Gol de oro y gol de plata: ¿por qué fracasaron estas normas?
En la década de los 90, la FIFA decidió innovar con la prórroga buscando partidos emocionantes. El experimento duró diez años.

El fútbol además de un deporte es un espectáculo. Por este motivo, desde la International Football Association Board (IFAB) se suelen modificar sus normas para potenciar el show y atraer a los espectadores. Tradicionalmente, el espectáculo se identifica con los goles y el juego de ataque. La especulación, la defensa y el control absoluto pueden traducirse en bajas audiencias televisivas y menos entradas vendidas: si el juego se convierte en aburrido y predecible es malo para todos.
A inicios de la década de los 90, la FIFA detectó que en la prórroga de los partidos, por miedo a perder, los equipos se volvían más conservadores, prefiriendo la llegada de la tanda de penaltis que la posibilidad de quedar eliminados sin posibilidad de reaccionar. Por ello, buscaron maneras de promocionar la toma de riesgos en pos, sobre todo, de que pasasen cosas. Para ello, recuperaron una idea que aunque en la época parecía novedosa, lo cierto es que ya existía en el protofútbol.
No en vano, en la Copa Youdan, el primer torneo de fútbol del que se tiene constancia, ya existía una regla de muerte súbita en caso de que el partido terminase empatado en los 90 minutos reglamentarios. Entonces, la regla hacía que los equipos siguiesen jugando durante una hora hasta que uno de los dos marcase un gol. Es el precedente histórico a lo que en 1993 se llamó el gol de oro.
Qué es el gol de oro
La FIFA decidió cambiar el nombre porque consideraba que "muerte súbita" tenía connotaciones demasiado negativas para un espectáculo deportivo. La alternativa elegida hacía referencia a la importancia que se le otorgaba al gol. El gol de oro era un método de desempate según el cual si durante los 30 minutos de prórroga se producía un gol, el partido se terminaba inmediatamente con victoria para el equipo que había conseguido anotar.
Con esta idea, el máximo organismo del fútbol mundial pretendía estimular el fútbol ofensivo durante el tiempo extra, creyendo que los equipos se lanzarían a conseguir ese gol que les otorgaba el triunfo instantáneo. Pese a que se aprobó en 1993, su implantación fue progresiva. Seguramente, el gol de oro más famoso fue el que decidió la Eurocopa de Inglaterra 1996. En la final entre Alemania y la República Checa, los 90 minutos terminaron con empate a uno en el marcador. Así las cosas, el encuentro se fue a la prórroga y en el minuto 95, el delantero centro germano Oliver Bierhoff, consiguió el tanto que otorgó la victoria automática a la Manchstaff.
No fue la única final europea dirimida bajo esta regla. En la Euro 2000, Francia consiguió levantar el título continental gracias a un tanto de David Trezeguet en el minuto 103 de la final contra Italia. Fue un desenlace de película para los galos, ya que hasta el minuto 93 los italianos tenían el título en el bolsillo gracias al gol inicial de Marco Delvecchio en el minuto 55. Sin embargo, el conjunto francés empató la final en el 94 con un gol de Sylvian Wiltord que envió el partido a la prórroga, donde decidieron con un gol de oro para la historia.
En España, el partido de mayor calado decidido por un gol de oro fue la final de la Copa de la UEFA disputada por el Deportivo Alavés contra el Liverpool en 2001. El partido, uno de los más emocionantes de la historia, terminó el tiempo reglamentario 4-4. La crueldad se cebó con el conjunto vasco en el tiempo extra, ya que perdió el choque más importante de su historia por un gol en propia meta de Delfi Geli, que supuso el título para los ingleses.
La norma fue muy polémica desde su concepción porque muchos aficionados consideraban injusto el hecho de que el equipo que recibía un gol no tuviese oportunidad de rehacerse e intentar darle la vuelta al partido. Además, la FIFA comprobó que la regla no estaba obedeciendo a su principal objetivo, pues los equipos ante el miedo de recibir un tanto definitivo tendían a echarse a atrás y a especular más con el juego aún si cabe.
Qué es el gol de plata
Para la temporada 2002/03, la casa del fútbol introdujo una variación a la que llamó gol de plata. La nueva norma buscaba corregir el factor de crueldad que suponía perder el partido tras recibir un gol sin posibilidad alguna de reponerse. El gol de plata estipulaba que si durante el primer tiempo de la prórroga un equipo marcaba un gol, el partido terminaría al descanso si el otro equipo no conseguía igualar el marcador. Por otro lado, si el choque llegaba empatado al intermedio del tiempo extra, esta se disputaba completa.
El gol de plata estuvo en activo hasta después de la Euro 2004, aunque no dejó tantos momentos memorables como sí lo hiciese el gol de oro. Quizá, el choque más relevante resuelto por gol de plata fue la semifinal de dicha Eurocopa disputada entre Grecia y la República Checa. Los griegos aprovecharon la norma para adjudicarse el pase a la final gracias a un gol de cabeza de Traianos Dellas a la salida de un córner justo cuando se aproximaba el final de la primera parte de la prórroga. El conjunto heleno pasó a la final, donde se proclamó campeón en una de las mayores sorpresas de la historia del fútbol internacional.
¿Cuándo dejaron de utilizarse?
Tanto el gol de oro como el de plata se recuerdan como experimentos fallidos ya que recibieron la desaprobación de varios equipos y jugadores, generalmente aquellos que se encontraron en el lado perdedor. Además, la FIFA entendió que ninguna de las dos normas cumplían con el objetivo con el que se implantaron: el potenciar el juego ofensivo y la toma de riesgos durante el tiempo esta. Por ello, en 2004, después de la Eurocopa jugada ese año, ambas normas fueron abolidas simultáneamente.
Y ahora...¿Cuánto dura una prórroga?
A cambio, el máximo organismo del fútbol internacional volvió a establecer que, si en una eliminatoria en la que tuviese que haber un ganador, ya fuese a doble partido o directa, después del tiempo reglamentario se disputarán 30 minutos adicionales divididos en dos partes de 15 minutos cada una. Antes del inicio del tiempo extra, existe un pequeño descanso de 5 minutos en el que los equipos no se pueden marchar a vestuarios.
Si la prórroga termina con empate en el marcador, entonces la eliminatoria se decide desde el punto de penalti. Cada equipo tiene cinco lanzamientos para conseguir más goles que el contrario. En caso de que terminen la tanda inicial igualados, se procede a lanzar penales de manera intercalada hasta que un equipo supere al otro con el mismo número de penaltis tirados. No existe un límite para la cantidad de penaltis, lanzándose de manera interrumpida hasta que exista un ganador.