REAL MADRID

El Real Madrid ya ha decidido: no se quedará con Kepa

El club no está satisfecho con el nivel del vasco y consideran cubierta la posición con Lunin y el regreso de Courtois.

Kepa, calentando en el Bernabéu./EP
Kepa, calentando en el Bernabéu. EP
Jorge C. Picón

Jorge C. Picón

Kepa Arrizabalaga (29 años) llegó al Real Madrid en los últimos días del mercado de verano con la ilusión de, por qué no, seguir una vez acabase la cesión de un año que firmó. Sin embargo, cinco meses después de aquello, el club ha decidido: no se lo quedará en propiedad y el vasco deberá regresar al Chelsea cuando acabe la 2023-24. Sólo un giro radical del guion cambiaría de idea a la directiva, que en este momento no ve necesario reforzar la posición con su incorporación.

El club está muy contento con Lunin, empezando por el cuerpo técnico que, como informó este medio, piensa darle continuidad como titular en las próximas jornadas. No se trata sólo de un premio a su buen nivel bajo los palos. Actualmente confían más en él que en Kepa. Él junto a un Courtois, que afronta la recta de su recuperación -se rompió el ligamento cruzado anterior a finales de agosto-, conformarán la pareja de porteros del año que viene. Las sensaciones con el belga son positivas y su renuncia a la Eurocopa invita a pensar que podrá regresar al 100% para el curso que viene tras la pretemporada. Además de ellos dos, Fran González apunta a la apuesta del club como tercer portero.

Las dudas con Kepa comenzaron tras su lesión en el aductor. Venía de ser titular indiscutible, pero esta inoportuna molestia lo bajó del once contra el Braga a media hora de comenzar el partido. Desde entonces se mezclaron dos bazas en su contra: Lunin creció y él perdió confianza, con más errores de lo habitual y demostrando poca seguridad en sus acciones. El club empezó a determinar quienes debían ser sus porteros para el próximo curso.

Ancelotti sobre Kepa: «Ha hecho un buen partido. No sabemos el portero de la final».

La Supercopa se presentó como una oportunidad de oro para luchar por el puesto. Ancelotti y su staff pactaron que Kepa jugase el primer partido, contra el Atlético, y Lunin el segundo, contra el Barcelona. Sólo una exhibición contra los rojiblancos le abría la puerta a asentarse en el once, algo que no llegó. Todo lo contrario, a partir de Arabia el cuerpo técnico se convenció de que debía dejar de rotar para darle continuidad a uno de los dos, ganando el pulso el ucraniano. Mantuvieron a Kepa contra el Almería porque así estaba planeado.

Una coyuntura complicada para Kepa

Esta situación ha afectado al ex del Athletic, que se ha visto relegado al banquillo cuando llegó como titular indiscutible. Existe la sensación en el Madrid de que la situación le ha superado, como denota su actitud dentro y fuera del campo. Con los guantes puestos se muestra inseguro, con dudas en el juego aéreo y sin la energía necesaria. Sin ellos, cabizbajo, mucho menos alegre que meses atrás.

Kepa Arrizabalaga. Reuters
Kepa Arrizabalaga. Reuters

Esto ha llegado a la planta noble, donde siguen viendo un buen portero pero muy lejos de su nivel, de bajón ante una coyuntura que se le ha puesto en contra. Por ello, han decidido quedarse con lo que tienen en casa, Lunin y Courtois, y no con un Kepa que no ha podido demostrar regularidad para seguir en el Madrid.

Ahora se enfrenta a un panorama complicado, con la Eurocopa en el horizonte y el regreso a un equipo que no cuenta con él. Si no juega su presencia en el torneo continental está más que en duda, mientras que el Chelsea le buscará un destino en cuanto aterrice. En Londres ya han elegido a sus dos porteros, Robert Sánchez y Petrovic, y tampoco piensan quedarse con Kepa. Se vienen meses de turbulencias, aunque espera poder brillar los pocos partidos que Ancelotti le dé hasta final de temporada y recuperar la categoría que le llevo a ser considerado uno de los mejores porteros del mundo.