Malcom: "Valverde prefería a Willian y no me dejó demostrar"

Con 16 goles en 21 jornadas, Malcom Filipe Silva de Oliveira (São Paulo, Brasil, 26 de febrero de 1997) es el máximo realizador de la liga rusa. El atacante del Zenit de San Petersburgo vive su cuarta temporada en tierra de los zares, donde ahora sí está dando buena muestra de su calidad. También lo hizo en Barcelona cuando le dejaron (2018-19), aunque como azulgrana le escasearon las oportunidades. Malcom, último culé en anotar en un Clásico copero en el Camp Nou, atiende a Relevo para recordar como fue su breve paso por la Ciudad Condal.

Jugaste solo un Clásico, pero fue mágico para ti. Titular y golazo. ¿Aún recuerdas aquella noche?

¿Cómo iba a olvidar eso? Disputar un Clásico es algo especial, único. Jugué Corinthinas-Palmeiras, Zenit-Spartak... pero un Barça-Madrid es algo diferente. Son los dos equipos más grande del mundo.

Tu celebración fue muy enérgica, como repleta de rabia.

Bueno... tenía pocos minutos, jugaba muy poco y lo que yo quería era mostrar mi calidad al equipo. Fue una sensación natural.

¿Esa noche pensaste que quizá tu historia en el Barça sería diferente a partir de entonces?

Sí, sí, claro. Pero la realidad es que no cambió nada. Por eso tuve que irme. Yo tenía claro que, cuando me dieran la oportunidad, la aprovecharía. Y así fue. Era un jugador joven que quería jugar más. Creo que merecía más minutos, siempre me ponían solo cinco o 10 minutos y pese a ello nunca me rendí. Siempre fui con la cabeza alta, intentando dar mi mejor versión y procurando no perder la concentración.

¿Por qué Ernesto Valverde nunca acabó de confiar en Malcom?

Nunca puedes agradar a todos. Me ponía poco y tenía que aceptarlo y continuar trabajando. El entrenador no me quiso desde el principio porque él había pedido a Willian. No me dejó demostrarle que yo también podía cumplir. En Anfield, por ejemplo, cuando me saca es en el 80' y ya con 4-0. Yo no era su apuesta y me tocó pagarlo.

Pese a todo, volverías a fichar por el Barça si pudieras ir hacia atrás en el tiempo. ¿Cierto?

¡Totalmente! Viví un sueño en el Barça. Jugué con los mejores del mundo y eso quedará siempre en mi memoria. Cumplí el sueño de cualquier niño y además siempre me sentí muy querido por la afición. Siempre me apoyaron. Recuerdo un partido de Copa en el que marqué y luego me hice daño en el tobillo. ¡Todo el Camp Nou estaba coreando mi nombre!

¿Cuando decides irte, por qué eliges al Zenit y no algún equipo de las principales ligas de Europa?

El plan era seguir jugando la Champions, no salirme de ella. La disputamos tres años y después vino la guerra y se acabó. Pero el objetivo no era otro que seguir en Champions y poder revalorizarme.

Hablando de la Champions: en tu debut en la competición ya lograste anotar. Recuerdo que te emocionaste en la celebración en el campo del Inter.

Fue algo increíble. Entré en el minuto 81 y marqué a los dos minutos. Creo que era mi segundo toque de balón. Aquel tanto certificaba la clasificación para octavos y además era mi primer gol en la Champions. Lloré de alegría porque para mí era muy importante.

Volvamos al presente. ¿Sigues al Barça en la distancia?

Por supuesto. Veo los partidos por televisión y tengo claro que siempre apoyaré al equipo. Ahora estamos muy cerca de ganar LaLiga y ojalá podamos lograrla pronto.

Los rumores acerca de un posible regreso de Messi no dejan de crecer. ¿Cómo lo ves?

Que volviera sería lo normal. Leo pasó ahí toda su vida y sería lindo para los aficionados y para todos. Ojalá vuelva. A Leo siempre le deseo lo mejor, fue un orgullo tenerle cerca y ver como todo lo que hace le sale natural. Es un ídolo dentro y fuera del campo.

¿De tu futuro, alguna pista?

Creo que estoy haciendo una buena temporada. Mis números (19 goles y siete asistencias) están muy bien y ahora sí puedo pensar en una nueva oportunidad para volver a las ligas que disputan competiciones europeas. Lo importante ahora es ser campeones con el Zenit y luego ya veremos qué pasa.