Del Piero 'ficha' por el Getafe
La leyenda italiana presenció el partido ante el Real Madrid desde el palco. Dos de sus hijos juegan en la cantera del club azulón.

El inicio del Getafe - Real Madrid no ofrece tregua. El Coliseum, hasta la bandera, sufre las diabluras de Vinícius y lamenta el tempranísimo gol de Militão. Los focos apuntan al césped, pero los ojos de la Tribuna se desvían irremediablemente hacia el palco. Ramón Planes, director general de la entidad madrileña, tiene a su lado a un acompañante de lujo: Alessandro del Piero. Quique, que padece las dificultades ofensivas de su equipo, suspira para que se vista de corto y acompañe a Ünal y Mayoral. Pero Del Piero está en Getafe por motivos muy distintos.
A mediados de agosto, varias fotos del histórico jugador de la Juventus en la ciudad deportiva azulona causaron estupor entre los aficionados del Geta. ¿Qué hacía allí Del Piero? El motivo es que dos de sus hijos, Tobias (nacido en el 2007) y Sasha (del 2010), han fichado esta temporada por equipos de base del club. El primero, en edad cadete, comenzó a prueba. Su nivel convenció a los técnicos y competirá esta temporada con el equipo del sur de Madrid.
La capital de España, su nueva casa
El cambio de residencia de la familia Del Piero ha motivado su incorporación. Los Ángeles fue su hogar durante los últimos años, pero Alessandro y los suyos han escogido Madrid como siguiente parada. El exfutbolista trabaja ahora como comentarista para la televisión italiana Sky. La facilidad para desplazarse a Milán, ciudad que visita con frecuencia para cumplir con su nueva labor profesional, ha sido una de las claves de la decisión.
Sus hijos compaginan los estudios en un colegio americano con la práctica del fútbol. Alessandro, cuentan desde el club, prima la discreción. Quiere que el apellido no condicione a sus vástagos, que se les trate como a uno más y no despertar demasiada atención. Durante el verano, Del Piero y su hijo mayor, Tobias, aprovecharon las vacaciones para visitar las instalaciones de Valdebebas y fotografiarse con Benzema, Modric o Rodrygo, a los que también pudieron saludar este sábado.

Sin hacer ruido, o por lo menos sin pretenderlo, Del Piero ya es un aficionado más del Getafe. En la zona noble del estadio azulón coincidió con otra leyenda, Roberto Carlos, con el que también compartió impresiones. Ambos se midieron en la final de la Champions de 1998 que se llevaron los blancos con el histórico gol de Mijatović. Pocos podrían pensar entonces que Del Piero, por unas cosas o por otras, acabaría en Getafe. El Coliseum ya tiene un asiento reservado para il Capitano.