BARCELONA
Todas las preguntas que se hace Sergio Busquets ante las presiones internas y externas
El de Badía se muerde la lengua porque es capitán y no quiere avivar el fuego, pero no esconde su descontento ante según qué críticas.
Ni una sola palabra fuera de tono. Consciente de que su deber como capitán es lavar los trapos sucios en casa, Sergio Busquets se ha autoaplicado la ley del silencio cada vez que le preguntan por la situación de los capitanes, ya sea por las críticas deportivas o por las presiones del club de cara a una rebaja salarial. Su elegante posado público, sin embargo, contrasta con su visión 'real' del caso.
El de Badía entiende que las críticas son parte del juego pero se sorprende al leer o escuchar según qué comentarios. "Hemos intentado una rebaja salarial con varios jugadores y no solo no ha salido sino que hemos tenido que avalar 10 millones", expresó Joan Laporta en la Asamblea General del pasado 9 de octubre. Es ante declaraciones como esta cuando un alud de preguntas sobrevuelan la cabeza del capitán, quien detesta los 'mensajes' públicos. "Me gustaría que el club me dijera a mí las cosas y no enterarme por la prensa", deslizó en junio en una rueda de prensa con la Selección.
Clave en una Selección en la que sí ha sacado nota
En los últimos años, de Sergio se ha dicho por activa y por pasiva que está acabado como jugador. Si así es, ¿cómo se explica que con la Selección haya tenido magníficas actuaciones? Busi sigue siendo pieza clave en un equipo que ha llegado lejos en todas las competiciones que ha disputado recientemente. El contexto, en fútbol más que en muchos otros deportes, juega un papel clave.
Respecto a las críticas internas acerca de su rendimiento, quien alinea a Sergio es Xavi, un entrenador al que la directiva fichó y señaló como el hombre indicado para devolver al equipo a la élite. Si hay plena confianza en el técnico y éste apuesta por Busi, ¿no resulta incoherente dudar de ello?
El Barça quiso renovarle en verano por dos años más
En el tramo final de verano, el club propuso al catalán una renovación por dos temporadas. Si tan bajo es su rendimiento, ¿por qué la entidad insistió para ampliar un vínculo que expira en junio de 2023? Y si tan al límite estaban las arcas del club como para pedir rebajas salariales, ¿por qué se han invertido más de 200 millones en los fichajes de Ferran Torres, Lewandowski, Raphinha y Kounde?
Hay que recordar, además, que si Busquets deja el Barça el próximo verano, lo hará habiendo percibido únicamente salarios correspondientes a temporadas cumplidas. En el pasado, otros se marcharon recibiendo un último año de contrato que jamás llegaron a desarrollar sobre el césped. Es decir, otros abandonaron el club un año antes de que terminara su contrato pero esa campaña restante se les abonó igualmente.
¿Por qué no había el mismo ruido en sus inicios?
Todavía en el apartado económico, Sergio se pregunta por qué no hubo el mismo ruido cuando, en sus primeros años de carrera, su ficha no estaba adecuada al rendimiento que ofrecía sobre el césped. Guardiola le dio la oportunidad en 2008 y el de Badía respondió desde el primer día. Si algunos creen que ahora se le paga de más, estarán de acuerdo en que hubo un tiempo en el que se le pagó de menos. Lo comido por lo servido.
Sergio siempre ha tenido claro que dará un paso al costado cuando sienta que ya no puede aportar. De ahí que le duela especialmente que otros quieran colgarle una etiqueta equivocada. Tampoco quiere que nadie 'decida' por él cuándo debe producirse su adiós. Este apunta al próximo verano, pero la ratificación final no se producirá hasta los primeros meses de 2022.