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Fuerte discusión entre Isco y Monchi: su salida en enero ya está sobre la mesa

El director deportivo del Sevilla y el centrocampista protagonizaron un encontronazo delante de la plantilla.

Isco charla con Rakitic en un entrenamiento del Sevilla./EFE
Isco charla con Rakitic en un entrenamiento del Sevilla. EFE
Samuel Silva

Samuel Silva

Pese a la pausa liguera, el Sevilla sigue en estado de tensión. Según ha podido saber Relevo, Isco tuvo una discusión subida de tono con Monchi esta semana en una charla de este con la plantilla en la ciudad deportiva. Entre otras cosas, Isco evidenció que él estaba en Sevilla por la confianza de Lopetegui y no por él. E incluso no descartó una salida en enero. Eso sí, la situación, desde el encontronazo, se ha ido suavizando.

El jugador no acaba de encontrar su sitio en el Sevilla y ahora mismo para nada se puede descartar que cambie de aires en el próximo mercado. El del Arroyo de la Miel llegó en verano como la guinda de los fichajes de Lopetegui e incluso con alrededor de siete mil de aficionados en el Pizjuán para darle la bienvenida. Sin embargo, ni su rendimiento ni el del Sevilla, un club que se ha metido en problemas, está siendo satisfactorio, de ahí que surjan este tipo de situaciones. Además, la entidad de Nervión necesita aligerar la nómina de jugadores paraacometer los fichajes que desea Sampaoli, por lo que casi toda la plantilla está en esa rampa de salida.

El argentino ha tratado desde el principio de buscar acomodo a Isco en el campo, un jugador al que tenía en buena consideración, pero la realidad es otra. Ni de delantero, ni de mediapunta, ni en la banda izquierda Isco ha marcado la diferencia como se esperaba, de ahí que Sampaoli tampoco tuviera al malagueño como indiscutible. De hecho no entró en la lista para el amistoso ante el Mónaco del pasado miércoles. Hasta ahora, el ex del Madrid, de 30 años, ha jugado 19 partidos (1.265'), ha marcado un gol y dado tres asistencias.

Futuro incierto

A ese rendimiento deportivo inferior a lo esperado se ha sumado esa discrepancia con los técnicos, con lo que ahora mismo tanto Isco como el Sevilla se están replanteando el futuro que los une desde el pasado verano. Llegó libre y tan solo firmó dos años, por lo que una rescisión tampoco debe descartarse como solución de emergencia, aunque dependerá de si el internacional cuenta con ofertas.

Tampoco la llegada en agosto contó con el consenso de toda la entidad e incluso el anuncio de su fichaje se retrasó más de lo esperado, después de que Isco tuviera que acomodarse a las posibilidades económicas del Sevilla, que también hizo un esfuerzo para contentar a Lopetegui, su gran valedor.

"Necesitamos contundencia en las áreas ", dijo Sampaoli el jueves, precisamente una cualidad que Isco no ha aportado desde su llegada. Ahora se ha añadido ese incidente en el vestuario que lo coloca más fuera que dentro del Sevilla.