El FC Barcelona no baila al son de la afición del Camp Nou

No pudo cerrar el Barcelona con victoria un 2022 que no pasará a la historia del club. El conjunto azulgrana empató ante el RCD Espanyol en un derbi donde los de Xavi fueron de más a menos, bajando el ritmo en la segunda parte y desquiciándose con la actuación de Mateu Lahoz.

A pesar de que el juego no fue muy fluido, la afición que acudió al Camp Nou, un total de 88.095 espectadores, estuvieron al lado del equipo en todo momento. Cuando los blanquiazules empataron, la grada empoderó a su equipo para que fuera a por el segundo gol. Así lo hicieron hasta el pitido final, aunque con cierto desespero veían cómo sus jugadores no conseguían el objetivo.

La asistencia en el derbi es la tercera más elevada de la temporada. Ese es uno de los aspectos más positivos que se lleva el club azulgrana de este año. El reenganchar a la afición. Equipo y grada van de la mano, aspecto que no pasaba en la mayoría de los años anteriores.

A lo largo de la historia azulgrana, cuando el Camp Nou se llenaba, el equipo respondía con victoria. Fuera el partido que fuera. Eso ya no es así. Al Barcelona le cuesta mucho más ganar los partidos. Los rivales son conscientes de ello y aprovechan la mínima oportunidad para puntuar en el estadio azulgrana.

Sin ir más lejos, esta temporada, en los seis partidos con mayor presencia de público en el Camp Nou, el Barça solo ha logrado sumar los tres puntos en tres ocasiones. Los rivales donde se consiguió ganar, todos en LaLiga Santander, fueron el Elche (3-0, 85.073 espectadores), el Athletic (4-9, 84.817 espectadores) y el Almería (2-0, 92.605 espectadores), siendo la más numerosa debido a la despedida de Gerard Piqué.

En las dos citas europeas más importantes de la temporada, el Camp Nou no falló. Todo lo contrario. Ante el Bayern, ya eliminados, acudieron 84.016 aficionados, que vieron como el conjunto alemán ganaba por 0-3. Ante el Inter, en el partido clave para seguir vivos en Champions, lo llenaron 92.302 personas, que no fueron suficientes para superar al conjunto italiano, con un 3-3 final.

En el derbi, uno de los partidos más emotivos que se viven en el estadio azulgrana, tampoco los de Xavi pudieron ganar. La afición cantó, bailó, gritó y animó. No tuvo recompensa. El juego del equipo no estuvo a la altura de una afición que anhela esas tardes donde se divertía viendo jugar a su equipo. Ese es el principal objetivo de Xavi para 2023. La afición ya la tiene ganada, ahora es el momento de darle el premio que se merecen.