SELECCIÓN SUB-21

La rebeldía de Pablo Torre ante la falta de oportunidades en el Barça: "Puede que merezca más minutos, pero tengo fe en que triunfaré... si no, ya me hubiera ido"

La perla cántabra atiende a Relevo en Las Rozas. Ha ganado seis kilos de músculo, está 'limpio' en multas de Flick y revela un gesto del alemán: "Después del Estrella Roja vino a hablar conmigo".

Pablo Torre posa para Relevo tras la entrevista. /RELEVO / SALVADOR FENOLL
Pablo Torre posa para Relevo tras la entrevista. RELEVO / SALVADOR FENOLL
Manuel Amor
Alfredo Matilla
Salvador Fenoll

Manuel Amor, Alfredo Matilla y Salvador Fenoll

Pablo Torre (21 años) tiene difícil hacer más en menos. Sus 209 minutos esta temporada le han bastado para facturar varios partidazos (doblete al Sevilla, gol y asistencia en Vila-real…) y no le sirven para consolidarse en la rotación de Flick. Después de cinco partidos sin participar, su rostro esconde las mismas ganas de oler el césped ("puede que merezca más") como comprensión con el alemán por la competencia que se le acumula en la misma parcela: "Todos no pueden jugar todo". En la Sub-21, cobijado bajo el ala de su padre Santi Denia, su rol cambia y se convierte en líder de una Selección que en este parón afronta amistosos contra Inglaterra (este viernes) y Dinamarca (próximo martes).

Al mediapunta hay otra cosa que le preocupa: su Racing, líder indiscutible de Segunda y con el que disfruta pegado a la pantalla cada fin de semana. Mantiene el "gran sueño" de volver algún día, como reconocerá en la segunda parte de esta entrevista, y quiere hacerlo cuando continúe vigente, no para "retirarse". Con su futuro abierto para enero, la perla se centra en terminar el año de la mejor manera posible con la Roja y con su club y espera oportunidades a su regreso a la Ciudad Condal. Sus cifras, impacto y talento las reclaman a gritos.

Hace exactamente dos años de la última vez que Relevo habló contigo y parece que has ganado en tamaño y volumen y que Pablo Torre ha pasado de ser niño a hombre. ¿Es una sensación o una realidad?

¿Se nota o qué? (risas). Es una realidad, una realidad.

¿Cuánto pesabas, por curiosidad, hace dos años?

63, más o menos.

¿Y en cuánto estás ahora?

69. Y todo de músculo.

Casi nada. Eso te servirá para romper el estigma de que los jugadores pequeños y habilidosos no podéis soportar ritmos altos y ganar duelos…

Sí, porque, joder, el fútbol de élite requiere estar muy bien físicamente. Al no jugar todo lo que quieres, al final tienes que compensarlo por otra parte. Llevo dos o tres años trabajando bastante el físico.

¿Cuando uno se somete a esos cambios en el entrenamiento tiene miedo luego, por ejemplo, a perder algo de velocidad?

No. No tiene nada que ver. Los preparadores son los que saben y tú les comentas lo que te viene mejor a ti. No he perdido velocidad, no. Creo que ahora soy más rápido, de hecho.

¿En qué has cambiado, más allá de lo físico, desde que aterrizaste en el Barça y en la Sub-21 hasta ahora?

En todo. He madurado mucho. Hay situaciones que te hacen madurar. No sólo en el campo, sino en la vida en general. He pasado algún momento difícil, como todos, y esos momentos son los que te obligan a mejorar.

¿En quién te apoyas en esos momentos malos, imagino que derivados del no jugar?

En mis padres. Siempre. Son mi mayor apoyo. También mis amigos. Hablo diariamente con ellos… y todos me aconsejan tener tranquilidad, seguir trabajando y confiar en mí. El día a día es lo que marca tu futuro.

¿Qué supone para ti venir con la Selección? En tu club llevas casi un mes sin participar y aquí eres un líder…

Me encanta. Hay un grupo fantástico, estoy muy cómodo y he hecho amigos de verdad. Todos tenemos ganas de que lleguen las concentraciones. Nos lo pasamos muy bien entrenándonos, en el hotel, con los juegos, en las habitaciones… Es verdad que Samu se nos ha ido del grupo (sonríe y vacila a Omorodion, que concede una entrevista a apenas 10 metros), pero ha sido por una buena causa. Le echamos de menos.

Pablo Torre, el ambiente en las concentraciones y el papel de Santi Denia: «Me coge a hablar...». RELEVO / SALVADOR FENOLL

¿En qué consisten esas dinámicas en las habitaciones?

Estos juegan a la Play, a veces echamos algún juego de mesa, charlamos, pasamos el rato… No nos vemos diariamente y luego nos cogemos con ganas.

De tu grupo de amigos (Juanlu, Barrios o Samu) hay uno, el mencionado Omorodion, que ya ha dado el salto a la Absoluta. ¿Qué crees que te falta a ti para conseguirlo a medio plazo?

Continuidad. Tengo muchas cualidades para estar ahí, pero necesito continuidad. También es verdad que, en el Barça, es difícil tenerla. Aun así, estoy tranquilo. Sé que el jugar finde tras finde llegará tarde o temprano.

Dicen que Santi Denia se ha convertido en una especie de padre para ti. ¿Recuerdas algún gesto que tuviese contigo en los momentos malos? ¿Soléis hablar entre parón y parón?

Sí, sí. Santi siempre me da confianza, me hace jugar… Se porta muy bien con todos, pero a mí me coge a hablar, dialogamos mucho, suele escribirme… Le tengo un gran cariño.

