Países Bajos quiere revancha y Croacia, cerrar el círculo

Dos selecciones y un único objetivo: disputar la final de la Nations League. Esta competición le ha dado a algunas selecciones la posibilidad de luchar por un título. ¿Menor? Sí, por supuesto, pero no por ello deja de ser un título. Croacia y Países Bajos, dos selecciones que en los últimos años han pisado fases finales de Eurocopas y Mundiales tienen la gran oportunidad de darle una alegría a sus aficionados pero una de ellas se quedará en el camino.

La KNVB (Federación de los Países Bajos), junto a la UEFA, decidieron que este partido se juegue en Rotterdam. No es algo casual haber elegido esta sede, ya que De Kuip (el estadio del Feyenoord) es uno de los más calientes de Europa y se espera que la afición neerlandesa que asista al partido meta presión, algo que falta un poco más cuando los partidos se disputan en Ámsterdam.

En lo deportivo, Países Bajos y Croacia son dos selecciones con una actualidad similar, que llegaron a estancias decisivas en los últimos diez años pero que no han podido concretarlo con títulos. Recordamos la final y semifinales de Países Bajos en los Mundiales de 2010 y 2014 o los cuartos de final del pasado Mundial de Catar. Además, los 'naranjas' llegaron a la final de la Nations League de 2019, que perdieron contra Portugal por 1-0, por lo que este torneo es su gran oportunidad de volver a conseguir un torneo absoluto desde la Euro '88.

Por otro lado están los balcánicos, que fueron subcampeones en Rusia 2018 y consiguieron el tercer puesto en el Mundial de Catar 2022. La generación de los Modric, Brozovic, Perisic o Kramaric sigue vigente y conseguir este título sería cerrar un círculo que abrieron con Dalic. El entrenador fue claro, sabe que no son favoritos: "Nos enfrentamos a, quizás, los rivales más duros del torneo. El estadio se llenará, Holanda tiene un nuevo entrenador y un equipo fantástico, especialmente en defensa. Son muy fuertes, tienen jugadores jóvenes y poderosos. Espero que nuestros seguidores también se hagan escuchar".

Los futbolistas llegan a estos partidos finales con mucho cansancio debido a una temporada larguísima, potenciada por el Mundial de Catar entre el mes de noviembre y diciembre. Los jugadores apenas han tenido descanso y muchos de ellos no llegarán a este encuentro debido a lesiones.

Ese es el caso de dos de los centrales más prometedores del panorama europeo. De Ligt y Gvardiol se perderán los compromisos y para Koeman y Dalic son dos bajas muy sensibles. A pesar de estas ausencias, ambos equipos presentarán equipos de garantías para competir de la mejor manera.

En estos partidos los entrenadores pueden darle lugar a los menos habituales en la selección, potenciado por la buena temporada que han hecho con sus clubes. Este es el caso de dos jóvenes como Érlic y Simons, el primero, central del Sassuolo que completó una buena temporada en la Serie A y el segundo, mediapunta del PSV, que ha sido una de las revoluciones y grandes revelaciones de la Eredivisie en su primera temporada en una primera plantilla profesional, tras pasar por el PSG donde debutó y tuvo destellos muy buenos.