Las finales de Mestalla

Acaba de terminar el partido en Mestalla ante el Real Betis, el Valencia CF ha perdido y el ambiente entre la gente es de que Europa se escapa de entre los dedos. Sin embargo, cuando este medio palpa la opinión del vestuario y el cuerpo técnico al término del encuentro, el mensaje que sale de dentro es completamente opuesto y se resume en una frase: "Nos jugaremos Europa en Mestalla".Y así será en los dos próximos partidos.

Desde que engancharan las dos victorias consecutivas ante Granada y Osasuna, el equipo de Rubén Baraja estaba convencido de que pasara lo que pasara ante Betis y Barcelona, si ganan sus dos encuentros en casa ante Alavés y Rayo Vallecano afrontarán las últimas tres jornadas del campeonato dependiendo de sí mismos para entrar en competición europea.

Evidentemente, todos querían sumar ante el Betis y el Barça, pero los de Baraja eran conscientes de que las plantillas de ambos conjuntos son superiores a la suya y si están en el 'ajo' por Europa no es tanto por haber triunfado en los duelos directos ante estos rivales, sino por su regularidad durante las más de 30 jornadas transcurridas de la competición. Ante el Alavés no hay fallo que valga, igual que contra el Rayo Vallecano. Están conciencias de que esos dos partidos han de ser un '+6'. Ahora todo está en sus botas.

Rubén Baraja tiene decidido que Jaume sea su portero el próximo domingo ante el Alavés a pesar de que su actuación ante el FC Barcelona no fue todo lo buena que se esperaba. A este respecto, tanto los jugadores como el propio cuerpo técnico han cerrado filas alrededor de su capitán, que es sin duda alguna el futbolista más querido dentro del vestuario.

Si Jaume es quien apoya a los jóvenes cuando suben, a los fichajes cuando llegan o a Gayà cuando hay que tomar una decisión relevante... Ahora son todos ellos los que han arropado a su capitán, dándole ánimos, confiando en él de cara a la 'final' ante el Alavés que él jugará y eso es algo que Rubén Baraja sabe. El Pipo hasta la fecha ha tenido una gestión de vestuario excelsa y sabe que no poner a Jaume sería un mazazo no solo para el jugador, sino para el equipo, además no va a virar una decisión que tomó a principio de temporada (que Jaume fuera su 2º portero), por un mal partido. El damnificado, el bueno de Cristian Rivero cuyo contrato expira en junio, que todavía no ha tenido una reunión para renovar y sigue sin debutar en liga pese a llevar desde 2020 en el primer equipo.