Un Clásico que puede cerrar la Liga o ponerla en órbita
Al Real Madrid no le cabe otra que ganar para que el resto del campeonato tenga sentido para él. Un triunfo del Barça aumentaría su ventaja a siete puntos y sería campeón virtual.

Con tan solo tres jornadas por delante para el final del campeonato, este Clásico, cuarto de la temporada, se presenta tan decisivo, o más, que los tres anteriores en los que se decidieron dos títulos (Supercopa y Copa) y, prácticamente, el goalaverage particular liguero entre los dos equipos con el 0-4 del Barcelona en el Bernabéu. Cierto es que en este curso solo los azulgranas han sabido conjugar el verbo ganar, pero también es verdad que la influencia del pasado más reciente siempre es relativa, por no decir exigua, en el desafío que está por llegar. Hurgar en los duelos del pasado, aunque alguno sea muy reciente, es entrar de lleno en el terreno del subjetivismo en el que cada cual se agarra a lo que cree menester para convencerse de sus posibilidades de éxito.
Lo que sí puede tener su peso y su incidencia a lo largo del encuentro de Montjuïc son esos cuatro puntos de ventaja, cinco con el goalaverage, con los que el equipo de Flick salta el campo. Una renta sabrosa y manejable que los barcelonistas podrán manejar a lo largo de los 90 minutos según les convenga en cada momento. Al Real Madrid no le cabe otra que ganar para que el resto del campeonato tenga un sentido para él. El grado de especulación que le queda en este enfrentamiento es mínimo.
Por lo demás, el gran partido de la Liga española continúa marcado por las ausencias de hombres importantes, sobre todo en ambas parcelas defensivas. Bajas que no son inconveniente para asegurar que estos dos equipos se enfrenten entre sí con el convencimiento y la seguridad de que son, y han sido, los dos mejores de la temporada. Les avalan prácticamente todos los datos numéricos y futbolísticos que han acumulado a lo largo del curso y que, con solo nueve puntos por disputar, tienen sabor a ser casi definitivos y fieles servidores de la realidad de lo que ha sido cada uno. En el caso del Barcelona, además, se tienen que valorar mejores sensaciones en cuanto al juego se refiere. Ha tenido más continuidad y una apuesta fija e innegociable por un estilo. Mientras que los de Ancelotti han manejado distintos registros y no siempre con brillantez, aunque tampoco con malos resultados, como confirma el hecho de que continúan vivos en la competición.
Datos generales
Apuntes, detalles, para tener en cuenta antes de ver este Clásico. El 'Flick-team' ha llegado a los 79 puntos desde sus 25 victorias, cuatro empates, 91 goles a favor (2,7 por encuentro) y 23 jornadas como líder. El número de derrotas, cinco, y de tantos en contra, 33, es el mismo que el Real Madrid. Que los dos conjuntos atacan mejor que defienden se refleja en que el tercer y el cuarto clasificado, Atlético y Athletic, han visto menos goleadas sus respectivas porterías: 27 y 26 tantos. En el caso del Barça, llama la atención que, a pesar de que tres de sus cinco derrotas han llegado en el Lluís Companys, se ha mostrado muy sólido en su estadio, como demuestra que ha logrado el 78% de sus puntos (40 de 51): 13 partidos ganados y uno empatado. Ambos son los dos conjuntos que más minutos del campeonato han jugado con el marcador a favor: 1.594, (47,4 % )el azulgrana; por 1. 442, (43,3 %), el blanco.
Aspectos posicionales
El Barça, defensa alta, ocupación masiva del campo contrario, presión inmediata tras pérdida, ha sido fiel durante todo el curso a un 1-4-3-3 que, en muchas fases de los partidos, se pude entender como un 1-4-2-3-1. Las alturas de sus tres centrocampistas varía ostensiblemente dependiendo de que el equipo tenga el balón o no. Incluso, durante muchos minutos se escalona en tres líneas de pase: De Jong-Pedri-Olmo (Fermín).Es el equipo con más posesión (66,6%) del campeonato. No la ha perdido en ninguno de los 34 partidos y en 10 ha superado el 70 %. Para progresar y generar peligro, su plan de juego pasa por asociarse en espacios reducidos. Los desplazamientos en largo son casi residuales y presenta el tanto por ciento (7,3%) más bajo de pases de 30 metros.
También es el bloque que juega más adelantado de LaLiga (53, 1 metros) y la distancia media entre su último defensa y su portería es de 41,3 metros, casi en el círculo central. Otra característica que define a los azulgranas es la amplitud que intenta dar su juego para abrir a sus rivales. La distancia media entre sus dos jugadores más abiertos es de 44,3 metros. En ataque, es el equipo más corto de la Liga y apuesta siempre por el juego asociativo. Sin embargo en la fase defensiva estira más sus líneas y es el tercero más largo.

