Nuevo capítulo en la guerra del Real Madrid contra los árbitros: acusan a Soto Grado de no permitirles "luchar por el título"
El club blanco arremete con dureza, a través de su televisión oficial, contra el colegiado que pitará el partido del sábado ante el Betis.

El Real Madrid vuelve a la carga en su cruzada contra los árbitros. La televisión oficial del club ha emitido este jueves un duro vídeo contra César Soto Grado, el encargado de impartir justicia este sábado (16:15) en el partido ante el Betis en el Benito Villamarín. A lo largo de la reproducción de las imágenes, de casi tres minutos de duración, la entidad repasa varios presuntos errores del colegiado adscrito al Comité Riojano y le acusa de perjudicar "de manera sistemática" al equipo blanco durante las últimas temporadas.
En el último capítulo de su guerra contra el colectivo, Real Madrid TV recurre a cuatro encuentros de la pasada campaña para demostrar, a su juicio, que Soto Grado "no ha permitido, más de una vez" que el conjunto de Ancelotti pelease por LaLiga. El último choque disputado en Heliópolis, que terminó con empate a cero, es uno de los principales focos de la exposición.
Para la entidad blanca, aquel día el árbitro "perdonó la expulsión a Ruibal antes del descanso tras un puñetazo a Camavinga", al no mostrarle ni siquiera la amarilla, y dejó sin señalar un "evidente penalti sobre Benzema", además de dejar sin tarjeta roja "una salvaje entrada sobre Vinicius que podría haber lesionado gravemente al brasileño". Los madridistas se dejaron dos puntos "que permitieron al Barça alejarse a nueve".
— VideosRMadridUniido (@RMadridUniido2) December 7, 2023
Antes, en la jornada 14, el Real Madrid cree que el experimentado colegiado permitió "la excesiva dureza de los jugadores del Cádiz" y le acusa de no expulsar a Fali "tras una agresión sobre Rodrygo". Dos fechas después, en Vila-real, Soto Grado pitó un penalti "por mano de Alaba, estando apoyada en el suelo y con la intención de retirarla". Tras aquello, el Madrid "perdió el liderato"... y nunca lo recuperó.
El Clásico
El club, sin embargo, sitúa su gran queja sobre el Clásico en el Camp Nou de la jornada 26, saldado con victoria del Barcelona (2-1) y quejas por un gol anulado a Asensio con empate en el marcador. Soto Grado estaba en el VAR. "Primero no avisó para expulsar a Gavi tras las dos agresiones a Carvajal y Ceballos, pero lo más grave ocurrió a nueve minutos del final. Desde el VAR revisó y anuló el tanto de Asensio por fuera de juego. Para ello utilizó estas surrealistas líneas y escogió este fotograma. ¿Y por qué no este otro, que es posterior y en el momento en el que Carvajal contacta con el balón por última vez, con Asensio habilitado?", se pregunta la televisión oficial.
"Además, en el 2-1 de Kessie, Soto Grado no avisó de la clara falta que precede a la jugada de Lewandowski sobre Carvajal. Tres graves errores que alejaron al Real Madrid de la pasada Liga", critican.
A pesar de los reproches, el colegiado presenta un balance muy favorable a los blancos en los duelos que les ha dirigido desde 2019, cuando ascendió a Primera: 10 victorias, tres empates y dos derrotas en 15 partidos. El del Barça, por ejemplo, es sensiblemente peor (tres triunfos y cuatro derrotas en nueve encuentros). Con el Atleti presenta estadísticas similares a las de los madridistas (cinco victorias, tres empates y una derrota).
Una práctica habitual
Como desveló Relevo, el Madrid dispone de carpetas con errores de todos los árbitros de Primera. Estos vídeos, emitidos antes y después de los partidos, se han convertido en una práctica habitual que desde Valdebebas utilizan como un arma de presión. González Fuertes, Munuera Montero, Martínez Munuera, Alberola Rojas o Clos Gómez, jefe del VAR, son algunos de los que han pasado por la pantalla.
Esta clase de imágenes, que acostumbran a hacerse virales a través de la redes sociales, no son cosa de ahora. El Madrid lleva años emitiéndolas en su televisión, por ejemplo en el desaparecido programa 90 Minuti presentado por Miki Nadal, en el que se arremetía con cierto humor contra los árbitros. La medida ganó repercusión tras el estallido del caso Negreira, con la afición indignada por los pagos continuados del Barcelona al que fuese vicepresidente de los árbitros durante 17 años.