El fichaje de Unai Hernández y el interés en Vinicius para afianzar la nueva política de Arabia: "Esto es más peligroso de lo que pensábamos"
La liga saudí deja de apostar por veteranos y se centra en el talento joven.

Arabia Saudí sigue revolucionando el mercado de fichajes, aunque ahora su política dista mucho de lo establecido en un primer momento. Hace un par de años gastaban gran parte de su presupuesto en estrellas como Cristiano, Benzema o Neymar a los que convencer con enormes cantidades de dinero para que disfrutasen allí del final de sus carreras. También algún segunda espada, como Milinkovic-Savic o Renan Lodi para completar las plantillas con talento extranjero. Ahora, sus objetivos son otros.
Más allá de mantener interés en grandes jugadores, pasan de treinteañeros y miran a futbolistas jóvenes con los que establecer una base y potenciar su competición. Vinicius es un ejemplo. El brasileño, por el que están dispuestos a gastarse 1.000 millones tal en salario tal y como avanzó Relevo en verano, se convertirá en la cara visible pero también en un reclamos para otros futbolistas que hagan más atractiva la Saudi Pro League.
⚠️ 🇸🇦 El PELIGRO de la liga saudí que apunta cada vez a jugadores más jóvenes I @RafaAlkorta1
— El Larguero (@ellarguero) January 27, 2025
👀 "Esto no tiene que ver con lo que hizo China hace años... se han dado cuenta de que NO les valen SOLO jugadores mayores"
☢️ "Es más peligroso de lo que pensábamos" pic.twitter.com/aFOgDPZiTf
Rafa Alkorta lo explicaba en El Larguero: "El verdadero poder de la liga de los saudíes no tiene nada que ver con lo que pasó con los chinos hace años. Estos se han dado cuenta que para que sea todo potente te tienes que llevar gente joven. No sólo los mayores que ya te dan un primer paso. Cristiano, Benzema, otros jugadores que hay de ese nivel... pero a mí lo que me está sorprendiendo es que ya tienen en la cabeza traer gente joven de fuera. Y dices 'ostras, esto es más peligroso de lo que pensábamos todos'. Igual son capaces de hacer una liga más competitiva de aquí a unos años"
Los directores deportivos y ojeadores que acuden a menudo a los campos del fútbol europeo han ampliado el espectro y ahora también espían a la cantera. Se han dejado caer por el Miniestadi del Barcelona o el Di Stéfano del Madrid, entre otros, para encontrar a los mejores jugadores. Así, por ejemplo, han llegado a Unai Hernández, al que están a punto de cerrar para el Al Ittihad.
A los chicos también les convencen con grandes cantidades. Salarios que, en el mejor de los casos, tardarían años en ganar en Europa y con los que solucionar su vida siendo apenas unos adolescentes, además de mantener siempre la puerta abierta a volver al Viejo Continente. También tratan de encontrar situaciones favorables para llevar a cabo las incorporaciones, como contratos cercanos a acabar o futbolistas descontentos en sus clubes. Un trabajo que va mucho más allá de poner un cheque encima de la mesa.
Para potenciar la llegada de jóvenes talentos, la liga ha impuesto una norma e que permite tener 10 extranjeros en plantilla, pero con una condición: de esos diez, dos tienen que ser Sub-23, por lo que las plantillas tendrán que organizarse para dar espacio a todos sus futbolistas de fuera. Además, parte del presupuesto de los clubes para fichajes va destinado a futbolistas jóvenes.
Todo para poner su liga en el escaparate y transmitir la idea de que son algo más que dinero. Su proyecto es a largo plazo, con el Mundial de 2034 en el horizonte. Piensan poner toda la carne en el asador para tener a algunos de los mejores jugadores del mundo y poner el foco sobre una competición que, poco a poco, va ganando seguimiento.