CROACIA 2 - MARRUECOS 1

El último baile de Modric fue un vals

El '10' se despidió de los Mundiales tras otro gran partido. Croacia se lleva la medalla de bronce.

Modric, en un partido con Croacia./AFP
Modric, en un partido con Croacia. AFP
Jonás Pérez

Jonás Pérez

No mientas. Tú también has visto este partido. Seguro que piensas que no es necesario y lo llamas final de consolación. Pero no te puedes despegar de este Mundial. Ya es tu rutina, un salvavidas a mitad de curso, la mejor vía de escape en tu día a día. Y porque, además, no estuvo nada mal. Gvardiol marcó el primero con un cabezazo de muchos millones. Dari empató porque lo de repetir un partido sin tanta emoción no apetecía. Orsic respondió con un golazo de fábula. La medalla de bronce se queda en Croacia, al que le va costar habituarse a vivir sin metal. Aquello del gen ganador.

El resumen del Croacia-Marruecos.

Lo confieso. Soy de la Generación Z. Mis primeros recuerdos en los Mundiales son el cabezazo de Zidane o a Andrés Montes entonando el "decodificador Deco" o el "frigoríficos Frings". No vi jugar a Maradona y Youtube no te da apenas lecciones sobre su legado. Por eso, para mí, hoy se ha disputado la final (o mi final) del Mundial. Sí, es cierto, mañana hay otro partido. Pero de él hablan con más brillo los nostálgicos, los que recuerdan perfectamente qué hacían el 22 de junio de 1986 cuando el 'Pelusa' regateó hasta su sombra para marcar uno de los mejores goles de siempre. Ver a Messi ganar una Copa del Mundo o a Mbappé reinar dos veces con solo 23 años es parte de la historia. Las hazañas de Luka Modric o el talento obrero de este Marruecos son, más bien, parte de mi propia historia.

Sin duda, ambos dejarán huella como parte de este Mundial de Catar. Aunque nadie recordará este tercer y cuarto puesto. ¿Acaso alguien se acuerda de que la Bélgica de Roberto Martínez fue bronce en Rusia? Este partido es como cuando superas el ecuador de una serie. Siempre hay capítulos de transición para obnubilarte con un final de época. Pero, reitero, forma parte de mi historia: la que no vio a Maradona, ni a Pelé y la que no es apenas capaz de argumentar si Leo o Diego en la disputa por ser el mejor.

Lo que sí sé es que hablaré a mis nietos de Modric. Puede que, para entonces, aún siga dando pases con el exterior como quien suma y resta. También les explicaré que no siempre gana quien más corre, pero que el esfuerzo siempre hace aplaudir desde el sofá. Es 17 de diciembre y los teclados ya arden para escribir sobre los fichajes que están por venir. Queridos nietos, en este 2022, muchos pedirán a Melchor, Gaspar y Baltasar a Ounahi y Amrabat. Vosotros mejor pedid que el Mundial siga albergando esta magia y un pendrive con los mejores bailes de Luka y Leo. Ellos no formarán parte de vuestra historia, pero, os lo garantizo, os merecerá la pena. Hoy tocó el último vals de esa sempiterna sonrisa croata. En 2026, ya no será lo mismo.

LUKA MODRIC

👏🏻 Mis 'dieses'

"Me eliges para hablar cuando las calles están mudas". Que en 2022 la teología no haya contemplado que los balones tengan alma invita a la suspicacia. Quién le diría a ese joven chico que pasó su niñez entre el terror de los Balcanes, tocando una pelota, su lenguaje, este legado. El estadio Khalifa se rindió a él al acabar, otra muestra de lenguaje universal. Nadie silba a Bob Dylan. Los acordes de Mark Knopfler. Ennio Morricone. La mirada aniñada en los ojos de Michael Jackson. Un bemol en la voz de Diana Krall.

