El secreto del primer triunfo de Rubén Baraja: terapia con los menos habituales y el estilo de siempre
El técnico charló durante la semana con dos jugadores a los que considera claves: Guillamón y Vázquez. El Valencia recordó al equipo aguerrido que ha sido siempre.
El Valencia CF consiguió su primer +3 tras más de 100 días sin lograrlo y El Pipo Baraja logró en el segundo intento su primera victoria como entrenador del equipo de sus amores. Fue un partido sufrido, aunque en el cuerpo técnico che consideran que ese sufrimiento fue más emocional derivado de la difícil situación que vive el club, que futbolístico pues apenas recibió 3 disparos a portería, algo que no ocurría desde el 6 de enero frente al Cádiz.
Pero más allá de razonamientos futbolísticos, que los hay, Rubén Baraja construyó su primer triunfo en base a dos aspectos: tener a todo el equipo enchufado y volver al estilo con el que el Valencia siempre ha triunfado. Tras ya dos semanas entrenados por Baraja, los jugadores se han percatado de que al vallisoletano le gusta mucho hablar con el grupo, dar indicaciones, pedir feedback... Pero que, al contrario que Gattuso, no está tan encima individualmente de cada jugador, les da más 'aire', según se comenta, en términos individuales y es mucho más insistente en hablar a la totalidad de la plantilla.
Sin embargo, El Pipo, que por su amplia trayectoria sabe identificar cuando toca enchufar a un jugador, sí mantuvo diversas charlas con varios futbolistas que han estado carentes de confianza durante la presente campaña. A Jesús Vázquez, que apenas lleva 288 minutos este curso, le trasladó que con la baja de Gayà tiene una oportunidad de oro y que tiene las capacidades para triunfar. Vázquez Alcalde no fue titular, de hecho Toni Lato cuajó muy buen partido, pero en los minutos en los que el valenciano jugó mejor dejó un remate a portería y no fue sobrepasado ni una sola vez. Salió enchufado.
Otro jugador que necesitaba confianza es Hugo Guillamón, a quien el entrenador también ha tratado de 'mimar' durante las últimas semanas. Rubén es consciente que para salvarse necesita recuperar la mejor versión del '6' che y le dio la titularidad ante la Real Sociedad. La papeleta no era fácil, pues enfrente estaban los Brais Méndez, Merino, Kubo y compañía. Sin embargo, sin ser todavía el mejor encuentro de Guillamón, el valenciano de origen vasco sí dio un paso al frente y comenzó a recordar al mediocampista que fue al Mundial. Baraja acabó satisfecho con su nivel.
Baraja y el oficio sin excusas
"Yo he tenido jugadores jóvenes con oficio. Somos la plantilla más joven de la Liga pero la mayoría de futbolistas llevan más de 80 partidos en primera". Con esa frase Baraja zanjaba el eterno debate de la juventud de la plantilla en la previa del duelo ante los vascos y ciertamente, más allá de secretos, terapias y otros aspectos, el triunfo che ante la Real fue por encima de todo futbolístico.
El equipo cometió 13 faltas, vio 6 cartulinas amarillas, dos de ellas derivadas de parar dos posibles contraataques algo en lo que incidió el técnico a sus jugadores. Además, pese a tener 'solo' el 37% de la posesión, los che remataron entre los tres palos las mismas veces que la Real Sociedad (3) y pese a dar casi 200 pases menos que su rival (270 frente a 451)... En campo rival los che solo dieron 99 pases menos que los vascos (189 frente a 290). Dicho de otra forma, al Valencia de Baraja no le hace falta la posesión para generar peligro.