MERCADO DE FICHAJES

Descifrando a Sissoko, el agente de Dembélé que "juega muy sucio" y del que huyó el padre de Camavinga

Varias fuentes descifran el perfil de Moussa Sissoko en Relevo, el hombre que decide el futuro de Dembélé.

Moussa Sissoko junto a Ousmane Dembélé. /INSTAGRAM: @O.DEMBELE7
Moussa Sissoko junto a Ousmane Dembélé. INSTAGRAM: @O.DEMBELE7
Jonathan Ramos
Jordi Cardero

Jonathan Ramos y Jordi Cardero

El culebrón Dembélé está a punto de terminar. Tras días de tensiones, cartas y enfados, todo parece llegar a su fin. Para bien o para mal, pero a su fin. Pocas personas saben todo lo que ha ocurrido durante el periplo del mosquito en la Ciudad Condal y entre ese selecto grupo hay una persona que alza la voz por encima de los demás. Ese hombre es Moussa Sissoko, el agente del futuro jugador del PSG.

De Sissoko poco se sabe. De hecho, su vida personal es una incógnita. Al buscar su nombre en Google aparece el mítico futbolista del Tottenham, Moussa Sissoko, que hace de escudo mediático para apartar las miradas de nuestro protagonista. En aras de traer luz a un perfil lleno de polémicas, jugarretas y denuncias, hemos reconstruido parte de su carrera hasta la actualidad. Fuentes consultadas por Relevo nos indican que el agente es de origen francés, de unos 33 años de edad y, a diferencia de lo publicado en Internet, no forma parte de la familia Dembélé.

Su historia con el futbolista se remonta a la etapa del Rennes. Moussa Sissoko, siempre pendiente de los talentos emergentes, vio potencial en Ousmane mientras militaba en las categorías inferiores del club galo. "Empezó a trabajar con Dembélé desde muy joven, le prometió muchas cosas a la familia y aceptaron", amplía una periodista francesa, cuya identidad se mantiene fuera de estas líneas por no afectar a su trabajo

Trabajó sin licencia y daba 'mala espina'

La primera polémica de este 'agente' ocurrió en 2016, año en el que Dembélé abandonó el Rennes para poner rumbo hacia el Borussia Dortmund. La transacción se firmó en los 35 millones de euros, lo que supuso la mayor venta del club, que ahora comparte con Nayef Aguerd. Dicha venta incurrió en un delito, que más tarde sería archivado por la fiscalía de Rennes. En las fechas mencionadas, Moussa Sissoko no tenía el título de agente en vigor en el país y por eso fue denunciado por la Federación de Fútbol Francesa.

"Es un agente que especula mucho más que los demás, quiere inflar su comisión y el sueldo del jugador; juega sucio"

Tras años de investigación, el caso fue archivado en 2021. Pese a ello, la federación redactó una queja formal hacia Sissoko por realizar dicho movimiento con una licencia caducada. En ese momento solo estaba registrado como intermediario en Inglaterra y mantenía relaciones profesionales con clubes como el Borussia Dortmund, algo que no está penado en Francia.

Durante esta época convulsa, dejó de trabajar como representante de Eduardo Camavinga, quien fue cliente de Moussa Sissoko desde que ascendió al primer equipo del Rennes en 2019. Su relación contractual apenas duró un año y medio. "Su padre le obligó a despedir a Sissoko. Le daba mala espina y hasta que encontró una nueva agencia fue él quien le dirigió la carrera", relata un agente francés. Celestino Camavinga, padre del madridista, fue su representante durante varias semanas hasta que su hijo firmó con Stellar Group, la mayor agencia en la actualidad.

El infierno de la primera renovación

Dembélé aterrizó en Barcelona en 2017 con la etiqueta de megacrack después de que el Barça rompiese la hucha para pagar los 140 millones que necesitó para convertirse en el fichaje más caro de la historia del club. Al principio se las prometían muy felices en la Ciudad Condal, pero las lesiones truncaron su rendimiento deportivo. Mientras no rendía en el campo, Sissoko lo dejaba todo en los despachos.

"Dembélé está cómodo en Barcelona, pero su agente lo mueve como una marioneta. Si fuese por el jugador hubiese renovado, pero siempre decide Sissoko. Eso le hace daño al Barça"

El francés estampó su firma en un contrato que lo vinculaba al Barça hasta 2022 y desde el club empezaron a trabajar en su renovación un año antes de que este venciera. Una reunión entre Mateu Alemany y Moussa Sissoko en Ibiza daría el pistoletazo de salida a una relación abocada al desastre. La primera oferta fue a la alza, pero se rechazó. "Es un agente que especula mucho más que los demás, quiere inflar su comisión y el sueldo del jugador. Juega sucio", deslizan desde la entidad culé.

Todo estalló cuando Alemany decidió sentarlo en la grada en sus últimos seis meses de contrato, algo que no ocurrió gracias a la intervención de Xavi. Desde entonces, se retomaron las negociaciones. "Se le ofreció un salario adecuado para no destruir el equilibrio de la escala salarial que tanto costó construir", amplían desde el club. Pese a los intentos del Barça, Sissoko siempre pedía un sueldo de "estrella mundial" y mientras tanto ofrecía al jugador por toda Europa.

“Dembélé es su marioneta, al irse del Barça respirarán tranquilos”

"Dembélé está cómodo en Barcelona, pero su agente lo mueve como una marioneta. Si fuese por el jugador hubiese renovado, pero siempre decide Sissoko. Eso le hace daño al Barça", dicen desde Barcelona. En un último esfuerzo por renovar al jugador en las condiciones que buscaba su agente, a Sissoko se le ocurrió especular con el PSG.

En una de sus llegadas a la Ciudad Condal, el representante apareció ante las cámaras de El Chiringuito con una llamada entrante de "Leonardo PSG". El supuesto telefonazo era de Leonardo Nascimento, antiguo director deportivo del club parisino. "Eso fue una estrategia suya, Leonardo no traga a Sissoko, no le ha llamado nunca", argumentan desde Francia.

Finalmente, esa renovación se hizo efectiva, pero con términos que facilitarían su actual salida al PSG, la cláusula 25 + 25, que llevaría al club a pagar la mitad del traspaso al jugador en caso de cumplirse unos requisitos que consideran incumplidos. Hace unos meses se reiniciaron las conversaciones para volver a ampliar su contrato e incluso su sueldo, hasta situarse como uno de los mejores pagados del vestuario.

La respuesta de Sissoko fue muy clara: no. Acto seguido "solicita una cifra totalmente fuera de mercado. Condiciones injustas para el club y el jugador", según apuntan fuentes involucradas en la negociación. Ante tal propuesta se optó por dejar salir a un futbolista que podría haber sido pieza clave en el Barça de Xavi, pero su agente no quiso.

"En el área deportiva hay personas aliviadas por la marcha de Dembélé, y no por el jugador sino por el agente. No contesta, hace que las negociaciones se alarguen y pide cifras imposibles", terminan desde Catalunya. Con su salida, el Barça pierde un gran jugador, pero también un enorme dolor de cabeza.