'CASO CARMELO'

Relato de un jugador "estafado" por un agente: "Me ha destrozado"

Javi Castellano, exfutbolista de Las Palmas, denuncia su situación en Relevo: "Le dije que no le iba a dar ni un puto duro más".

De izquierda a derecha: Jorge Santomé, Javi Castellano, José (el primo de Carmelo) y Carmelo Vicente Parra. /Cedida por Javi Castellano.
De izquierda a derecha: Jorge Santomé, Javi Castellano, José (el primo de Carmelo) y Carmelo Vicente Parra. Cedida por Javi Castellano.
Sandra Riquelme
Michèle Novovitch

Sandra Riquelme y Michèle Novovitch

Paul Joseph Goebbels, el controvertido ministro de propaganda del Tercer Reich, maestro de la manipulación, tenía razón. Si repites una mentira mil veces, se convierte en una verdad. Durante más de un año, Javi Castellano (Las Palmas de Gran Canaria, 2 de noviembre de 1987) se creyó todas las mentiras que le contó Carmelo Vicente Parra. Fue el tiempo que el agente de futbolistas tardó en hundir la carrera deportiva del jugador canario y en estafarle más de 60.000€, según el jugador. "Lo que más me jode es que me ha robado mis últimos años como futbolista. Me ha destrozado y me siento estafado".

Un contrato millonario en Emiratos Árabes, un suculento precontrato en el Málaga, el interés del Eibar y la garantía de la familiaridad con la presidenta del club, Bélgica…una sarta de mentiras para mantener enganchado al futbolista y lograr que ni escuchara otras ofertas.

Desde que conoció a Carmelo, Javi y su familia viven un calvario. Amenazados por un contrato de confidencialidad abusivo -que promete con castigarle con 600.000€ si abre la boca-, han vivido el último año y medio de su vida en un bucle de mentiras y de falsas promesas. Ahora, con el asunto en manos de sus abogados y de la Justicia -denuncia de por medio- Javi ha roto su silencio en Relevo y provocado una oleada de testimonios de otras víctimas en el fútbol español. "Carmelo se va a acordar toda su vida de mí, pero para mal. Siempre se preguntará: '¿Por qué le jodí la vida a este chico?'".

La primera mentira: el Eibar

El 10 de junio de 2021, Javi Castellano rescindió su contrato con Las Palmas, el equipo en el que había jugado durante las últimas 10 temporadas. Antes, el futbolista había pasado por el Real Unión de Irún, el filial del Mallorca, el Albacete y la Cultural Leonesa. Deivid Rodríguez, su amigo y exfutbolista de Las Palmas, le presenta a Carmelo Vicente Parra y a Jorge Santomé. "Carmelo me dice que tiene un equipo de Segunda División, pero que no me va a dar el nombre. Más tarde, me cuenta que es el Eibar y que si no sale, maneja otra oferta del Logroñés, de 1ª RFEF. No conocía a Carmelo Vicente, nunca había escuchado su nombre, pero si te viene con esas...", reflexiona Javi.

A los pocos días, Carmelo llama a Javi para avisarle que lo del Eibar no va para adelante. "Me dice que nada, pero que él conoce a la presidenta del Eibar, Amaia Gorostiza, que es como su prima segunda, y que no se va a molestar. Que le jode mucho hacer esto, pero que le pesan más la oferta del Logroñés y mi bienestar".

Relevo se ha puesto en contacto con todos y cada uno de los clubes involucrados, empezando por el Eibar. Desde el club armero son tajantes: "El nombre de Carmelo Vicente Parra no nos consta a nadie, ni de la dirección deportiva ni de la presidencia. La presidenta, además, no conoce a los futbolista y a los agentes hasta que llegan al club". La primera, en la frente.

La UD Logroñés le adelanta 13.000€... para pagarle a Carmelo

Tras la primera mentira, vino la primera verdad -la única que van a leer en todo el relato-. Carmelo le ofrece un jugoso contrato en la UD Logroñés: 130.000€ por una temporada, la 2021-22, y gana así su confianza. "Tiempo atrás, me habían hecho una oferta del Logroñés por medio de otro representante con mucho menos dinero de por medio. Si este ha conseguido más, será porque tiene buenos contactos. Pues vamos a Logroño con él", esgrime Javi.

Javi Castellano relata su primer contacto con Carmelo y su primer contrato.

