Samu Omorodion quiere borrar 'La Línea' que le separa de la Absoluta y mandarle un mensaje a De la Fuente
El delantero del Oporto afronta este parón con la Sub-21 como una oportunidad para reivindicarse. Hoy (contra Kazajistán, 20:30) puede ponerse las botas.

La Línea de La Concepción (Cádiz).- Uno, dos, tres y hasta siete goles en cinco partidos con el Oporto no bastaron a Samu Omorodion (20 años) para derribar la puerta de la Absoluta y presentarse por primera vez a las órdenes de Luis de la Fuente. Joselu tiene la llave echada y el melillense afronta el parón con la Sub-21 como una oportunidad, una ventana para reivindicarse y demostrarle al riojano que no debe tardar en reclutarle; este viernes, contra Kazajistán y en La Línea (20:30, Teledeporte), el delantero dispone de su primera bala para demostrar que está para más.
El ariete es la gran estrella de la Rojita de Santi Denia, ya con el billete para el Europeo del próximo verano y que jugará sin presión los dos partidos que le quedan de la fase de clasificación. Primero el de esta noche, en el renovado campo de la Balona, y el martes en Algeciras y ante Malta. Si España es líder e invicta, Kazajistán ha ganado sólo dos encuentros (ambos a Malta) y presenta números pobres: siete goles a favor y 18 en contra. Los malteses todavía no han estrenado su casillero, han marcado tres dianas y han recibido 27. El escenario es ideal para que atacantes como Samu se pongan las botas, por mucho que el entrenador insista en la dificultad del rival y en que sus futbolistas deberán "dar el máximo" para vencer.
El duelo tiene otros alicientes: ver debutar a irrupciones como Yeremay (Deportivo), Hugo Álvarez (Celta) o Roberto Fernández (Sporting de Braga), pletóricos en este inicio de temporada, y especialmente a Peque (Sevilla) y Marc Casadó (Barcelona). El primero ya estuvo cerca de acudir el curso pasado, cuando jugaba en Segunda con el Racing, pero ni sus 19 goles ni su extraordinario talento le bastaron para colarse en alguna de las listas. Ahora, ya asentado como mediapunta en el 4-2-3-1 de García Pimienta, llega a la Selección con otro rol y con perspectivas de ser importante.

Casadó, por su parte, ha entrado en el radar de De la Fuente por su rigor con balón, capacidad para organizar el juego, pulmones y liderazgo. Para Flick es un indiscutible y suma ya casi 600 minutos. Antes de pegar el salto a la Absoluta le toca pasar por la mili. A Denia, que ya lo siguió muy de cerca en el Barça Atlètic, le encanta y está convencido de que puede convertirse a la larga en indispensable. En este parón hay otros dos futbolistas que han vuelto con ganas de quedarse (Hugo Bueno, lateral izquierdo del Feyenoord, y José Ángel Carmona, lateral derecho del Sevilla) y que tratarán de demostrar. Álvaro Carreras, '3' del Benfica, o Nico González, hijo de Fran que destaca en el Oporto, se han quedado fuera porque el Europeo 2025 coincide con el nuevo Mundial de Clubes y no parece demasiado probable que puedan viajar con la Sub-21 en lugar de con su equipo.
Para eso le servirá también al staff este parón: han agitado el árbol en busca de sangre fresca y para abrir el abanico de cara al torneo de Eslovaquia, que será lo verdaderamente relevante durante los próximos meses. Hay referentes ya consolidados (Mosquera, central del Valencia; Juanlu, lateral derecho del Sevilla; o Turrientes, centrocampista de la Real y el cerebro); otros con ganas de que esto les sirva para olvidar el mal momento que viven en sus clubes a causa de la situación colectiva (Javi Guerra); y algunos que siempre afrontan estas llamadas como una oportunidad para seguir mostrándose al público español (Dean Huijsen, zaguero del Bournemouth y que jugará estos días a 70 kilómetros de su casa, Marbella).
Se espera un buen ambiente
La Rojita se dio un baño de masas en su entrenamiento de ayer (Omorodion fue el más aclamado) y la RFEF garantiza un buen ambiente esta tarde en el Municipal. La Selección jamás se había presentado en esta localidad gaditana y, aunque los alicientes deportivos parezcan pocos, en el vestuario se ha planteado un reto: terminar invictos esta fase de clasificación y aterrizar en el Europeo como una de las grandísimas favoritas a pelear por el oro. Muchos ya tienen experiencia en colgarse medallas al cuello (París) y la cruel derrota en la final del último Europeo, el de 2023 contra la Inglaterra de Cole Palmer, todavía tiene a Denia y a la RFEF con un mal sabor.
El precedente de la ida contra los kazajos (0-4 en Astaná) invita a pensar en que esta tarde también se verá un partido de goles. Aquel día, por cierto, marcó Samu. Y otro dato: pitará una árbitra, la italiana Ferrieri Caputi. La comarca del Campo de Gibraltar se prepara para vivir un día grande y comprobar que Omorodion, el futuro '9' de la Selección y el que debe pelear con Morata por un puesto de cara al Mundial 2026, es tan fiero en directo como lo parece por televisión.