ATLÉTICO 2 - LAS PALMAS 0

El 'déjà vu' del Atlético de Madrid se apellida Simeone: "El club no gastó dinero y compró a un hijo"

Más de 20 años pasaron desde la última vez de un gol con ese apellido en el Atlético.

Giuliano celebra el gol mirando al palco. /REUTERS
Giuliano celebra el gol mirando al palco. REUTERS
Marcos Durán

Marcos Durán

El 28 de julio de 2004, Diego Pablo Simeone marcaba el último de sus 30 goles con la camiseta del Atlético de Madrid. Fue en un partido de Copa Intertoto ante el OFK Beograd, más concretamente unas semifinales que terminaron 1-3.

Estamos hablando de Copa Intertoto, un torneo que ya no existe. Y hoy el Atlético de Madrid está en la élite europea, es otra historia. Pero hay algo que se repite y es un apellido: Simeone. Aquel día el que marcó fue Diego Pablo y hoy el que marcó su primer gol fue Giuliano, el pequeño de la zaga.

Giuliano Simeone tenía los dos pies fuera del Atlético de Madrid en verano y hoy, a 3 de noviembre, es titular. Pero no por apellidarse Simeone, sino porque se lo ganó con su trabajo diario. Igual que se ganó quedarse a formar parte de la plantilla, se ganó disputar su segundo partido de titular y marcar su primer tanto como rojiblanco.

En rueda de prensa, Simeone padre fue claro: "Hizo lo que tiene que hacer, por eso está en el Atlético de Madrid, tiene unas obligaciones por jugar en este equipo, los que corren juegan y los que corren menos juegan menos conmigo", explicaba el entrenador argentino.

Los periodistas, en rueda de prensa, incidimos mucho en el papel del jugador argentino. Y alguno recordó que hace 30 años fue el primer gol de Simeone como jugador del Atlético de Madrid, aquel en liga contra el Real Madrid de penalti en un derbi: "Hablar de 30 años atrás no me gusta porque empieza a cantar el tema de la edad. Yo a Giuliano lo veo como un jugador de fútbol y cuando decidí que se quede con nosotros lo veo como uno más, yo lo único que pienso es en el equipo, no pienso en nadie o nada, no es una situación diferente para mí".

Giuliano Simeone juega porque deja todo en el campo y porque juega bien. No todo es duelo e intensidad, aunque gran parte de su aporte viene por ese lado. Koke, que lo conoce desde que es un niño, desde que con ocho o nueve años correteaba por los campos de entrenamiento y hacía de recogepelotas en el Calderón, habló de él con admiración.

Que te elogie el capitán del equipo no es para muchos: "Me alegra mucho su situación, lo conozco desde que tenía ocho años, tiene raza, ese carácter competitivo y ganador. Muchas veces se oye de 'el hijo de quién es', me alegra su actitud, su manera de entrenar, me alegra su sentimiento de pertenencia y lo que es él", afirmaba.

Polivalencia y ganas de triunfar

Desde pequeño, Giuliano soñaba con triunfar en el Atlético de Madrid. Lo decía a su entorno y se veía en su cara cada vez que vestía la camiseta rojiblanca. Disfruta de jugar con la intensidad de que cada pelota es la última que va a tener y eso le hace muy peligroso.

Además, para Simeone es un comodín. Ante la gran afluencia de jugadores de ataque y las bajas en banda, ha acudido a él para jugar como lateral largo o carrilero, dependiendo la situación del partido. Por ahí llegó la asistencia a Griezmann ante el Leganés y por ahí llegó el gol ante Las Palmas. Por la derecha.

Pero en Argentina jugó en la banda izquierda y en el Alavés jugó de delantero, de segunda punta. Puede aportar en varias situaciones y posiciones, por lo que para su padre, Diego Pablo, esto es una gran ventaja.

«No es que el club gastó dinero para comprar a Giuliano»

Su caso no es igual que el de su hermano Gio, que debutó en Argentina como profesional y labró su carrera fuera del Atlético de Madrid. Simeone explicó que esto no es igual, que no es la misma situación, al ser preguntado ante su 'negativa' de entrenar a uno de sus hijos hace años, cuando Giovani (actualmente en el Napoli) sonó para el club rojiblanco.

Y Simeone lo explicó de la manera más clara que pudo: "Es una buena pregunta para algunos que no entiendan la situación. Nosotros no fuimos a buscar a Giuliano, él era jugador del Atlético de Madrid, estaba dentro de la Academia del Atlético de Madrid, creció desde los 16, 17 años para adelante con el club. No es que el club hiciera una compra y gastó dinero para comprar a un hijo. No. Es un chico que fue a las olimpiadas y lo hizo bien, que el entrenador lo vio con las posibilidades de que nos pueda ayudar, por eso el entrenador lo subió a primera división y hoy está demostrando sus capacidades. Tendrá buenos y malos partidos pero seguro que tiene lo que hay que tener", finalizó un encendido Simeone.