El Celta diseña su hoja de ruta en el mercado de fichajes: al menos tres operaciones y un orden de prioridades

Que el Celta va a ser uno de los equipos más activos en el próximo mercado de fichajes es algo que se conoce desde que cerró la ventana estival. A Luis Campos y al club les quedaron deberes por hacer y los resultados deportivos han convertido las necesidades en obligaciones. En las oficinas no esconden que reforzarán la plantilla en enero y tienen clara la hoja de ruta que seguirán.

Tal y como ha reconocido Rafa Benítez en los últimos meses, la prioridad es la llegada de un mediocentro físico que otorgue mayor fortaleza al centro del campo. No buscan un jugador de perfil ofensivo o con gol, aunque sí que tenga cierta llegada, si no sobre todo que de empaque a un equipo que sufre en los últimos minutos de los partidos. El técnico madrileño todavía no ha encontrado su doble pivote ideal y en las 13 jornadas disputadas ha alineado hasta a cinco jugadores ahí.

Luis Campos, asesor deportivo de la entidad, está peinando ya el mercado en busca de ese jugador que satisfaga las necesidades del entrenador. Desde el club no quieren demorar mucho esta contratación y pretenden que el nuevo fichaje esté disponible para la segunda jornada después de las vacaciones navideñas, prevista para el 13-14 de enero. Lo que sí descartan en A Sede que ese centrocampista sea Gabri Veiga o Wilfred Ndidi, que estuvo cerca de recalar en Vigo a finales de agosto.

Una vez concretada la llegada del mediocentro, el siguiente objetivo desembarcará para la parcela defensiva. La lesión de Aidoo ha trastocado un poco los planes iniciales del Celta. Benítez no considera prioritaria la llegada de un central, pero si la ve necesaria para cubrirse ante posibles lesiones o sanciones y, a ser posible, que también pueda ejercer de lateral. Starfelt y Unai son sus titulares, con Carlos Domínguez como único recambio disponible. Es cierto que Tapia o Mingueza pueden actuar en el eje central de la defensa, pero el técnico prefiere alinearlos en otras demarcaciones. En este caso, el zaguero que llegue lo hará en calidad de cedido y no tiene porque hacerlo en la primera quincena.

A priori, no habrá más llegadas salvo alguna nueva lesión o una salida inesperada. Para el ataque, el club confía en la aportación de Aspas, Larsen y Douvikas y esperan que Carles Pérez pueda dar un paso al frente. La más que probable marcha de Jonathan Bamba a la Copa de África tampoco preocupa y en A Sede confían en Cervi, Miguel Rodríguez e incluso Luca de la Torre para ese costado.

El Celta también trabaja en el capítulo de salidas. En concreto, en una. Al igual que ocurrió en verano, aunque en aquel momento estaba lesionado, la entidad celeste le ha abierto de nuevo las puertas a Agustín Marchesín, al que están dispuestos a dar la carta de libertad. El argentino es actualmente el tercer portero y no cuenta para el cuerpo técnico. Tanto los técnicos como el club valoran positivamente su profesionalidad y no le forzarán a irse, aunque ya le han dejado clara su situación.

Sobre la mesa también está la posibilidad de que algunos jóvenes sin muchos minutos puedan salir como cedidos los últimos seis meses de la presente temporada. Son los casos de Williot Swedberg y Miguel Rodríguez, aunque el Celta, llegado el caso, quiere estudiar con detalle las posibles propuestas que tengan y asegurarse que si se marchan, lo hagan para jugar, algo que es difícil que les puedan garantizar.