A Maite Oroz se le queda pequeño el banquillo del Real Madrid

Se ha perdido la cuenta de cuantas veces se ha repetido la frase de 'es el momento de Maite Oroz'. Desde que llegó al Real Madrid en 2020, la centrocampista navarra no ha conseguido ganarse un puesto de indiscutible en el once titular. Sin regularidad, la '8' ha remado siempre a contra corriente y ha caminado con un perfil bajo. Sin ruido. Con ese trabajo de equipo que no sale en los medios. Tras su golazo con la Selección el pasado martes en Córdoba, se apuntó a ella como posible sustituta de Caroline Weir, lesionada de gravedad, en el Madrid.

No obstante, Maite Oroz se quedó de inicio en el banquillo para el partido de las blancas en Tenerife. Toril apostó por Claudia Zornoza y a la navarra sólo le quedó esperar... hasta el minuto 72. Le sobraron nueve. En apenas dieciséis minutos sobre el campo, dibujó el 0-2 para las blancas. Tardó dos minutos menos que con la Selección, con la que se inventó un golazo en el 5-0 ante Suiza en el Nuevo Arcángel.

Tras su confianza en su disparo lejano con España se esconde la motivación de sus compañeras, entre las que admiran su gran golpeo y le han empujado a que pruebe más disparos. En el bolsillo sumó su octavo tanto con la elástica blanca. Un tanto con el que pide paso como titular. Con un tramo de siete encuentros en 22 días y tras la baja de Caroline Weir, su buen estado de forma es clave para este Real Madrid, desde el que confían en que aún queda mucho talento por pulir en sus botas.

"No sé si se ve en la celebración, pero cuando ha chutado he hecho en plan: 'Buah, de locos'. He ido donde ella y siempre se lo digo, también en el club, que tiene que tirar más. Con el golpeo que tiene, si yo fuera ella estaría todo el día tirando a puerta. Ya lo ha demostrado que tiene ese algo especial que tienen este tipo de jugadoras. Estoy muy contenta por ella y ojalá pueda seguir metiendo estos goles con esta camiseta y con la del Madrid", dijo Athenea del Castillo. Los deseos de la cántabra fueron órdenes para Maite Oroz, que no dudó al cazar un balón en el área. La navarra definió a la perfección.

Si bien su nombre ha estado vinculado a momentos históricos del club, Maite Oroz no ha logrado explotar como una estrella en el equipo blanco. Al menos a nivel mediático. Anotó el primer gol oficial de una española en la historia de este equipo, que nació hace apenas tres años, y se colgó la banda de centenaria la temporada anterior. Ahora, y tras dos goles en una semana, Oroz vuelve a decir a través del balón que está lista. Es su momento.