LIGA F

Los 20.000€ de la discordia que dividen a la Liga F: no todas están de acuerdo y la huelga no es unánime

Se mantiene el parón en la competición para las dos primeras jornadas: el principal problema son las diferencias a la hora de fijar el sueldo mínimo.

Un lance del partido que enfrentó al Granadilla y al Sevilla el curso pasado. /LaLiga
Un lance del partido que enfrentó al Granadilla y al Sevilla el curso pasado. LaLiga
Sandra Riquelme

Sandra Riquelme

"Sólo queremos jugar". Es el sentimiento de muchas de las futbolistas de la Liga F. Porque, quién nos lo iba a decir, hablar de fútbol se está convirtiendo en una utopía. "A nosotras tampoco nos gusta que se esté hablando todo el día de polémicas, es duro", es otro de los pareceres. Tal y como ocurrió el año pasado, la primera jornada de la Liga F no se celebrará... al menos este fin de semana. Los sindicatos y la patronal siguen sin llegar a un acuerdo. El principal inconveniente es el salario mínimo. Los clubes se plantan en 20.000€ -una subida del 25% respecto al año pasado-, mientras que el banco social exige 23.000€. Pero, ¿qué piensan las jugadoras sobre esto?

Pues, según ha podido saber Relevo, hay de todo. Por un lado, el tema de la huelga. A pesar de que la mayoría están convencidas de ir a la huelga -aunque sea por apoyar a sus compañeras- , no todas están por la labor o no están del todo convencidas. Por otro lado, el salario mínimo. No todos los vestuarios de la competición -al menos, al completo- comparten el mismo sentir respecto a este asunto. Los hay que están seguros al 100% de rechazar los 20.000€, los que tiene una mayoría que aboga por el sí y los que están divididos entre el sí y el no. Por eso, el día de ayer fue clave para el futuro inmediato de la Liga F.

Durante el receso del encuentro que mantuvieron ambas partes, los sindicatos y la patronal, los primeros se reunieron con las capitanas de la Liga F. Después, ellas mismas debatieron sobre el tema y consultaron con el resto de sus compañeras. Por último, les trasladaron el sentir general del vestuario a los sindicatos.

En líneas generales, el sentir de las jugadoras que pretenden ejercer su derecho a la huelga y en rechazar la propuesta de la patronal es claro: piensan que los clubes tienen el dinero suficiente como para aceptar esa subida del salario mínimo. "Consideramos que las cifras que pedimos en nuestra propuesta económica son completamente asequibles dada la dimensión económica de la Liga F, que tiene los siguientes ingresos asegurados: 42 millones de euros en activos comerciales, 35 millones de euros por derechos de televisión y 22,5 millones de euros a través de la aportación del Gobierno", reza el reciente comunicado de los sindicatos.

Mientras, la Liga F ya dejó claro en su comunicado que no cederá a la presión ni aceptará propuestas que supongan "el colapso económico de la competición, y, por tanto, el fracaso del fútbol profesional femenino".

¿Cuáles son los escenarios posibles?

Teniendo en cuenta que no todos los vestuarios -al menos en su totalidad- están convencidos de lo que se viene, podría haber alguna sorpresa durante la jornada.

El Granadilla, por ejemplo, es uno de los equipos que vive en una mayor incertidumbre. "La idea del club es jugar. Con tener ocho o nueve jugadoras del primer equipo que no vayan a la huelga, nosotros jugaremos", afirmó Sergio Batista, su presidente, en la TV Canaria. Hay que tener en cuenta que, en caso de que las futbolistas no jueguen el partido, esa cantidad correspondiente al encuentro se les restará de la nómina.

El partido entre el Granadilla y el Sevilla abre la primera jornada y todavía no está muy claro qué va a pasar. A medida que pasan las horas, el nerviosismo y el agobio crece entre algunas de sus protagonistas. También, y en muchas ocasiones, el desconocimiento acerca del asunto y el sentimiento de estar perdidas. De hecho, algunas de ellas se enteraron de la huelga por las noticias, como quien dice. Sea como fuere, el fútbol femenino vuelve a estar en el foco por todo menos por el fútbol.