Ancelotti ha vuelto a demostrar que tiene un plan para cada ocasión. O casi. La ocupación de los espacios es más o menos la misma, pero el dibujo varía según el rival. Al final, el 1-4-2-3-1 (43% de los encuentros) se ha impuesto al 1-4-3-3 y al 1-4-4-2, ya fuera en rombo o en línea. También conforma un conjunto que intenta plantarse lo más arriba posible (48,9 metros). Donde destaca especialmente es en la anchura que ofrece su planteamiento, la mayor del campeonato. Sus dos hombres más abiertos tienen entre sí una distancia media de 45,8 metros. Su bloque se muestra sobre el campo muy estirado, tanto para atacar como para defender y entonces sus líneas quedan, en determinados momentos, más separadas de lo aconsejable. Ahí es donde se muestra vulnerable y concede más ocasiones que su inminente rival. Aunque no es menos cierto que ha mantenido su portería a cero en más ocasiones: 13, seis fuera de casa, que las 11 de los de Flick. El Real Madrid es, tras el Barça, el segundo equipo que más tiene el balón, con una media de 59,6 minutos. Ha perdido la posesión en tres partidos: Barcelona, Rayo y Alavés.
No se esperan grandes sorpresas en los respectivos onces. Flick ya puede contar con Lewandowski y Balde, pero no sería extraño que ninguno de los dos fuera titular para salir a lo largo del partido y repitiera el once de San Siro con Ferrán y Gerard Martín. Ancelotti parece dispuesto a confiar en Güler, que ha comido terreno a Rodrygo y se espera su presencia como titular arrancando desde la banda derecha, pero con aportación al juego interior. Valverde jugará donde más rinde, en el centro del campo y Tchouameni, aunque no le guste, seguirá como central. Los datos demuestran que se está adaptando a su nueva posición estando ya entre los diez mejores 'bloqueadores' de disparos del Campeonato, además de ser el mejor ganador de duelos por alto del equipo.
Balón parado
El Real Madrid es el mejor equipo ofensivamente del campeonato en esta faceta: 20 goles. Siete de córner, cuatro de falta y nueve de penalti. El Barça se ha quedado en dos menos, 18: siete de córner, cinco de falta y seis de penalti. En acciones en contra, el ganador del duelo particular es el equipo de Flick. Solo ha recibido siete goles a estrategia parada: tres de córner, uno de saque de banda y tres de penalti. El Barcelona ha encajado el 43 por ciento de sus goles a balón parado en casa (tres). Al Real Madrid le han marcado diez: seis de córner, uno de falta y tres de penalti. Un 70 por ciento fuera de casa.
Individualidades
Este Barça, con permiso de Yamal y Raphinha, es el Barça de Pedri. Lo confirman los datos y las sensaciones. Nunca el canario había abarcado tanto campo y había influido en la organización del juego en tantas zonas del campo. Tres en uno. Mediocentro organizador, interior de ida y vuelta y mediapunta con último pase. Es el jugador con más distancia recorrida en lo que va de curso: 354,520 metros. También, el máximo recuperador del campeonato: 211, 98 de ellos en campo enemigo. Una media de 7,11 por encuentro. Dos datos que ratifican su estrenada vena defensiva. Un imán para robar y mantener el balón pegado a sus pies.

La explosión del omnipresente Lamine Yamal se refleja en sus 11 pases de gol. Más que ningún otro jugador de la Liga. Ha logrado que su equipo pase de ser un bloque de izquierdas que cargaba constantemente el juego por la banda zurda, donde se mueven Balde y Raphinha, a utilizar también la banda derecha, donde cuenta con la ayuda de un Koundé con quien se entiende de maravilla. Su influencia también se mide en sus regates, más que ningún otro futbolista del campeonato: 138 completados de 290 intentados (48%). Y en sus remates: 4,11 por partido, más que Lewa (3,81) y Raphinha (3,84).
En cuanto a individualidades, el Madrid se muestra como un equipo más coral. Se sospechaba que con su llegada, Mbappé se pudiera convertir en el 'amo' del equipo, pero su ascendencia ha sido menor de la esperada a pesar de sus 24 goles (10 fuera de casa) y de ser el jugador que más ha rematado del campeonato: 132 disparos, 72 entre los tres palos. Anota un gol cada 5,5 remates y también es el futbolistas de la Liga con más acciones ofensivas de alto impacto, 3,86 de media.
Sin tener la influencia de la temporada anterior, Bellingham ya es el segundo 'asistente' de la competición con ocho pases decisivos, tantos como goles marcados. Sin liderar ninguno de los parámetros medidores que ejecuta la Liga en su plataforma Mediacoach, Valverde plasma en sus estadísticas el peso que tiene en el equipo. Es top 10 en robos de balón y top 5 en recuperaciones en campo rival. Quinto jugador también más veloz con una punta de velocidad de 35,49 km/hora. Ha marcado seis goles.