Los caseros de LaLiga: quiénes son los dueños de los estadios y cuánto pagan los clubes por el alquiler
Solo un tercio de los equipos son propietarios de los recintos en los que juegan.
El fútbol español mueve mucho dinero, pero la mayoría de sus clubes no tiene estadio en propiedad. Existe una gran desigualdad. Mientras unos se endeudan para invertir miles de millones de euros en reformar sus instalaciones (véase Real Madrid o FC Barcelona), otros destinan cantidades mucho menores en estadios que no son de su propiedad y por los que tienen que pagar un alquiler.
En la actual LaLiga EA Sports, solo seis clubes son propietarios de sus estadios: el Atlético de Madrid, el Espanyol, el Real Betis, el Real Madrid, el Sevilla y el Valencia. Hay otros 13 estadios que son de titularidad pública. Diez pertenecen a los municipios en los que están situados (Barcelona, Getafe, Girona, Leganés, Palma, San Sebastián, Vigo, Valladolid, Vila-real y Vitoria), dos son propiedad de comunidades autónomas (el de Osasuna y el del Rayo Vallecano) y uno es del Cabildo de Gran Canaria (el de la UD Las Palmas). Y hay uno (San Mamés) cuya propiedad es mixta y se reparte entre instituciones públicas y privadas.
Entre los equipos que juegan en un estadio de titularidad pública está incluido el FC Barcelona, pero es una situación temporal. El club azulgrana es propietario del Camp Nou, que está reformando y al que pretendía volver antes de final de año. Mientras tanto, alquila el Estadio Olímpico de Montjuic al Ayuntamiento de Barcelona por un precio que, antes del traslado, calculaba en unos 20 millones de euros. Pero ninguna de las dos partes ha hecho pública la cifra exacta.
A QUIÉN PERTENECE CADA ESTADIO DE LALIGA
Los que han pagado las reformas
El mecanismo habitual para ceder el uso de un estadio es una concesión administrativa o convenio para que el club lo explote. A cambio, suele hacerse cargo de las reparaciones y reformas y abonar un canon, aunque no siempre sucede. En algunos casos, los convenios son públicos, pero en otros tanto dueños como clubes los mantienen ocultos.
Un ejemplo de reforma de un estadio público en los últimos años asumida por un club es El Sadar, cuya renovación durante la pandemia fue sufragada por Osasuna. En 2015, las deudas habían obligado al club a entregar el estadio y su ciudad deportiva al Gobierno de Navarra, que a cambio le cedió el uso de ambos espacios. Osasuna sí invirtió 23 millones de euros en su transformación.
Lo mismo ha sucedido con el Estadio de la Cerámica, en el que el Villarreal gastó unos 70 millones de euros en su reciente reforma. Casi 30 millones le costó al Mallorca reformar Son Moix, cuya concesión amplió hasta 2064 hace dos años. El convenio original, de 1997, recogía un canon del 5% de los ingresos conseguidos por actividades no futbolísticas. El Getafe también se hará cargo de la reforma del Coliseum, tras llegar a un acuerdo en 2022 con el Ayuntamiento para la cesión del estadio por 40 años. Además, el club madrileño tendrá que pagar 150.000 euros anuales.
La Real Sociedad aportó casi todo lo que costó la reforma de Anoeta (el 82% de los 78,6 millones). A cambio, la concesión firmada en 1993 se extendió a 2067 y lo pagado constará como canon. El Alavés paga 120.000 euros de canon por Mendizorroza, cuya concesión ha ampliado hasta 2029. El Real Valladolid lleva tiempo negociando con el Ayuntamiento una nueva concesión que le permita reformar el estadio y construir una nueva ciudad deportiva. Los últimos planes, de momento aparcados, preveían una inversión de más de 50 millones de euros y un canon anual de 224.000 euros.
El caso del Athletic Club es el más singular de toda LaLiga. San Mamés es propiedad de la sociedad San Mames Barria S. L., participada por el club, Kutxabank, el Gobierno Vasco, la Diputación de Bizkaia y el Ayuntamiento de Bilbao. El Athletic pagó unos 50 millones de los 189 que costó y tiene una concesión de 50 años por la que paga un canon anual que se actualiza con el IPC. En la temporada 2022-2023, según sus cuentas, abonó 574.836,63 euros por el alquiler. La concesión incluye una opción de compra de 66 millones en 2063.
Los que no han pagado las reformas
Otros clubes no han pagado las reformas de sus estadios. Es el caso del Celta con Balaídos. La reforma del estadio vigués, de la que aún falta por ejecutarse la última parte, está siendo pagada por el Concello y la Diputación. El Celta y el Concello están negociando una nueva concesión de uso para 50 años que permita al club explotar el estadio como no lo ha hecho hasta ahora.
Tampoco pagó hace unos años la remodelación del suyo la UD Las Palmas ni pagará una segunda que comenzará el año que viene. El Estadio de Gran Canaria sufrirá una reforma que le permitirá acoger partidos del Mundial 2030. Costará unos 100 millones de euros que serán sufragados por el Cabildo de Gran Canaria, propietario del recinto. El convenio entre las partes, vigente hasta 2027, contempla el pago por parte del club de hasta 435.000 euros al año por el uso y mantenimiento, aunque recibe bastante más en concepto de patrocinio del Cabildo.
La reforma del Estadio de Vallecas correrá a cargo de su propietaria, la Comunidad de Madrid: en 2025 están previstas obras por valor de 2 millones de euros. Hasta 2019, cuando se renovó el acuerdo de cesión por 20 años (más otros 10 prorrogables), el Rayo no pagaba un canon por usar el recinto vallecano. Desde entonces abona 81.784,84 euros, cifra que se actualiza cada cinco años.
Cuál es la situación en otras ligas
La liga española está a medio camino entre las cinco grandes ligas europeas. La propiedad privada de los estadios está más extendida que en Italia y Francia, pero menos que en Alemania e Inglaterra. En estas dos ligas, hay más estadios privados que públicos.
En Inglaterra, donde existe una larga tradición de estadios propiedad de los clubes, casi todos los equipos de la Premier League son propietarios. Solo hay dos clubes que utilizan estadios 100% públicos por los que pagan un alquiler: el Manchester City y el West Ham.
El club propiedad de Mansour bin Zayed Al Nahyan tiene concedida la explotación del estadio durante 250 años a cambio de una cantidad fija de 2,4 millones de euros que se ajusta con la inflación y otras variables. Además, se ha hecho cargo de las reformas del recinto, la última aún en marcha.
LA PREMIER ES LA LIGA CON MENOS ESTADIOS PÚBLICOS
Un acuerdo parecido tiene el West Ham para jugar en el Estadio Olímpico de Londres. Tras abandonar Boleyn Ground, pagó 18 millones de euros para adaptar el recinto y cada temporada abona un alquiler que también está vinculado a la inflación.
En el extremo opuesto se sitúan Italia y Francia, donde lo extraño es que un club sea el dueño del estadio en el que juega. En la actual Serie A, solo la Atalanta, la Juventus y el Udinese tienen estadios en propiedad. En la Ligue 1 son solo dos: el Lyon y el Auxerre. El estadio del Lille también es de propiedad privada, pero pertenece a una constructora.