Carmelo y Javi se ven por primera vez en Bilbao, el día antes de fichar por el Logroñés. Javi va descubriendo, poco a poco, que Carmelo es un tipo peculiar: solo habla por mensaje o por teléfono, muy pocos whatsapps. Le tutea y desde el principio, aun sin conocerse, establece una relación de mucha familiaridad. Hasta el punto de referirse a él siempre con apelativos cariñosos como "padre" o "churra". Además, Carmelo tarda medio segundo en hablarle de su vida personal: es jurista, viudo -su mujer murió de cáncer- y cuida él solo de sus dos hijos. "Empatiza mucho contigo. Nosotros tenemos dos niños y el padre de mi mujer falleció por la misma enfermedad. Piensas que es imposible que te esté mintiendo", destaca.

La noche previa a firmar por el Logroñés y de pasar el reconocimiento médico -el 30 de agosto-, van a cenar. "Me cuenta que el vicepresidente del club, que es muy majo, Juanjo Guerreros, me va a hacer una transferencia para que les pague las comisiones. Me pasa los números de sus cuentas por whatsapp y enseguida recibo el ingreso: 13.000€ (a las 22:16h)", explica. Al día siguiente, Javi paga a Carmelo (5.334€), a Jorge Santomé (3.833€) y a Deivid (3.833€). Concepto: devolución.

Javi se ha dado cuenta ahora de que ese ingreso de 13.000€ era un anticipo de su nómina. "Estaba pagando ese dinero de mi propio bolsillo. El club me lo estaba adelantando sin haber pasado el reconocimiento médico y sin haber firmado el contrato federativo ni con el club", recuerda con rabia.

Juanjo Guerreros, el vicepresidente del club riojano y con el que Relevo se ha puesto en contacto, esgrime que el contrato ya se había firmado vía telefónica -una práctica muy habitual entre los agentes, los futbolistas y los clubes, según Guerreros- y que fue Carmelo quien le pidió ese anticipo para Javi. "Me comentó que el jugador necesitaba liquidez, que tenía que venir desde Canarias, que si el ferry, que si le pedían dos meses de fianza en el piso, etc. Se lo consulté al propietario del club y me dijo que adelante. El Logroñés es un club modélico y ha tributado hasta el último céntimo", explica.

Por su parte, Jorge Santomé se puso en contacto con Relevo para asegurar que él no tiene nada que ver con Carmelo Vicente Parra: "No tengo absolutamente nada que ver con esta persona, ni relación personal ni profesional. La única operación que hicimos de forma conjunta fue la del Logroñés. Yo no estaba al tanto de que Carmelo le había dicho al vicepresidente del Logroñés que necesitaba el adelanto porque Javi Catellano no tenía liquidez. Yo lo vi como una operación normal porque es algo habitual que se anticipe ese dinero para la comisión. Pero a partir de ahí no he vuelto a saber absolutamente nada de él".

Javi asegura que durante el primer mes durmió en el Hotel Los Bracos, pagado por el club. Además, insiste: nunca cogió un ferry y viajó en avión desde Las Palmas.

«¿Quién es ese jugador? Tráemelo a Emiratos»

Los días en Logroño transcurren con normalidad. Javi lo juega todo y el Logroñés avanza firme hacia su objetivo: el play-off de ascenso a Segunda División. El 5 de octubre, a las 7:21h de la mañana, Carmelo irrumpe en su calma.

Javi Castellano detalla el contrato con el equipo de Emiratos Árabes.

El agente le dice que tiene un "notición espectacular" que darle: un contrato en Emiratos Árabes, para las temporadas 2023-24 y la 2024-25, a razón -como mínimo- de 720.000€ por temporada. "Estaba viendo un partido tuyo con un amigo mío de Emiratos, Mohamed, y se ha enamorado de ti. '¿Quién ese ese jugador? Tráemelo', me ha dicho'", recuerda Javi.

Tras la llamada, a Carmelo le urgen dos asuntos: que Javi Castellano no cuente nada -"Me advierte de que no se lo cuente ni a mi mujer ni a nadie"- y firmar el contrato cuanto antes. Le pide a Javi que baje a Sevilla a rubricarlo con un notario: "Me insiste en que hay que hacerlo así, que son cantidades muy altas y que los dos vamos a ganar mucho dinero". Javi, que disputa un partido en dos días, le ruega que firmen el contrato en Bilbao y dicho y hecho, Carmelo encuentra rápidamente un notario: Juan Ignacio Bustamante Esparza.

