BARCELONA 1 - ESPANYOL 1

El show de Mateu en el derbi: 15 amarillas, dos rojas y cartulinas a dos manos

Ha batido su récord de amarillas en un solo partido (15), además de sacar dos rojas. Y eso que el partido estaba tranquilo hasta el 74'.

Mateu Lahoz muestra una amarilla y una roja de forma simultánea. /ALBERT GEA/REUTERS
Mateu Lahoz muestra una amarilla y una roja de forma simultánea. ALBERT GEA/REUTERS
Nacho Encabo

Nacho Encabo

El Barcelona-Espanyol estaba siendo un partido tranquilo, sin mucha historia para ser un derbi. El ambiente caldeado de la previa no había calado en el verde. Marcos Alonso había adelantado a los azulgrana en el Camp Nou en el minuto 7 y en la grada muchos pensaban ya en las uvas durante la segunda parte. Pero estaba Mateu Lahoz en el césped y todo se descontroló hasta tal punto que el árbitro valenciano llegó a mostrar una amarilla y una roja a la vez. Una en cada mano. Una foto para el recuerdo.

Mateu va a comenzar el 2023 con agujetas en el brazo. El partido acabó con 15 tarjetas amarillas (su récord en Primera División) y dos rojas. Y eso que el VAR avisó a Mateu de una cartulina roja que no era. Una auténtica locura. Menos mal que Xavi Hernández le había tirado flores en la previa: "A mí me gusta. Me pitó mucho de jugador. Habla mucho y esto es positivo. El árbitro es un juez y no puede estar nervioso, y él no lo está. Es difícil hacer de árbitro. Él te lo argumenta. Me gusta mucho". Hasta Xavi acabó amonestado.

El show de Mateu comenzó en el minuto 74, cuando sacó tres amarillas después de que se formara una discusión con la celebración del 1-1 por parte de Joselu. Jordi Alba, Vinícius Souza y Edu Expósito vieron la cartulina. Al minuto siguiente fue Ferran Torres y en el 76' el que recibió amarilla fue Pedri. Pero no había tregua, porque en el 78' Jordi Alba se puso a discutir de nuevo con Mateu y fue expulsado. Para entonces nadie en el Camp Nou era capaz de llevar las cuentas, pero quedaba la traca final.

En el minuto 80, una contra del Barcelona frenada por Vinícius con una falta desencadenó a Mateu. Sacó el tarjetero y mostró una roja directa y una amarilla de forma simultánea. El expulsado fue Cabrera, que había pisado supuestamente en la cabeza a Robert Lewandowski, mientras que el amonestado fue Vinícius. Como el brasileño ya había visto una amarilla, Mateu volvió a llevarse la mano al bolsillo: otra roja más.

El caos se instaló en el césped y Mateu estaba que no sabía dónde mirar. Le protestaban los jugadores del Espanyol, los del Barcelona le aplaudían y desde el pinganillo le avisaban de que Cabrera no había pisado a Lewandowski. Mateu acudió al VAR y rectificó. El balón llevaba cinco minutos sin moverse. El encuentro se alargó hasta el minuto 100 y todavía hubo tiempo para un par de amarillas más.

Mateu, en el punto de mira tras el Mundial

En los ocho partidos que se han disputado en lo que va de jornada en LaLiga se han mostrado ya ocho tarjetas rojas. Son ya cinco más que las que se vieron en los 64 partidos del Mundial de Catar, una competición que terminó con el propio Mateu en la diana por su arbitraje durante el Argentina-Países Bajos.

En aquel encuentro de cuartos de final, el colegiado mostró otras 15 amarillas y fue señalado por varios futbolistas argentinos, entre ellos el capitán argentino, Lionel Messi. "La FIFA debe pensar en ello, no puede poner un árbitro así para estas instancias. No puede poner un árbitro que no está a la altura", dijo Messi, que días después levantaría el título.