ATHLETIC CLUB - BARCELONA

Una nueva demostración de la ruptura entre Athletic y Barça: De Negreira a Nico Williams

Los aficionados rojiblancos volvieron a recordar a Negreira, mientras los azulgranas cantaron "Nico es culé" incluso durante el homenaje a De Marcos.

Los jugadores rojiblancos realizaron un pasillo a los culés, silbados por el público./Athletic Club
Los jugadores rojiblancos realizaron un pasillo a los culés, silbados por el público. Athletic Club
Patxo De la Rica

Patxo De la Rica

"Respeto al público de San Mamés, a mí siempre me han tratado muy bien. Me sorprende este ambiente de hostilidad hacia el Barça de San Mamés, me entristece porque siempre nos han tratado muy bien. Juzgar antes de tiempo no es bueno para la sociedad". Así respondió Xavi Hernández el 13 de marzo de 2023, tras un duelo en San Mamés en el que la relación entre Athletic Club y FC Barcelona cambió drásticamente. La buena sintonía, los aplausos, las celebraciones de Puyol o el propio Xavi Hernández con la ikurriña tras ganar la Copa del Rey eran pasado. Los nuevos tiempos iban a ir en una dirección completamente opuesta.

Aquel día, la afición rojiblanca fue la primera en hacer una protesta por el mediático y polémico Caso Negreira. Desde la grada de animación se lanzaron billetes, se protestó toda decisión arbitral y se vivió una crispación desconocida hasta entonces hacia el conjunto catalán. En estos dos años no se ha calmado la situación. Todo lo contrario. Este domingo volvió a quedar en evidencia que la distancia entre aficiones es cada vez mayor, con cánticos ofensivos de uno y otro bando, más allá de la evidente ruptura institucional.

"Estoy muy decepcionado con la afición de Bilbao. Por la silbada en el pasillo y por no felicitar al presidente por la Liga que hemos hecho. Lo he encontrado muy feo y creo que no nos lo merecemos", se quejó Enric Masip al llegar al aeropuerto en los micrófonos de El Chiringuito. La distancia entre ambas juntas directivas tampoco es nueva y ha sido evidente en estos últimos meses. Jon Uriarte, en pleno mes de agosto, viajó directamente al duelo de ida a Barcelona para evitar la comida previa con Joan Laporta y este domingo hubo mucha frialdad y tampoco se celebró comida de directivas.

En Bilbao no olvidan la actitud del presidente culé durante el pasado mercado de fichajes, hablando abiertamente de Nico Williams y bromeando sobre ello con aficionados culés pese a tener contrato con el conjunto rojiblanco. Aquello molestó mucho y no se le perdona. De hecho, desde entonces el conjunto vasco ha sido muy duro a nivel interno y también públicamente. "Las normas son para todos y se tienen que cumplir", dijo Uriarte en Arabia Saudí en pleno debate sobre las inscripciones de Dani Olmo y Pau Victor. Allí también mantuvieron un contacto muy frío. 

Crispación en ambos bandos

Si la ruptura institucional llegó el pasado verano, entre aficiones todo estalló en el mencionado encuentro de marzo de 2023. El caso Negreira fue el detonante, aunque también el verano pasado recrudeció aún más la situación. Todo ello se evidenció este domingo en el encuentro disputado en San Mamés, con una sonora pitada al pasillo de campeones que los jugadores rojiblancos le hicieron al Barça. Una decisión de club y recibida de buen grado por el vestuario, que no tenía ningún problema en recibir con honores al campeón de LaLiga. Lo entendían como algo natural.

Los aficionados culés que se situaban en la zona visitante aprovecharon su visita a San Mamés para provocar a los locales con varios cánticos. El más repetido: "Nico es culé", entonado cada vez que el menor de los Williams realizaba una buena acción. Incluso lo cantaron mientras la afición local despedía a Óscar de Marcos en los últimos minutos del partido, algo que molestó mucho a los seguidores locales. Sorprende este cántico, sobre todo porque en el choque de ida, disputado en pleno mes de agosto, Nico Williams fue pitado cada vez que tocaba el balón en el Estadio Olímpico de Montjuic.

Los cánticos sobre Nico encendieron a los aficionados rojiblancos ubicados cerca de la grada visitante y se vivieron momentos de tensión con insultos de un lado y del otro en la zona alta del graderío. Mientras, desde la Herri Harmaila también tuvieron cánticos directos hacia los culés. El más repetido hacía mención al Caso Negreira (¿Y Negreira qué?), aunque también sonó con fuerza el famoso: "ser del Barça es ser un sub...". No había nada en juego, pero este choque volvió a demostrar que los años de buena relación entre ambas entidades son ya historia.