Planteamiento, eficacia y plantilla corta: el primer borrón del Betis enseña defectos

El Betis firmó ante el Mallorca el primer borrón de la temporada. La euforia generada con los dos triunfos seguidos ante Leganés y Getafe y, sobre todo, por ese regreso de Giovani Lo Celso a un gran nivel se pinchó con el gol de Valery. En un partido con ocasiones para ambos equipos, el verdiblanco salió perdedor, lo que enseñó algunos defectos, tanto en el planteamiento como en la confección de una plantilla a la que también castigan las lesiones.

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Pellegrini apostó por un once, en teoría, continuista, con Chimy Ávila y Ricardo Rodríguez como únicas novedades con respecto al que venció al Getafe, aunque sobre el césped sí hubo matices distintos. Con el argentino como extremo en vez de Fornals, el Betis se partió en la medular. Altimira y Marc Roca se vieron desbordados en más de una ocasión por la presencia de más futbolistas bermellones, ya que Jagoba Arrasate sí renunció a un delantero para ganar otro elemento en el centro del campo. Las diagonales de Darder o Robert Navarro generaban superioridades cuando el Mallorca tenía la pelota, lo que permitió que superase sin demasiados problemas la presión bética.

La elección del entrenador chileno dejó un partido más abierto al intercambio de golpes, con un Betis que en ocasiones aparecía con cuatro delanteros, ya que incluso Lo Celso se ubicaba por delante de Vítor Roque. "Tuvimos ocasiones para haber asegurado antes el partido, entre el palo y otra de Vítor, pero hay que concretarlas. Sin un partido brillante lo tuvimos para ganarlo", declaró Pellegrini tras el encuentro, aferrándose a esas oportunidades generadas, sobre todo en el inicio del segundo tiempo.

Pero el análisis no sólo se reduce a lo que sucedió sobre el césped, sino también a los elementos disponibles para Pellegrini. La prolongada ausencia de Bartra, que sigue sin ejercitarse con el equipo, ha dejado únicamente a Diego Llorente y Natan como centrales específicos de la primera plantilla e incluso provocó que Mendy acudiera convocado, pese a que desde su recuperación acumula pocos minutos aún en el Betis Deportivo.

El desgaste acumulado no sólo hace mella en la zaga. Con William Carvalho de baja de larga duración y Johnny Cardoso ausente -este lunes ya se ha ejercitado y apunta a novedad para Las Palmas-, Pellegrini tuvo que repetir con Marc Roca y Altimira, una pareja a la que se vio con menos chispa que en partidos anteriores y que tampoco contó con las ayudas necesarias.

Como ocurriera ante el Getafe, el tardío carrusel de cambios tampoco mejoró en exceso el rendimiento sobre el campo. Fornals, Bakambu y Perraud en un triple cambio y, posteriormente, Aitor Ruibal y Juanmi para agotar el cupo, no tuvieron demasiada incidencia en el juego, más allá de la oportunidad del extremo catalán poco antes del gol mallorquinista. La salida de Abde dejó al Betis huérfano de velocidad en la banda, sin que exista un recambio parecido en la primera plantilla -Jesús Rodríguez asoma en el filial- mientras que Juanmi y Bakambu pasaron inadvertidos y Lo Celso mostró signos de fatiga.

"Hicimos un gran esfuerzo para intentar recuperar la pelota. Ellos manejan bien el juego directo y las contras. Pero lo mejor hubiera sido convertir los goles, no lo hicimos y sufrimos en los últimos minutos", apuntó Pellegrini, que seguía dándole vueltas a esas ocasiones erradas, pero que tendrá que seguir dándole vueltas al equipo para asumir un calendario con mucha competición. Las Palmas, Espanyol, Legia Varsovia y Sevilla aguardan desde el jueves en apenas diez días y el Betis necesita encontrar soluciones a esos defectos que el Mallorca hizo emerger con el primer borrón del año.