El Sevilla sufre y gana ante un Valladolid que rozó el empate
Con más oficio que talento, los nervionenses se llevaron tres sufridísimos puntos. Saúl dejó helado al Sánchez-Pizjuán saliendo en camilla.
No es el día para hablar de la actitud en el Sevilla, aunque sí de la aptitud. Los chicos de García Pimienta, con un juego a trompicones y sin cuajar un gran partido, lograron sacar tres puntos en un partido clave. Ejuke, en la recta final, acabó desigualando un duelo que, incluso, pudo llevarse el Valladolid por momentos.
Y es que el partido vivido en el Ramón Sánchez-Pizjuán no será, seguramente, recordado como un gran partido de fútbol. Sobre todo en la primera mitad, tanto nervionenses como vallisoletanos no ofrecieron un gran juego. El tiempo parado fue el verdadero protagonista, con defensas que permiten demasiado... y delanteras que no son capaces de aprovechar los errores rivales. Sin mordida arriba estuvo un Sevilla 'capitaneado' por Iheanacho, que volvió a dejar una imagen muy fría sobre el césped. Pero tampoco la tuvo el conjunto de Pezzolano, que vivió con Marcos André tirando d de oficio en vez de acierto a las contras.
Sin embargo, entre tanto fútbol sin peligro, Peque se encontró en el área -tras varios rebotes- con un tenso y raso centro de Lukebakio. El belga cazó a la perfección balón suelto, aunque el último en tocar el cuero fue David Torres. No importaba. El gol, que fue revisado, subió al marcador.
Un alivio que duró poco en Nervión. Menos de media hora, descanso incluido, exactamente. En la segunda mitad se vio al Sevilla 'más loco'. Una lesión de Saúl Ñíguez -tuvo que salir en camilla- trastocó los planes de Pimienta... y propició el gol a los pocos minutos del Valladolid. El empate fue obra de Kike Pérez, pero Mario Martín dejó el detalle con un buen regate y centro. Eso sí, ni eso excusa a una defensa que volvió a hacer aguas.
Con nerviosismo, sufriendo y sin un plan fijo para atacar, el Sevilla logró rematar un encuentro que se le puso de espaldas. El Valladolid apretó por momentos a un equipo que no logra ser consistente y vuelve a estar sometido ante el nerviosismo. Sin embargo, con todo ello, un balón que recogió en la frontal Ejuke acabó cruzándolo a la perfección, superando a Hein, quien ya salvó en anteriores ocasiones a los suyos, para matar el partido.
2-1 y nerviosismo puro. Y estrés. Y sufrimiento, más, en Nervión. Acabó llevándose los tres puntos un Sevilla que explotó de felicidad ante su segunda victoria. El Sánchez-Pizjuán, entre cántico y cántico dirigido al palco, puede respirar. Al menos hasta el próximo domingo. No podrá, sin embargo, hacerlo el Valladolid, que ya toca puestos de descenso.
Ficha técnica
Sevilla FC: Nyland; Carmona, Badé, Marcao, Barco (Kike Salas); Gudelj, Saúl (Agoumé), Peque (Montiel); Navas (Ejuke), Iheanacho (Suso), Lukebakio.
Valladolid CF: Hein; Pérez, Cömert, Torres, Rosa; Juric, Kike Pérez (Latasa), Martín; Machis (Moro), Marcos André (Meseguer), Amath (Sánchez).
Goles: 1-0 (Torres p.p, 45'), 1-1 (Kike Pérez, 55'), 2-1 (Ejuke, 84').
Árbitro: Pulido Santana. Villanueva Iglesias (VAR). Amonestó con amarilla a: Gudelj, Rosa, Lukebakio, Marcao, Juric, Peque. Expulsó por doble tarjeta a Marcao.