Alta tensión en el Coliseum: rojas a Mata, Raphinha y Xavi; media prórroga de descuento; VAR en el 105'...
El brasileño vio la roja y desató minutos de alto voltaje. Soto Grado añadió diez en la primera mitad y la segunda concluyó en el 106'. El VAR avisó al colegiado de un penalti de Iglesias, pero antes hubo mano de Gavi.

El Getafe-Barcelona transcurrió según lo esperado, hasta que una acción de Raphinha desató una enorme tensión que no se desvaneció hasta el pitido final, ¡en el minuto 106! El equipo local durmió el partido, a la par que su adversario comenzaba a frustrarse entre los pocos espacios y la capacidad del rival de sacar rédito de cada acción. Xavi ya lo pedía en la pausa de hidratación: "Que pasen cosas, que pasen cosas". Y tanto que ocurrieron. Al filo del descanso, Pedri filtró un balón por dentro, buscando a Raphinha, que ya se las tenía con Gastón. El '11' perdió los nervios y soltó el brazo más de la cuenta para deshacerse de su rival, lo que provocó su expulsión. Pese a tratarse de una roja directa, lo más natural es que el acta arbitral lo interprete como una acción del juego y no dé lugar a una sanción mayor. En la segunda mitad, el ambiente fue incluso a más y Xavi fue expulsado.
El técnico blaugrana se cansó de los segundos que el Getafe trataba de ganarle al crono y protestó enérgicamente una acción en la que Djené se quedó doliéndose en el suelo tras un choque con Abde. Xavi se marchó por el túnel de vestuarios, cariacontecido y con un enfado mayúsculo. Segundos antes había mantenido contacto directo con el cuarto árbitro, en lo que pudo ser el motivo de su expulsión. Terminó viendo el partido en una cabina de prensa, lo que desató el furor de la gente de la grada, que incluso bromeó: "Xavi, preséntame a Gavi".
En el acta, Soto Grado escribió: "En el minuto 70, el técnico Xavier Hernández Creus fue expulsado por el siguiente motivo: salir de su área técnica con los brazos en alto hacia la zona de mi cuarto árbitro protestando de manera ostensible una de mis decisiones, habiendo sido advertido con anterioridad por mi cuarto árbitro. Una vez expulsado se quedó en la boca del túnel de vestuarios teniendo que ser advertido el delegado de campo para su desalojo".
Desde entonces, el Barça trató de enmendar la roja a su técnico empujando sobre la portería rival y cerca estuvo de obtener premio casi sobre la bocina de los diez de añadido. Gavi pugnó por un balón y se apoyó de la mano para que el esférico llegase a la posición de Araujo, barrido por detrás por Juan Iglesias. El colegiado, en primera instancia, no señaló nada, lo que provocó un enfado mayúsculo del propio Gavi, que vio la amonestación. El VAR le avisó de lo ocurrido y fue a la pantalla a verlo. Tras varios minutos de infarto a pie de césped, Soto Grado decidió señalar mano del canterano blaugrana y, por tanto, posesión para el Getafe. El tiempo perdido se enmendó alcanzando tiempos más propios de una prórroga que de un partido de fútbol: hasta el 106' no se señaló el pitido final de un empate a cero que no dejó indiferente a nadie.
El codazo de Raphinha, el detonante
En la acción de Raphinha, ni siquiera le hizo falta a Soto Grado ir al VAR. Los jugadores del Getafe saltaron al instante a protestar enérgicamente lo sucedido, mientras el futbolista se dolía en el suelo del impacto del brasileño. También Bordalás y todo su cuerpo técnico lo reclamó de inmediato, hasta el punto de invadir el campo. La enorme tensión vivida en el césped del Coliseum se tradujo en la roja directa para Raphinha, que complica enormemente el devenir del partido para el equipo de Xavi.
La trifulca, que también implicó la roja directa a un ayudante de Bordalás (Christopher Oyola Palacios, el médico), detuvo el partido varios minutos. Junto a otras pérdidas de tiempo o la pausa de hidratación forzaron un descuento de diez minutos, algo prácticamente insólito en la historia de la competición. Ya avisó el Comité Técnico de Árbitros que una de las medidas más novedosas de la campaña era añadir más tiempo y compensar cada segundo perdido, incluido un minuto por cada gol.
¡ROJA A RAPHINHA! 🔴
— DAZN España (@DAZN_ES) August 13, 2023
Esta fue la acción por la que el colegiado expulsó al jugador del FC Barcelona ante el Getafe 👀#LALIGAenDAZN ⚽ pic.twitter.com/kkYJ0GqMnD
Pese a que el primer tiempo concluyó con empate a cero en el electrónico, el añadido se aproximó a la cantidad de tiempo perdida en una primera mitad de altos vuelos. Eso sí, no se trata de ningún récord: ya en esta misma jornada el duelo entre Rayo Vallecano y Almería tuvo once minutos de añadido. El descuento, muy protestado por el público azulón, rebajó algo la tensión sobre el césped, si bien los jugadores del Getafe volvieron a lamentar enérgicamente que Soto Grado no amonestase a Araujo por coger el balón con la mano de forma intencionada. El descanso, motivo suficiente para calmar las aguas, aunque Xavi y Aleñá se marcharon dialogando con algo de tensión sobre lo sucedido. Ya en la segunda mitad, se equilibró la balanza con una clara segunda amarilla a Jaime Mata, que llegó tarde a un balón dividido frente a Ronald Araujo.