El 2024 alumbra a una Alexia Putellas más allá del fútbol y con una fundación entre manos
La capitana del Barça es una de las jugadoras más mediáticas del mundo.
"La verdad es que estos meses han sido un máster para mí, he aprendido muchísimo", desvelaba Alexia Putellas tras la final del Mundial. En la zona mixta del Accor Stadium y ante cientos de periodistas, la dos veces ganadora del Balón de Oro se confesaba. "He aprendido cómo va esta industria y vosotros también sabéis cómo va", nos decía con la medalla de campeona colgada al cuello. "Entonces, bueno, también el conocer otra cara del.. es que no quiero decir del fútbol, quiero decir de la industria, que antes no conocía [...] Las he visto de todos los colores", sentenciaba.
Lo que no sabía Alexia Putellas es que muy pronto iba a poner en práctica todos esos aprendizajes. Tras esas palabras, como si de una premonición se tratase, un sinfín de acontecimientos se desataron y provocaron un giro sin precedentes en la historia del fútbol nacional. En muchos de ellos, Alexia ejerció de líder.
Fue una de las que antes se dio cuenta, y advirtió, de la gravedad del beso no consentido de Luis Rubiales a Jenni Hermoso, tuiteó el famoso #SeAcabó -que desencadenó en un potentísimo movimiento social que trascendió las barreras del deporte- dirigió las negociaciones con la RFEF en el cónclave de Oliva y protagonizó, junto a Irene Paredes, aquella rueda de prensa en Suecia.
Esto es inaceptable. Se acabó. Contigo compañera @Jennihermoso
— Alexia Putellas (@alexiaputellas) August 25, 2023
Una fundación entre manos...
Pero, ¿cómo llegó Alexia Putellas hasta ahí? Si bien es cierto que su talento futbolístico nunca estuvo en duda, hubo quienes le pedían más fuera del campo, teniendo en cuenta su capacidad para mover masas, su influencia y su talante. Un paso al frente que, definitivamente, dio en los último tramos del 2023.
La lesión del ligamento cruzado anterior alumbró una nueva Alexia. Una futbolista que mira más allá del verde y con varias iniciativas entre manos. Entre ellas, el proyecto de una fundación que pronto verá la luz y en el que está verdaderamente implicada, según pudo saber Relevo. "Durante décadas, demasiadas, ha existido una discriminación sistemática con el femenino. No hemos podido ser sólo futbolistas", afirmaba en aquella citada rueda de prensa en Gotemburgo. Ahora, pretende -junto a sus compañeras- que las futbolistas que vienen por detrás lleguen a estar más pendientes del balón que lo que ocurre alrededor de él.
Una de las principales preocupaciones de Alexia -que cumplió 30 años el pasado 4 de febrero- es explorar nuevas vías para que el fútbol femenino crezca y, sobre todo, consolidar todo lo que está pasando. Ese #SeAcabó que nació a través de un tuit suyo y que se ha convertido en un lema. Además, la dos veces Balón de Oro también quiere involucrar y concienciar a sus patrocinadores -la lista de marcas a las que presta su imagen es cada vez mayor- con los que trabaja sobre la importancia de darle visibilidad al fútbol femenino y que el mismo esté más presente en sus activaciones.
Un nuevo rol, más reivindicativo, del que ya se habían dado pinceladas en su documental y del que Alexia ya había dado cuenta anteriormente. Sin embargo, no con tanta fuerza como ahora. Algo en lo que la campeona del mundo también ha trabajado con su entorno y con todos los profesionales que están a su alrededor. Volviendo a esas palabras tan reveladoras del inicio del texto, es como si Alexia hubiese entendido cómo es "la industria del fútbol" y ahora pretendiese cambiarla -o aportar su granito de arena- desde dentro.