ATLÉTICO - REAL MADRID

Llorente vuelve a los orígenes y los jugadores le marcan el paso a Simeone

El Cholo sorprendió con Sorloth junto a Griezmann y Julián como 'cuarto' por izquierda.

Llorente pugna por un balón con Vinicius. </p><p> /EFE
Llorente pugna por un balón con Vinicius. </p><p>  EFE
Marcos Durán

Marcos Durán

Simeone fue cultivando poco a poco el esquema y sistema que utilizó contra el Real Madrid de inicio en el Metropolitano. Fuera Koke, dentro Sorloth y Julián Alvarez a la izquierda, como en Vallecas y como en Balaídos.

El Atleti sorprendió porque volvió la línea de cuatro defensas que el Cholo sí había utilizado alguna vez esta temporada pero nunca de inicio. El entrenador argentino avisó durante varias ruedas de prensa que los jugadores le iban a marcar el paso, que él no estaba cerrado a nada y que iba a ver si en algún momento volvían los cuatro defensas en línea.

Para realizar esto, Simeone retocó el equipo. Quitó a su capitán, Koke, porque necesitaba piernas en el centro del campo para acompañar a Gallagher y De Paul. Un equipo intenso y si hablamos de intensidad nadie mejor que Marcos Llorente junto a ellos formando un triángulo.

Y Llorente, canterano madridista, fue el pivote titular del Atlético. Como cuando tenía edad de juvenil y como cuando fue cedido al Alavés. Allí, en Vitoria, el centrocampista jugó de pivote y fue una de las grandes revelaciones esa temporada.

Si en la línea de centrocampistas las cosas estaban claras, arriba sí cambiaban. Porque Simeone, en defensa, metía a Julián Alvarez en banda, como 'cuarto' por la izquierda, como a él le gusta decir. En defensa, 4-4-2 con Sorloth de referencia y Griezmann con permiso para moverse donde a él le plazca.

Llorente vuelve a los orígenes y los jugadores le marcan el paso a Simeone

Julián se tenía que preocupar de las subidas de Carvajal y a su vez Simeone elegía al argentino ahí para que el lateral de la selección española no estuviera tan cómodo en sus internadas por ese costado.

El primer tiempo era una partida de ajedrez, nadie quería mover una pieza más de lo ideal para no recibir ninguna contra. Si uno arriesgaba, el compañero rápidamente buscaba tapar el hueco y corría el doble para que el equipo no se descompensase. El plan estaba claro y todos sabían cómo ejecutarlo a la perfección.

Vuelta a la banda

En la segunda parte Simeone quitó a Molina por Koke y Llorente volvió a la banda. El argentino quería más juego y con el capitán detrás de Gallagher y De Paul conseguía un poco más de control y menos de piernas.