "el clientelismo".

En su exposición, la entidad de la Garrotxa asegura que ya ha informado a Louzán de su decisión y señala cinco puntos por los que, entiende, se crea un desequilibrio con los valores del deporte y que se reproducen de manera íntegra a continuación:

"Desde el club manifestamos nuestra preocupación por decisiones como esta que comportan:

- Una gestión económica ineficiente con muchos recursos dedicados a unos pocos beneficiados.

- Genera desigualdad y fomenta el clientelismo que queremos desterrar.

- Falta de transparencia que pone en duda el sometimiento de decisiones como esta al sistema de 'compliance', que evidentemente no superaría.

- Un lenguaje equívoco que sitúa al fútbol no profesional como máximo beneficiario de decisiones que comportan la promoción de culturas y países con una base social muy débil.

- Poca profundidad en el análisis de ganancias, gastos, superávit y de la desmesurada tesorería de la RFEF donde buscar recursos para la mejora del fútbol no profesional".

Cabe recordar que la Federación sostiene que los clubes no profesionales son "los grandes beneficiarios de la disputa de esta competición" en el extranjero y que desea que los siete días en Arabia (con gastos pagados) sirvan para mantener reuniones de trabajo y escuchar las inquietudes de los conjuntos masculinos y femeninos de Primera, Segunda y Tercera Federación. Louzán, en una carta con todo tipo de detalles a la que tuvo acceso este periódico, anunció el procedimiento con el reparto de plazas y las bases del concurso.

Un club diferente

Con su presidente Joan Agustí a la cabeza, el Olot pretende liderar desde hace tiempo una 'rebelión' autonómica en la RFEF y ha saltado a la palestra mediática por su pretensión de ser un 'Athletic Club' a la catalana. "Somos un equipo identitario y nacionalista, comprometido con nuestra tierra; todos nuestros jugadores están formados deportivamente en Cataluña o en los países catalanes, como Valencia y las Islas Baleares", aseguró Agustí a Relevo en un reportaje publicado hace semanas. Además de cuidar de su primer equipo y la cantera, la entidad centenaria presume de gozar de "proyecto y posicionamiento".

En primer lugar, el cuadro olotí, en palabras de Agustí, defiende "que hay que cambiar el sistema para lograr un fútbol sostenible y regulado, y acabar con el clientelismo que hay alrededor de la Federació Catalana de Futbol (FCF) y la RFEF". Para conseguirlo, el club plantea una reforma en el reparto de recursos: que el 10% de los derechos audiovisuales, en lugar del 2,5% actual, se destinen al fútbol base y al amateur, tanto masculino como femenino. "También reclamamos que se regulen económicamente las competiciones para que los clubes no se endeuden de forma ilimitada y, así, evitar la posibilidad de que caigan en manos de fondos de inversión extranjeros", añadió el directivo.

Así, y aunque resulte 'premiado', el Olot desestimará la invitación para presenciar el torneo que se disputa el próximo mes de enero con Real Madrid, Barcelona, Athletic y Mallorca como equipos participantes. En su nota de prensa, el equipo de la Garrotxa aprovecha para recordar que se mantiene "en la voluntad, manifestada pública y privadamente, de representar a los clubes no profesionales en la Asamblea General de la RFEF para defender un cambio en el sistema organizativo", un objetivo tan importante para sus dirigentes como conseguir la permanencia en Segunda Federación.