Un contrato de confidencialidad de «por vida» y un seguro de 72.000€

La presunta estafa alcanza su punto culmen cuando Javi y su mujer -el futbolista le pide que viaje desde Canarias a Bilbao porque ya empieza a sospechar de Carmelo- van al notario y les plantan un seguro y un contrato de confidencialidad.

Javi Castellano recuerda la escena en la notaría, en la que firma el contrato de confidencialidad.

"Carmelo me cuenta que Mohamed nos exige firmar un seguro, porque hay muchos jugadores que se arrepienten; como el contrato es a dos años vista, si están bien en sus equipos pasan de moverse y se van de rositas, sin pagar una indemnización ni nada", relata Javi. El seguro en cuestión es de 72.000€, el 10% del hipotético contrato de la primera temporada, pero Javi se niega a pagar esa cantidad. Carmelo reacciona raudo y le propone ir a medias, él pagara una mitad y Javi, la otra.

La segunda sorpresa, sin apenas tiempo para digerir la primera, llega cuando Carmelo aparece con un contrato de confidencialidad. El acuerdo es de por vida e incluye una penalización de 600.000€ para la parte incumplidora. Es decir, para quien se vaya de la lengua. Con este acuerdo, Carmelo se asegura de que Javi -que acaba firmando- no cuente nada.

Relevo ha consultado a otros futbolistas presuntamente estafados por Carmelo -según Javi, es imposible determinar el número exacto- y confirmado que el procedimiento es una práctica habitual. El agente aprovecha la amenaza de los 600.000€ para mantener a salvo su castillo de naipes.

"En ese momento nosotros no estábamos asesorados. Ves a un notario y un contrato y te lo crees todo, piensas que todo es legal". Cuando Javi y su mujer pusieron el asunto en manos de sus abogados, descubrieron el pastel. "'¿Qué notario da fe a esto? ¿qué notario da fe a este tipo de documento que es abusivo y solo es perjudicial para ti?", se alarmaron".

Cuando salen de la notaría, Carmelo le insiste a Javi con la transferencia: que se la envíe ya -para que no le cobren el IVA- y de dos veces, pero que no sean las mismas cantidades. Además, le pide que no ponga nada ni de comisión, ni de seguro, ni de Emiratos Árabes, sólo "gratificación de alquiler a cuenta pasada". Javi le ingresa 22.840€ en la primera transferencia y 16.840€ en la segunda, 39.680€ en total. "Yo acabo de salir de una notaría…", se lamenta Javi, incrédulo, "con un notario delante, ¿qué va a ir mal?"."

El contrato falso del Málaga

Otro de los principios de Goebbels, y una de sus frases más famosas, reza: "Cuanto más grande sea una mentira, más gente la creerá". Carmelo lleva tanto tiempo mintiendo que ha adoptado formas y métodos de estafador profesional.

Los detalles del supuesto precontrato del Málaga que Javi Castellano firmó con Carmelo.

Por febrero, antes de que termine la temporada 2021-2022, Carmelo le ofrece a Javi un precontrato con el Málaga, de Segunda División. Todo cuadra: una de las exigencias de Mohamed, su amigo de Emiratos Árabes, es que el curso previo a su fichaje, tiene que competir en un equipo de Segunda División. "Todo iba rodado", recuerda Javi con rabia. El contrato es para la temporada 2022-23, a razón de 180.000€.

Javi y Carmelo quedan en el Hotel Los Bracos, en Logroño, el 10 de marzo. Cuando están allí, Carmelo le da el contrato. "Me dice que lo ha hablado todo con José María Muñoz, el administrador judicial del Málaga, y que Manolo Gaspar, el director deportivo, es 'un pintao'". También le cuenta que en vez de 180.000€, va a recibir 240.000€. Son las ventajas de tener una buena relación con José María Muñoz, se regodea el representante.

Por ese incremento del salario, Carmelo le pide 6.000€ de comisión - Javi ya le había pagado 18.000€-. Quedan, otra vez, en pagarlo a medias. Sin embargo, y en esta ocasión, Carmelo le dice que se lo dé en mano, que no le haga ninguna transferencia. "Siempre quería el dinero para ya. Tiene que estar metido en algo muy turbio para buscar el dinero con tanta inmediatez".

