PREMIER LEAGUE

En la mesa de fichajes del Chelsea: "a impulsos" pero con asterisco

Todd Boehly lidera una política de fichajes que sorprende al fútbol europeo. Más de 600 millones invertidos desde su llegada.

Behdad Eghbali, Graham Potter y Todd Boehly./Getty Images
Behdad Eghbali, Graham Potter y Todd Boehly. Getty Images
Álvaro de Grado

Álvaro de Grado

La pregunta ha sido recurrente en los últimos meses: ¿Por qué gasta tanto el Chelsea? Desde la llegada de Todd Boehly al club de Stamford Bridge, el desembolso de los blues ha excedido los 600 millones, la mitad de ellos en el mercado invernal. La respuesta podría ser muy rápida -porque los tiene-, aunque también se puede explicar porque la nueva propiedad ha querido dar un impulso al equipo.

Sin embargo, hay un segundo interrogante igual de interesante: ¿Quién ficha en el Chelsea? Justo cuando comenzó 2023, el club emitió un comunicado: "Todd Boehly se retira de su puesto interino como director deportivo", explicaba el Chelsea.

En todas laos movimientos del verano, el americano actuó como principal cabeza visible en todas las negociaciones y decisiones que tomaron los blues, donde se incluían fichajes millonarios como Sterling, Fofana o Cucurella, pasando por el despido de un entrenador (Thomas Tuchel) y la contratación de otro (Graham Potter).

Así ficha Boehly

En la mesa de negociación, Boehly es eficiente. Aunque no domina la industria del fútbol, quiere estar presente en todos los procesos para entender el funcionamiento del club, y posteriormente delegar en su gente de confianza. Cuando ha tenido un objetivo, ha ido a por él. Llama personalmente a los agentes, organiza una reunión en persona y expone sus planes para el futbolista.

Christopher Vivell, Joao Felix y Paul Winstanley. AFP
Christopher Vivell, Joao Felix y Paul Winstanley. AFP

Entre verano e invierno, Boehly comenzó la búsqueda de un director deportivo al uso, alguien que tuviera los conocimientos futbolísticos necesarios, así como el dominio del mercado. Cuando tanteó a varios de los mejores clubes de Europa, una de sus condiciones fue que él seguiría teniendo voz y mando en muchas decisiones, lo que echó atrás a otros candidatos que tuvo en consideración.

El equipo de trabajo

Justo antes del mercado invernal, el Chelsea anunció el fichaje de Christopher Vivell como nuevo Director Técnico. Su pasado de cinco años en la factoría Red Bull entre Leipzig y Salzburgo mostraba un historial en el que merecía la pena apostar. Con su firma se sucedieron compras tan exitosas como Haaland, Gvardiol, Sesko, Werner, Adeyemi... A su llegada a Londres, declaró: "El Chelsea está construyendo el proyecto más atractivo del fútbol mundial y estoy muy orgulloso de llegar al club. Hay mucho potencial para tener éxito".

Al lado de Vivell, el Chelsea ha colocado a dos directores deportivos: Lawrence Stewart (Manchester City, RB Leipzig o Federación inglesa) y Paul Winstanley (ocho años en el Brighton, foto superior). Además, por debajo de ellos, existe una estructura con otra serie de personas como Kyle Macaulay, Jim Fraser y Joe Shields, con pasado en el Manchester City y, después, en el Southampton. Precisamente, en los Saints puso su sello en fichajes jóvenes y con potencial como el de Romeo Lavia (a quien el Chelsea intentó fichar en verano), lo que le valió para ganar puntos y llegar a Stamford Bridge.

A pesar de que en la teoría Boehly ha dado un paso al lado para que los antes mencionados lideren las negociaciones -y así se explicó en el comunicado del club, dando la bienvenida a Vivell-, la realidad es que el propietario está plenamente involucrado en los fichajes. Es más, el propio Boehly y Behdad Eghbali -copropietario, foto de portada- fueron los que ejecutaron toda la operación de Enzo Fernández.

Enzo Fernández, 121 millones de euros. Getty Images
Enzo Fernández, 121 millones de euros. Getty Images

«Impulsos» y 300 millones en invierno

El Chelsea ha hecho saltar por los aires el mercado invernal. Sólo ellos han gastado más que el resto de las grandes ligas juntas. Se mueven "a impulsos", según declaran algunos agentes que han estado en contacto con ellos. La definición más repetida es que el Chelsea tiene un estilo "muy americano ", algo que se ha visto reflejado en la duración de los contratos de los nuevos fichajes, con vinculaciones de seis, siete y hasta ocho años.

Este asterisco salva todos esos "impulsos": el precio del traspaso se divide entre todos los años de contrato, por lo que el riesgo es menor. Aunque las cifras son mareantes para una única ventana de traspasos, hay otras señales: "En salarios no ha perdido la cabeza, opta por firmar muchas temporadas porque le sale a cuenta con una amortización más asequible a la larga", dicen sobre él.

"Quiere devolver al club con los mejores y sabe que tiene que invertir ahora", cuentan quienes han tratado con Boehly en los últimos meses. Hasta ocho llegadas han puesto el listón por encima de los 300 millones (Enzo Fernández, Mudryk, Joao Felix, Badiashile, Datro Fofana, Madueke, Andrey Santos, Malo Gusto), de las cuales habrá cinco que ni siquiera podrán disputar las eliminatorias de la Champions League ya que sólo se permiten tres fichas nuevas.

Con el Chelsea en la 10ª posición de la Premier League y a 10 puntos de las primeras cuatro posiciones, la que dan acceso a la Champions, la respuesta debe ser inmediata: victorias y más victorias para remontar todo lo posible y competir en Europa la próxima temporada, el objetivo mínimo que quiere "el proyecto más atractivo del fútbol mundial".