La cláusula que falta para que se venda el Granada
El Director General del club nazarí, García Amado, rebaja la euforia inicial mientras que el intermediario argentino dice que nada ha cambiado.
¿Se ha parado la venta del Granada? No. ¿Puede que se termine cayendo la operación? Sí. ¿De qué depende? Pues de una gestión súper habitual en estos procesos de ventas: estar 100% seguro de que, con el paso de los años, no te vas a encontrar una deuda que "no te toca".
El pasado día 5 de julio, Alfredo García Amado, director general del Granada CF, habló sobre la situación actual del club y fue tajante ante las preguntas sobre la venta al grupo americano liderado por el argentino Andrés Fassi: "Ahora noto pesimismo, tristeza; todo por informaciones externas. La propiedad es responsable y atiende a los que llaman a su puerta. En cualquier circunstancia que pueda pasar por su mente predomina la viabilidad, la estabilidad. Lo que queremos todos es que el Granada siga creciendo. A partir de ahí, seguimos caminando. No ha habido nada en firme".
Esa frase es contradictoria a las informaciones que conocemos, ya que el grupo americano Mountain Star Sports Group (MSSF) a través del mencionado Fassi tiene claro que el problema sigue siendo el 'caso Líbero' y, que si se destraba esta situación, el trato sigue por buen camino. "Nuestro acuerdo está supeditado a la solución del caso Líbero", afirmó en breves declaraciones a Ideal de Granada el día jueves 6 de julio.
Como hemos contado en Relevo, esta resolución es compleja porque está involucrada la anterior propiedad y la actual (al ser los dueños de la sociedad), por eso mismo el grupo americano interesado sigue esperando qué va a ocurrir, aunque esto llevará tiempo y la causa dirigida por la Audiencia Nacional no se esclarecerá ni en las próximas semanas ni meses.
Es como si vas a comprar una casa: antes te aseguras de que el que te la vende no tenga cargas (presentes o futuras) que te puedan repercutir a ti. Y, en el caso del Granada, ese riesgo es muy real.
Cómo solucionar esto
Ante tal situación, las posibilidades pasan por llegar a un acuerdo sobre quién se va a hacer cargo de la parte económica. Eso se puede solucionar, pero está causando problemas, ya que no se conoce la deuda que el club podría tener con Hacienda (entre 15 y 40 millones de euros, como hemos contado). Otro tema a tener en cuenta es la Responsabilidad Civil, algo en lo que hace hincapié Fassi.
Relevo contactó con un especialista en procesos de intermediación de venta de clubes y su punto de vista es claro ante esta problemática: "En estos casos, lo que se suele hacer es acordar el pago de una parte del club y dejar lo que resta a expensas de las resoluciones judiciales. Si el club vale 15, por poner un ejemplo, se pagan 12 y se espera hasta que se esclarezca el tema con los otros 3 millones de euros". Así se hizo, por ejemplo, con el Sporting de Gijón en su proceso de compra por el grupo Orlegi.
Al no conocer cuándo llegará la sanción, todo tiene que quedar por escrito. Quién se hace cargo y cómo. Lo lógico es que la nueva propiedad sea la que pague cuando llegue la deuda, pero al no conocer el importe aproximado de tal multa, las cifras no se pueden cerrar. "Lo que se intenta es que se refleje todo en el precio de la compra, activos, pasivos, deudas, futuras contingencias... por eso mismo no es fácil. Yo he estado en negociaciones por el Granada y no salieron adelante debido a que el precio que pedía la actual propiedad era muy alto para un club de Segunda. Ahora están en Primera, es diferente".
Eso sí, es imposible hacer un acuerdo para que la Responsabilidad Civil la tengan otros: "Esto es como cualquier empresa de otro sector, es una Sociedad Anónima y la ley es igual para todos. Una vez se transfiere el club, se transfiere todo, con sus pros y sus contras", finaliza.