"Revisé absolutamente todo. El contrato llevaba el sello del Málaga, los datos del club, aparecían el nombre y la firma de José María Muñoz -previamente, Javi había googleado su nombre para ver si correspondía con el cargo-. Además, había cláusulas totalmente lógicas en un contrato: no podía vivir a más de 50 kilómetros de Málaga, si el equipo descendía el contrato no se haría efectivo, etc.", recuerda el ex del Las Palmas.

El Málaga, con el que Relevo se ha puesto en contacto, afirma por activa y por pasiva que no tiene nada que ver con Carmelo Vicente Parra: "Desde el club, nunca se ha realizado ningún tipo de ofrecimiento o contacto ni con el entorno del jugador ni con él mismo. Ni mucho menos se mantuvo ningún tipo de contacto con el intermediario cuyo nombre nos han indicado".

Javi se planta: «No te voy a dar ni un puto duro más»

Carmelo tensó tanto la cuerda, que la acabó rompiendo. La paciencia de Javi, que veía cómo sus últimos años como futbolista se le escapaban entre las manos, se agotó y se plantó: "No te vas a reír más de mí".

Desde que Javi se negó a pagarle más dinero, Carmelo cambió radicalmente su relación con él.

Cuando acabó la temporada con el Logroñés, Javi se marchó de vacaciones a Las Palmas. Firmado el precontrato con el Málaga y condicionado por Carmelo, Javi rechazó varias ofertas de otros clubes: -"Yo le trasladaba el interés de otros equipos y él me decía que todo lo que me llegaba era de risa, que por esa mierda de dinero no me iba a mover".

Hasta que un día, Carmelo le llama para decirle que el Málaga se está echando para atrás y que cree que no van a cumplir con su palabra. A cambio, y para contrarrestar la mala noticia, su amigo Mohamed le quiere ya. "Dice que me vaya para allí en cuanto acabe el Mundial de Catar, que rompemos el precontrato con el Málaga y listo. Además, me dice que en vez de 720.000€, me van a dar 900.000€", recuerda.

Esos 900.000€ vienen con regalo, por supuesto. Carmelo le exige a Javi el 10% de la diferencia entre la nómina anterior y la actual, 18.000€, y Javi revienta: "No te voy a pagar ni un puto duro más. Me da igual, no voy a romper el precontrato con el Málaga, me voy allí. Si no me quieren, denuncio a la AFE y, si no, voy al seguro, porque tengo un contrato firmado con ellos. Llama a Mohamed y dile que se acabó, que voy a ir, que de mí no va a salir más dinero". A los tres días, Carmelo ya había buscado a otra víctima, a la que le fue con el mismo modus operandi... y picó.

Un cambio radical

A partir de ese momento, Carmelo desaparece. Y cuando le coge el teléfono alude a la enfermedad de su padre, que está muy grave en el hospital y que ocupa todo su tiempo.

Sin embargo, Carmelo intenta un último ingreso. Sabe que Javi está desesperado, la temporada ya ha empezado y está sin equipo, y le habla del KMSK Deinze belga. "Cuenta que se lleva muy bien con el director deportivo, Adrián Espárraga, y que están esperando a que se vaya un centrocampista defensivo para que vaya para allí", destaca Javi. La oferta es por una temporada y la remuneración de 120.000€ brutos más el pago del piso.

Relevo localizó a Adrián y fue tajante: "No he oído hablar de su nombre en mi vida. Además, en Bélgica, por ley, los pisos no se pagan". Por supuesto, Javi no volvió a saber nada más de esa supuesta oferta. Tras esta odisea, y con todas las pruebas en la mano, el 4 de octubre de 2022, Javi, acompañado por su pareja, denuncia a Carmelo Vicente Parra.

De momento el caso está en archivo de sobreseimiento a la espera de las pruebas, pero los abogados de Javi ya han presentado el recurso de apelación. "No entiendo nada, tenemos todas las pruebas y sus delitos son evidentes. Nadie se atreve a sacar su cara ni a hablar de él, pero yo tengo fotos con él y no me voy a quedar de brazos cruzados. Se va a acordar de mí para siempre. Y se preguntará: '¿Por qué se lo hice a él?' Pues mira, por este chico te van a salir más [denuncias] y te vas a joder, porque tú has jodido mi vida".