ALAVÉS 0 - BARCELONA 3

Este Lewandowski convierte al Barça en candidato a todo

Tres goles en media hora para el polaco fueron suficientes para ganar en Mendizorrotza. Cuando los blaugrana pisan el acelerador, nadie logra igualar su ritmo.

Lewandowski marcó tres goles en Mendizorrotza y es Pichichi en solitario. AFP
Jordi Cardero

Jordi Cardero

El Barça de Flick ya golea por inercia. Robert Lewandowski necesitó solo media hora para marcar un hat trick. El partido murió a una hora del final después de una nueva demostración del poderío ofensivo blaugrana. Han pasado únicamente un par de meses y sin embargo parece que el Barça viva otra vida. Lewandowski ha olvidado los planes de retiro y Raphinha escribe ahora la historia que siempre quiso para él. Sus cambios de relato son los que explican mejor por qué el Barça de Flick es uno de los equipos más imponentes del continente.

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"Para ganar, tenemos que meter dos goles", comentaba en la previa un Luis García Plaza que cumplió los 100 partidos como entrenador del Alavés. Y con el partido todavía despertando, Raphinha ya anotó el primero, anulado por un fuera de juego previo de Lamine Yamal. No le hace falta al Barça dominar para crear peligro. Aunque en el minuto 4, el decorado cambió. Se marchó Ferran Torres lesionado y entró Eric Garcia, mandando al brasileño a la izquierda.

Todavía con el equipo asumiendo el cambio, en una jugada a balón parado lanzada por Raphinha, Lewandowski marcó el primer gol del encuentro. Con ocho, ya se colocaba como Pichichi en solitario. La mitad le sirvieron a los blaugrana para inaugurar el marcador. El Alavés no se intimidó y, poco a poco, comenzó a impulsar un plan que consistió en martillear la adelantada defensa culer. Para probar la química entre Iñigo y Cubarsí y la confianza de Iñaki Peña a la hora de salir del área. Se apagó pronto.

Cuando un robo a 70 metros se convierte en un gol

El Barça es un equipo con muchas capas. En la primera jugada en que el Alavés logró asentarse en campo rival, un robo de Pedri a 70 metros de Sivera acabó con la pelota en los pies de Raphinha. El capitán corrió hasta plantarse dentro del área y asistió a Lewandowski, que una vez más anotó. En posesiones largas, al contragolpe o a balón parado. El Barcelona demostró por qué es el equipo más goleador de las grandes ligas del continente. En el área técnica, Luis García se lamentaba de que Carlos Vicente no finalizara la acción que acabó gestando el contragolpe blaugrana. Un error lejísimos del área propia lo convierte el Barça en medio gol.

A la media hora de partido, Lewandowski se encargó de matar el partido. Marc Casadó, al que la 'invisibilidad' mediática le es el mayor de los elogios, activó a Eric y el reconvertido mediocentro asistió a Robert. Escorado, no necesitó mirar dónde estaba la portería. Calibró el tiro y lanzó un balón raso y cruzado. Al Barça se le exige amasar las posesiones, pero Flick ya les ha instalado en la cabeza que la primera idea es ser verticales.

Cuando el Barça se instaló en campo contrario, el Alavés se vio sin recursos para recuperar el balón. Carlos Vicente retrocedía muchos metros para no descuidar a Balde, mientras que en el lado opuesto Manu Sánchez siempre recibía la ayuda de un compañero para defender a Lamine. Por dentro el Alavés se separaba, aun con Tenaglia siguiendo a todas partes a Raphinha. El lateral lanzó al filo del descanso un buen centro a Toni Martínez que el punto remató dentro. El gol reanimó a Mendizorrotza, pero el VAR, anulándolo por fuera de juego, volvía a instalar al Alavés en el mismo estado de impotencia.

El Barça esterilizó la ilusión del Alavés

Salió el Barça tras el descanso con un par de marchas menos. El Alavés no quiso rendirse con tanto tiempo por delante y Toni Martínez, una vez más, tuvo una buena ocasión. Su tiro se estrelló en el palo. Previamente, Iñaki Peña había hecho un despeje poco riguroso. El portero sale de portería por norma más que por convicción. Pero bajo palos no es capaz de esconder que su confianza es escasa. Tras el parón, Szczesny ocupará la meta si el staff ya lo ve a punto.

Sintiéndose superior y lejos en el resultado, el Barcelona no respondía a los intentos del Alavés de asustar. Tras el acelerón vasco, Flick decidió dar más minutos a Ansu Fati, que descansara Lamine -poco podrá hacerlo con la Selección, y reincorporó a Jules Koundé. Sivera y después el palo evitaron con una gran mano el gol de Ansu. Necesita el canterano un tanto para ir sumando grados de confianza.

Este Lewandowski convierte al Barça en candidato a todo. Están jugando tan bien que apenas se ha reparado en que dentro de unos días regresará el fichaje estrella, Dani Olmo. Y pronto lo hará Gavi, con De Jong cogiendo ritmo. Si Szczesny vuelve del retiro manteniendo el nivel del curso pasado, bien haría este Barça de no ponerse techos. Aun estando a inicios de octubre, no hay a estas alturas un equipo superior en Europa.

Ficha técnica

DEPORTIVO ALAVÉS: Sivera; Tenaglia (Diarra, min.46), Mouriño, Abqar (Pica, min.67), Manu Sánchez; Guevara, Antonio Blanco (Jordán, min.78); Carlos Vicente, Rebbach, Stoichkov (Conechny, min.57); y Toni Martínez (Kike García, min.57).

FC BARCELONA: Iñaki Peña; Fort (Koundé, min.67), Cubarsí, Iñigo Martínez (De Jong, min.81), Balde (Gerard Martín, min.81); Pedri, Casadó; Lamine Yamal (Ansu Fati, min.67), Ferran Torres (Eric García, min.6), Raphinha; y Lewandowski.

--GOLES:

0-1, min.7: Lewandowski.

0-2, min.22: Lewandowski.

0-3, min.32: Lewandowski.

--ÁRBITRO: Ortiz Arias (C.Madrileño). Amonestó a Tenaglia (min.31) y a Mouriño (min.54) por parte del Deportivo Alavés y a Iñigo Martínez (min.53) y a Gerard Martín (min.86) por parte del FC Barcelona.

--ESTADIO: Mendizorroza. 19.468 espectadores.