Boyomo vuelve al punto de partida ante el Real Madrid: "Estaba casi cerrado, pero él no sabía nada en ese momento"
El central francés jugó en el Bernabéu uno de sus últimos partidos en el Valladolid. En ese momento, su fichaje por Osasuna estaba casi hecho.
La historia de Enzo Boyomo es la de un futbolista que ha recorrido media Europa en busca de su lugar. Por ahora, su sitio está en Osasuna, aunque hasta hace no mucho estaba asentado en Pucela. Precisamente a inicios de esta temporada vistió la camiseta del Valladolid tres veces, ya que con allí consiguió el ascenso en la 23/24. Su rendimiento en el Albacete y Valladolid hizo que los rojillos centrasen sus esfuerzos en ficharlo a finales del mercado veraniego. Este sábado pisará de nuevo el Santiago Bernabéu. La última vez que lo hizo fue con la camiseta blanquivioleta el 25 de agosto. En ese momento, Boyomo no lo sabía, pero su fichaje por Osasuna estaba prácticamente cerrado. Hoy vuelve al punto de partida.
Nacido en Toulouse, Boyomo comenzó su carrera en el club de su ciudad, el Toulouse FC, donde rápidamente destacó. Sin embargo, a los 13 años, fue apartado del equipo, un golpe que recuerda con resignación. "Con 13 años me echaron. Supongo que no era tan bueno como los otros chicos, así es la vida…", rememoró en Relevo, cuando se alzó como la revelación de la Segunda División.
Su carrera pudo haber terminado en ese punto, pero su padre, Guy, decidió apoyarlo para continuar su sueño en Inglaterra. A los 14 años, ambos se mudaron a Mánchester, donde Boyomo fue admitido en el Blackburn Rovers. Allí pasó años difíciles, alejado de su familia y enfrentándose a un estilo de vida muy diferente. Aunque su madre permaneció en Francia, su padre continuó junto a él durante este periodo crucial, apoyándole en cada entrenamiento y aprendizaje. "Con muy poquito esfuerzo ya era muy diferencial, pero aún le faltaba por aprender", comenta una persona cercana a él.
Tras media vida deportiva por los campos de Inglaterra... apareció el Albacete. En 2020, en plena pandemia, Boyomo recibió una inesperada oferta para entrenar con el Albacete en Segunda División. "Termina contrato con el Blackburn y por una carambola, porque ya me dirás tú, termina en el Albacete. Como si uno del Albacete terminara en el Sunderland", comenta uno de sus allegados a Relevo.
Aunque apenas conocía el club o la ciudad, Boyomo aprovechó la oportunidad y se adaptó rápidamente a su nuevo entorno, enfrentándose a un fútbol mucho más técnico y táctico. "Desde que llegó, sabíamos que era cuestión de tiempo antes de que diera el salto. Tiene una mentalidad muy fuerte, y eso lo llevó lejos", amplían desde su entorno.
El ascenso en el Albacete: desde la grada a la élite
A pesar de sus esfuerzos, no todo fue sencillo en sus primeras temporadas en Albacete. Cuando el equipo descendió a Primera RFEF, el Real Betis intentó ficharlo por un millón de euros, pero el Albacete no accedió a venderlo y su representante le recomendó declararse en huelga. "En ese momento, el club no solo no le deja salir, sino que le sanciona, y su imagen queda dañada", explica alguien de su círculo cercano. Para Boyomo, este episodio supuso un gran desafío, llegó a plantearse todo y optó por cambiar de agente.
En ese momento firmó por InterStar Deporte, agencia que ha gestionado carreras de grandes defensas como Jordi Alba o Pau Torres. Desde entonces, Boyomo se centró como nunca. "Puso el foco en él. En su peso, en su estado de forma, en su mejoría táctica y técnica. Así terminó la temporada en Albacete y ayudó al equipo a ascender", comentan desde su entorno. Fue entonces cuando Rubén Albés, entrenador del Alba, supo sacar lo mejor de él, devolviéndole la confianza y ofreciéndole el apoyo que necesitaba. "Ese año en Segunda División, Rubén Albés, que es una persona importantísima en su carrera, le da el cariño que necesita y el modelo de juego que tiene le beneficia", añaden.
Tras su buena temporada en Segunda, el Valladolid le abrió las puertas, aunque el inicio fue complicado. "Cuando llega, al principio le cuesta. Tarda prácticamente un mes en asentarse", recuerda su entorno. Con el ascenso, Boyomo se preparó para la siguiente temporada con una actitud profesional y rigurosa: comenzó a entrenar semanas antes de la pretemporada, incluso con un preparador físico personal, para llegar en su mejor estado. "Él viene volando a la temporada. La gente en Valladolid está como loca. 'Hostia, este chaval ha vuelto y no lo conocemos'", rememoran los que acompañaron a Boyomo en el proceso.
El aterrizaje en Osasuna, preparado desde el Bernabéu
En Primera División, Boyomo captó la atención de Osasuna, que buscaba un sustituto para David García. Las negociaciones se alargaron, pero la operación finalmente se cerró. Incluso antes de su penúltimo partido en el Bernabéu con el Valladolid, el acuerdo con Osasuna ya estaba casi sellado, aunque él no lo sabía.
Todo se cerró rápidamente y Osasuna desembolsó cinco millones por un central del que ya prevén brotes verdes. "No tengo duda de que será la venta más cara en la historia del club", afirman desde su entorno. Boyomo ha sabido aprovechar las oportunidades que se le han presentado y, según quienes le conocen, está preparado para llevar su juego al siguiente nivel.
Su aterrizaje en el club rojillo ha sido inmejorable. En su debut marcó tras un córner y desde que Vicente Moreno ha echado mano de él, no le ha soltado. Suma todos los minutos posibles en LaLiga con Osasuna y ya quiere más. En su entorno lo tienen claro: "Ha dado un paso a nivel profesional, ha dado un paso a nivel nutrición y a nivel de exigencia". Saben que todavía puede dar un paso más, pero el siguiente está claro en su hoja de ruta. Este sábado volverá al inicio del todo, el Santiago Bernabéu.