"Pero tú acoges mis voces si me ves desorientado y bailas conmigo un vals igual que dos enamorados". Luka, tantas veces nos has hecho olvidarnos de todo desde el salón de nuestra casa. Has sido nuestro compañero fiel. Qué mayores nos hacemos. Lo tuyo de hoy no es un adiós, pero ya no viviremos otro Mundial contando contigo. Duele. Nach, entonces no lo sabías, pero cuando compusiste tu prosa, te faltó un acorde. El fútbol de Modric también ha sido, es y será 'El Idioma de los Dioses'.

OUNAHI

🤔 Hay runrún...

Venga, va. Esto ha sido un capítulo de Black Mirror. Ahora es cuando nos dicen que el '8' de Marruecos ha sido una broma. Un holograma catarí programado para correr de un lado a otro. Sin parar. Se han pedido bajas por estrés por menos que fijarse con ímpetu en sus movimientos sobre el campo. Si hoy el Angers anunciara un acuerdo con otro club, le daría tiempo a pasar el reconocimiento médico y volver a Catar para ver la final. Sin coger el avión, a sprint. Corre el rumor de que Ounahi nunca perdió el autobús. Fue el autobús el que perdió a Ounahi. Quizás porque ya ha sido suficiente, Regragui decidió dejarle en el banquillo. No pasa nada: en unos días le veremos en un grande.

DALIC

🚨 Poco se habla de...

Un desconocido con experiencia en ligas de menor calado obtuvo la oportunidad de su vida en 2017. Se hizo cargo de la selección croata con una imposición: no seguiría si no lograba la clasificación para el Mundial de Rusia. No solo la consiguió. Llevó al equipo a la final. Una epopeya, de las que entran en los libros de fútbol. "Cuando llegaron las ofertas, me dijeron que aprovechara la situación y me llevara el dinero. Después de la Copa del Mundo me quedé porque hablaba todo el tiempo sobre la unidad y el patriotismo. Si hubiera ido tras el dinero entonces, ¿qué tipo de mensaje habría enviado a los jóvenes y a todos en Croacia?", reconoció. Rechazó treinta millones de China. Ahora, vuelve a meter a su país en el podio, partiendo varios escalones por debajo de las grandes. ¿Quién le empata?

GVARDIOL

😎 Me reafirmo

El central se tiró en plancha para marcar el primer gol del partido, como cualquier club se lanzará a por él en el mercado. Ya os avisan Matteo Moretto y Sergio Santos: está cerca del Chelsea. Los 'blues' son como el Madrid con Brasil: siempre se llevan a los jóvenes prometedores. Con el enmascarado han dado en la diana. Ha sido uno de los 'malos malísimos' de este Mundial. Messi acabó con él en semifinales. El cartel de su regate llegaría a Hollywood, pero no existirían los superhéroes si no hubiera villanos a su altura. El liderazgo de Modric ya es para él.

ESTO SE ACABA

📀Mi 'bonus track'

Por tradición las llamamos cenas de Navidad. Lo de este año podrían ser "cenas para ahogar las penas de que se acaba el Mundial". Respondería mejor a la realidad. Ha sido un detalle de FIFA programar los dos partidos finales a las 16:00 por si a alguna empresa le da por no fijarse en el calendario. Esto se acaba. Si fueron ayer esas sesiones matutinas, el sorpresón de Arabia Saudí y el 7-0 a Costa Rica. Nadie pierde el sueño por lo que ocurre en el tercer y cuarto puesto. Pero lo vemos. Es algo innato. La costumbre de coger el mando para enchufar la Copa del Mundo. En unos días desaparecerá Gol Mundial de nuestros decodificadores. Le daremos al 57 por instinto.

La penúltima canción siempre apela a la nostalgia. El DJ disfruta desde arriba viendo a grupos de amigos abrazados cantando Estopa, "El fin del mundo", "Zapatillas" o "Nada que perder". Son los temas que nadie quiere escuchar, por lo que significan. Pero que se disfrutan como los que más. Modric ya se ha echado el último baile, un vals. Al resto aún nos queda otro de 90 minutos. ¿También odian las despedidas?