Las dos veces en las que Saúl Coco pudo perder la vida: "Era un zombie"
El central de Las Palmas pasó por un calvario en 2020. Primero contrajo la malaria y luego se estampó contra un muro.
"Estamos superfelices. Pasó por una época complicada e incluso pensamos que iba a dejar el fútbol. Ahora está recogiendo la recompensa a todo ese sufrimiento". Las palabras de Basilio Coco a Relevo instantes después de que su hijo Saúl Coco se estrenara como goleador en Primera División con un golazo de falta digno de Cristiano Ronaldo, reflejan el sentir de una familia que en 2020 vivió la cara más dura y más amarga del fútbol.
"No sabemos si llega a mañana", dijeron los doctores sobre el estado de salud de Coco a sus más allegados. Porque quien hoy disfruta defendiendo los colores de la UD Las Palmas y que esta noche se enfrentará por primera vez al Atlético de Madrid de Simeone (21:00 horas) no olvida el calvario que vivió con sólo 20 años.
"Saúl se fue convocado con Guinea y durante la concentración contrajo la malaria. No le dieron la pastilla que se tenía que tomar y cuando volvió a Las Palmas, a los pocos días, lo tuvieron que ingresar", recuerda Basilio Coco. Jugador en aquel entonces de Las Palmas C, tras ser titular en un encuentro ante el Tamaraceite, Saúl empezó a encontrarse mal.
"Esa tarde Saúl había hecho un partido espectacular. Horas más tarde le dio un brote de fiebre alto y fue ahí cuando se le detectó que había contraído la malaria", cuenta a Relevo Yoni Oujo, entrenador de Coco en aquel filial. "Después del encuentro empezamos a notarle raro. Le dijimos que se viniera para Lanzarote para estar con nosotros", explica Basilio. Esa noche y ya acompañado de los suyos Saúl ingresaba en el hospital. "El médico nos dijo que no sabía si iba a salir de esa. Era un zombie", recuerda emocionado su padre.
Siete semanas apartado de los terrenos de juego, Saúl, que "casi pierde la vida", le ganó el partido a la malaria. "Bajó mucho de peso. Yo hablaba a diario con su padre para ver cómo estaba. No era una gripe más y no había mucho control sobre ello", recuerda Yoni. El defensa, que poco a poco, fue recuperando la forma y el tono físico volvió a pisar el césped.
Pero meses después un nuevo contratiempo volvió a golpearle con fuerza. "Pensé que se había muerto".
El fatídico muro en Tacoronte
"La sensación era de que había muerto. Mi percepción y la de los chicos, que empezaron a llorar por la gravedad, era ésa. Algún médico saltó al campo, pero no reaccionaba. La sensación era de extrema gravedad".
El episodio relatado por Yoni Oujo ocurrió el 10 de febrero de 2020 en el campo del Atlético Tacoronte. Saúl, que luchaba por llegar a un balón dividido con un jugador del equipo rival, llegaba a línea de fondo a gran velocidad y, al desestabilizarse, chocaba contra un muro ubicado detrás de la portería.
"El estruendo que hay en el campo hace que la gente se quede en silencio. Daba la sensación de que había caído muerto"
Entrenador de Coco en Las Palmas C"El estruendo que hay en el campo hace que la gente se quede en silencio. Saúl va al suelo y cae inconsciente. Desde fuera yo pensaba que el impacto era mucho más grave por cómo se desplomó y porque daba la sensación de que había caído muerto al campo", apunta un Yoni que aquella tarde vivió el que, hasta la fecha, es sin duda "el susto más grande" de su "carrera deportiva".
"Es lo más grave que he percibido nunca. He visto lesiones graves, fortuitas, tibias, brazos... Al final sabes que es una lesión que va a revertirse. Pero con lo de Saúl no sabía lo que iba a suceder", señala. Por suerte y como cuenta Basilio, Saúl se salvó la vida porque, en una décima de segundo, el central puso las manos por delante y en lugar de impactar con la cabeza, se fracturó las dos muñecas.
«Nunca bajó los brazos y volvió más fuerte»
Tras el susto que afortunadamente sólo quedó en eso, tocaba volver a levantarse. "Saúl nunca bajó los brazos. Estaba acostumbrado a sobreponerse y volvió al mismo nivel que siempre. Fíjate lo maduro que es y la mentalidad tan fuerte que tiene que la temporada siguiente pasó de las Palmas C a las Palmas Atlético", confiesa Yoni.
El 17 de diciembre de 2020, sólo un año después del episodio de la malaria, Saúl debutaba con el primer equipo en un partido de Copa del Rey. Un fijo en los entrenamientos con los mayores, fue en 2022 cuando se haría con un hueco en las alineaciones. Titular indiscutible y pieza clave en el ascenso de Las Palmas la pasada temporada, este curso, sin embargo, sólo ha salido de inicio en cuatro de las 11 jornadas disputadas.
Pese a que este verano tuvo ofertas para salir de Las Palmas, él quiso seguir en su casa. Titular en tres de los últimos cinco partidos, desde su entorno apuntan que, desde la humildad, no bajará los brazos para volver a ser indiscutible para García Pimienta. Porque en esto de la resiliencia no hay quien gane a Saúl Coco.