El cambio de formato de la Nations League es más martirio para los futbolistas... y un aliado de España
La competición mete una ronda previa, que ahora favorece a la Selección. Estará en cuartos si gana a Serbia el martes.
Este irrevocable camino que ha tomado el fútbol de sobrecargar a los jugadores de partidos competitivos en sus piernas también puede resultar beneficioso, como ocurre en esta ocasión. España ha salido victoriosa del duelo ante Dinamarca en el Enrique Roca de Murcia, y ha dado un paso de gigante para la clasificación. Con el triunfo, se queda en la primera posición con siete puntos en su casillero, aunque solo uno por delante de los daneses, una circunstancia que en ediciones anteriores supondría un claro riesgo. Ahora, ya no tanto.
Para esta nueva edición de la Nations League, UEFA decidió incorporar la ronda de los cuartos de final en lugar de la Final Four directa que se celebraba anteriormente. Con este nuevo modelo, ya no solo los primeros de grupo obtienen botín, sino que serán los dos cabezas los que accedan a una ronda intermedia. Dos partidos más de alta competición para los jugadores, en primera línea del frente contra el calendario, aunque también la posibilidad de fallar, antes inverosímil.
A falta de tres partidos para la conclusión de esta fase de grupos de la Nations League, Dinamarca viene fuerte en la pelea por la primera posición. Esta otorgará de premio el factor campo (las eliminatorias serán de ida y vuelta) y un rival a priori más sencillo, dentro del elevadísimo nivel de esta competición. España está por delante, si bien debe andarse con ojo.
El resultado del otro partido, eso sí, no es especialmente alentador. Serbia se impuso por la mínima a Suiza y viene con fuerza en la tercera posición, solo tres puntos por debajo del equipo nacional. Cabe recordar que los de Luis de la Fuente no fueron capaces de pasar del empate en el duelo directo de la primera jornada. La Selección se jugará mucho más que tres puntos el próximo martes en el Nuevo Arcángel, ya que ganar supondrá la clasificación para cuartos de forma matemática.
Otra gran noticia con el sistema de competición actual es que Suiza firma un pleno de derrotas que le deja prácticamente fuera de combate. Seis puntos de ventaja del segundo con nueve por jugarse deja a los suizos tocados, aunque no hundidos. Cabe recordar que, en caso de empate, el principal criterio es el enfrentamiento directo, otro punto en contra del combinado helvético. España no quedará última salvo carambola extrañísima de resultados.
Un verano más cargado
La nueva Nations League clasifica a los dos primeros de cada grupo, manda al tercero a un playoff por evitar el descenso a la Liga B y desciende al colista. Por ejemplo, Inglaterra compite ahora en la división inferior, lo que reduce el nivel competitivo de los partidos y perjudica el progreso de las selecciones. Por supuesto, tampoco optan al título.
En el próximo parón internacional se disputarán las jornadas 5 y 6. Concretamente, del 14 al 19 de noviembre. Los cuartos de final, a ida y vuelta, se jugarán los próximos 20 y 23 de marzo. La Final Four será el gran evento de selecciones del verano. La gran final, en la que España tratará de revalidar su título, se jugará el 8 de junio. El 4 y el 5, las dos semifinales.
Por cierto, tan solo una semana después, el 15 de junio, comenzará en Estados Unidos el nuevo Mundial de Clubes, que se extenderá durante un mes completo y que contará con la participación de Real Madrid y Atlético como equipos españoles. Un agobio desmedido de partidos para los deportistas, que también tiene su punto positivo en ocasiones. Que la Nations League tenga cuartos de final (sustituyen a los amistosos o los partidos de clasificación que antes se disputaban en esa ventana) es más estrés para el jugador… y también una doble oportunidad que antes ni existía.