Además de ganar la Champions y LaLiga con el Barça… ¿acudir al Europeo Sub-21 del próximo verano es tu otro gran sueño de la temporada?

Por supuesto. Me haría mucha ilusión.

Por pasar a tu club: ¿qué te llevó a seguir en el Barça este verano pese a la competencia con Pedri, Fermín y el fichaje de Olmo? Supongo que tendrías muchas propuestas de cesión.

Que confío mucho en mí. Durante la temporada hay momentos para todos porque, desgraciadamente, se producen lesiones. Quería intentar aprovechar todos esos momentos. Hasta ahora lo he podido hacer, pero hay mucha competencia sana.

"¿Por qué seguí en el Barça? Porque confío mucho en mí. Durante la temporada hay momentos para todos"

Pablo Torre Jugador del Barça y la Selección Sub-21

¿Cómo llevas el, pese a haber destacado y marcado cuando has jugado, acumular ahora cinco partidos seguidos sin tener minutos?

Bueno… Todos no pueden jugar todo. Nos tenemos que repartir los minutos. Pero todo futbolista tiene ganas de oler el césped y es más feliz jugando.

Hemos vuelto a comprobar tu facilidad para hacer números: dos goles en 15' contra el Sevilla, gol y asistencia en Vila-real… ¿Crees que mereces más?

Puede ser. Quiero jugar y me voy frustrado a casa cuando no lo hago, pero es lo que hay. El equipo está muy bien y todos estamos enchufados, que es lo importante para el míster.

¿Qué es lo que más te ha impactado de Hansi Flick?

Creo que desde fuera se veía a un tío muy serio, que impone mucho… pero es todo lo contrario: muy cariñoso con los que juegan, con los que juegan menos… Tenemos una relación muy sana en el vestuario, de mucho respeto. Eso se está viendo reflejado en el terreno de juego. Nos encontramos superbien.

El gesto de Flick con Pablo Torre: «Después del partido de Champions contra el Estrella Roja se me acercó». RELEVO / SALVADOR FENOLL

Hay futbolistas que dicen que se ponen una alarma para no llegar tarde y evitar los castigos del míster. ¿Tú también eres de esos?

No, no (risas). Siempre suelo llegar puntual, pero es verdad que el míster es muy estricto con los horarios. Mira que soy muy despistado, pero para eso estoy atento (risas).

¿Te has llevado ya alguna multita o de momento te libras?

Nada: estoy limpio.

De Flick se han hecho virales sus gestos de cariño con los que participan menos minutos, como con Héctor Fort contra el Real Valladolid. ¿Ha hablado mucho contigo estas semanas?

Mi relación con él es muy buena. Quiere tenernos a todos enchufados. El otro día, después del partido de Champions contra el Estrella Roja, se me acercó. Iba a salir un rato, pero Cuba (Cubarsí) sufrió la herida en la cara y tuvimos que hacer otro cambio. El preparador físico me había dicho justo antes que en dos minutos entraba. Por esa circunstancia no pude jugar. Le dije a Flick que el equipo era lo importante, que él no podía hacer nada y que yo estaba contento con él.

¿Te planteas salir en el mercado de invierno si la situación no cambia?

Todavía queda un mes y medio en el que debo estar centrado en el Barcelona. Después, ya veremos lo que pasa.

Pablo Torre, sobre su rol en el Barça: «Puede que merezca más; me voy frustrado cuando no juego». RELEVO / SALVADOR FENOLL

¿Qué aprendiste de Xavi, el entrenador que te hizo debutar y que fue clave para que eligieses al Barça y no al Real Madrid?

Mucho. Hizo debutar a un montón de jóvenes que ahora tienen más experiencia en LaLiga y en la Champions. Él fue el que nos impulsó a ello. Y con él se ganó una Liga y una Supercopa de España. Hizo las cosas muy bien.

Estarás disfrutando del liderato del Racing… ¿Crees que este año sí que sí?

A ver, soy un poco gafe… Pero se ve que las cosas se están haciendo muy bien, en el campo y fuera. Hay un equipazo.

¿Tienes fe en que triunfarás en el Barça?

Siempre. Si no… ya me hubiese ido. Sé lo que puedo hacer si tengo confianza.

Una curiosidad: Ilias Akhomach, también de tu círculo, se rompió el cruzado el sábado. ¿Estabas viendo su partido contra el Alavés? ¿Has hablado con él?

No lo estaba viendo, pero me escribió un amigo y me dijo que parecía cruzado. Es muy frustrante enterarte de esas cosas. Tengo una gran relación con Ili. Esperemos que vuelva pronto, que tiene un nivelazo.

Otra: ¿juegas al Fantasy? ¿Se te da bien? ¿Tenéis liga en el equipo?

No, no. Siempre he jugado, pero a las dos semanas lo dejaba. Soy un desastre.

Si pudieras fichar a un jugador para tu equipo para que te diera muchos puntos, ¿a quién ficharías?

A Lewandowski. O a Raphinha.

Dime un futbolista que creas que puede petarlo en el Fantasy y que aún no lo haya hecho.

Mmm… (se lo piensa durante 10 segundos). Me gusta mucho Pablo Barrios, mi amigo. Ha estado con lesiones y todavía no ha podido explotar al máximo, pero será un jugador muy importante para el Atleti.

La temporada pasada sumaste 61 puntos y en esta llevas 37. ¿Crees que los superarás?

Eso parece, ¿no?

Lo parece y seguro que así será. Muchas gracias, Pablo, y suerte para el partido del viernes contra Inglaterra.

Muchas gracias a vosotros.