VILLARREAL 2 - ATLÉTICO DE MADRID 2

Sorloth no deja amigos en Villarreal: pitado por no cumplir su promesa y con celebración en su gol

Como en San Sebastián, donde siempre que va le pitan, el noruego no ha quedado bien con la afición del último club que defendió.

Sorloth en La Cerámica tras su gol. /REUTERS.
Sorloth en La Cerámica tras su gol. REUTERS.
Nacho Sanchis

Nacho Sanchis

Alexander Sorloth es un tipo que en las distancias cortas no se muerde la lengua, es dicharachero, bastante cercano y no tiene problemas en conversar sobre cualquier asunto. Sin embargo, esa imagen suya no ha conseguido darla a sus aficiones, ya sea porque así lo quiere él o porque no ha sabido cómo, y pese a haber triunfado tanto en Anoeta con la Real Sociedad como en La Cerámica con el Villarreal CF, ha recibido pitos cuando ha regresado a alguna de sus antiguas casas.

Ante el Villarreal CF, en su debut oficial con el Atlético de Madrid, bastaba un roce con la pelota para que la afición le silbara, pese a que en el último partido que jugó en la localidad castellonense le metió cuatro goles al Madrid. ¿Qué ha pasado para ese cambio? Pues no solo ha sido por su salida en sí, sino porque la afición amarilla se siente engañada.

"No me quiero ir aunque no juguemos Europa. Estoy realmente asentado, adoro poder ir en camiseta y cortos todo el día, en San Sebastián llovía mucho. Aquí es genial, todo el día hay luz. Me encanta estar aquí, por lo que quiero seguir aquí". Así de claro era Sorloth en Relevo unas semanas antes de acabar LaLiga... Al mes estaba en el Atleti.

Sorloth sobre su voluntad de quedarse en el Villarreal hace solo 3 meses. Relevo.

Pero no solo eso. Cuando fue preguntado por estas palabras en el Metropolitano, su respuesta fue más hiriente para los aficionados. "El Atlético es uno de los mejores equipos del mundo. Le dije a mi agente y mi familia antes de venir a España que esperaba marcar suficientes goles para poder jugar en el Atlético. Siempre soñé con jugar en el Atlético y cuando se abrió la puerta no me lo pensé dos veces", insinuando que su paso por La Cerámica siempre supo que era transitorio.

De modo que los pitos no fueron sorprendentes para el jugador, quien tampoco hizo demasiado para que cesaran, es más cuando marcó gol con un testarazo de la casa, no hizo ni un ápice, gesto o seña de pedir disculpas a la grada como suelen hacer los jugadores a sus exequipos. Lo celebró como si hubiera marcado a cualquier otro club más, no a uno con el que tiene un pasado. De modo que en el fondo Sorloth siempre lo tuvo claro: el Villarreal iba a ser algo de transición para él, al menos que no espere simpatía a cambio.