La Inglaterra más nacionalista... otra vez: "Hay demasiados extranjeros en la Premier"

Inglaterra, que debuta contra Irán, llega al Mundial de Catar como una de las selecciones candidatas a absolutamente todo. Después de llegar a la final de la Eurocopa hace poco más de un año y de caer en semifinales del Mundial en la última edición del mismo, el país de la libra sueña con que este sea su gran año y por fin, casi 60 años después, puedan colocarse su segunda estrella en el pecho. Lo harán con un equipo con 25 jugadores de altísimo nivel, con calidad de sobra y con un denominador común para (casi) todos: la Premier League.

Porque ni España, ni Francia, ni Alemania, ni Argentina, ni Brasil, ni ninguna selección candidata a ganar el Mundial, cuenta en sus filas con tantos jugadores de su liga nacional como es el caso de Inglaterra. Los de Gareth Southgate cuentan con 24 futbolistas de la Premier League y tan solo uno, Jude Bellingham, juega fuera de las islas, concretamente en el Borussia Dortmund.

España, por ejemplo, cuenta con 18 futbolistas de la Liga Santander, uno de la Bundesliga, dos de la liga francesa y cinco de la Premier. Francia es la más dividida, con cinco jugadores de la Premier, seis de la Bundesliga, seis de la Liga Santander, seis de la propia liga francesa y dos de Italia, Y Alemania, pese a contar con 20 jugadores de la Bundesliga, cuenta también con cuatro jugadores de la Premier y dos de la Liga española.

Pero en el caso de Inglaterra es completamente diferente. ¿Cuáles son las razones? Evidentemente, no se puede obviar que la Premier League es hoy por hoy la competición más potente del fútbol de clubes, sin embargo el hecho de que en ella militen tantos jugadores británicos de nivel no es fruto de la casualidad, es algo que se fomentó en el país del 'fish and chips'... Precisamente a raíz de un fracaso de la selección.

"Hay demasiados extranjeros en la Premier League y eso perjudica el nivel del combinado nacional" esas palabras de Steve Coppell, técnico del Reading en 2007, generaron un debate nacional que solo hizo que incrementarse cuando Inglaterra se quedó fuera de la Eurocopa 2008. En las islas comenzó a extenderse una corriente a favor de potenciar el talento propio y dejar a un lado el extranjero, hasta el punto de que jugadores como Steven Gerrard se mostraron partidarios de las palabras de Coppell y de hacer cambios en la normativa: "O hacemos algo o tanto extranjero afectará al nivel de la Selección, si es que no lo ha hecho ya", dijo.

Apenas tres años después de aquello, en 2010, en Inglaterra se aprobó la ley 'homegrown players', mediante la cual en todos los clubes de la élite debe haber ocho jugadores de la cantera de los mismos o que hayan pasado por canteras británicas a lo largo de su carrera. Todo ello para potenciar a los ingleses dentro de la Premier League. Realmente, funcionó, pues la convocatoria actual de Inglaterra no es, para nada, un caso aislado, sino la continuación de una tendencia.

Más allá de la apuesta por los canteranos ingleses, una vez estos explotan siempre está la posibilidad de que aparezcan clubes extranjeros para llevárselos. Sin embargo, Inglaterra se ha destacado en los últimos años por potenciar su mercado interno y evitar la fuga de talentos que tanto se acusa en España.

El pago de sobreprecios por futbolistas ingleses es una realidad dentro de la Premier League. Por poner un ejemplo, por Harry Maguire el United pagó 90 millones pese a estar valorado en 50, por Mings el Aston Villa pagó 22M pese a estar valorado en 5. Por Walker, el City pagó 52M pese a estar valorado en 30 y así un largo etcétera que hacen de Inglaterra el país más nacionalista...No solo con el Brexit.