Casemiro y Varane trasladan al Manchester United el relato del Real Madrid
Los dos ex jugadores del conjunto blanco han cuajado una gran eliminatoria, sobre todo el brasileño, imponente en el centro del campo.
En la ida, vistiendo de blanco, todavía se podía pensar que Raphael Varane y Carlos Henrique Casemiro vestían la casaca del Real Madrid. No solo por el parecido en las camisetas, sino por la forma de trasladar un dominio ya conocido al Camp Nou. Ambos han hecho una gran eliminatoria, con especial mención a un Casemiro apoteósico en cualquier lance, haciéndose tan grande como el propio escudo del Manchester United.
El fichaje de Casemiro estaba repleto de dudas hacia ambos lados. El Real Madrid se desprendía de una pieza capital, insistituible, en su glorioso ciclo europeo, mientras que el United firmaba por muchísimo dinero a un jugador que venía de un año de luces y sombras y que caía en un ecosistema roto y por hacer. Sin el sostén de Kroos y Modric, muchos miraron con recelo el movimiento. No hay quiénes duden ya del impacto del brasileño, líder absoluto del equipo al que parece haber abrazado con toneladas de experiencia y saber estar. Solo estando, siempre donde debe, su equipo es un pelín mejor.
Para Varane el reto era doble. Después de una temporada manchada por el error ante el City que costó una eliminación en Europa, su llegada a Manchester estuvo lejos de tener la relevancia que apuntaba. Entre problemas físicos y mal rendimiento, el francés no se terminaba de imponer y algunos ya habían rebajado las expectativas, entendiendo que lo visto hace años ya no regresaría. Ante el Barça, sobre todo en Old Trafford, Varane exhibió su mejor nivel, aupado por el escenario y motivado ante una deuda que él mismo había dejado. Su partido ante Lewandwoski cuando tocó socorrer a Lisandro y gestionando la profundidad de Balde fue fantástico.
Tras la lesión de Eriksen, que es el metrónomo del equipo, Casemiro ha seguido jugando a gran nivel. El rendimiento de Fred en el doble pivote está siendo sorpresivo, equilibrando la pesadez de Casemiro con mucha energía, llegando desde segunda línea y presionando en primeros pases, dejando a su compañero la gestión de todo el ancho del campo por detrás, algo en lo que Casemiro siempre ha brillado sin importar el contexto ni el rival.
Ante el FC Barcelona ha sido una reafirmación por todo lo alto de lo ofrecido en los meses anteriores. Ambos futbolistas se han impuesto en contextos de inferioridad, y pese a los errores (Casemiro perdió el balón del 2-2 en Barcelona), han relativizado cada golpe encajado con naturalidad. Al final son jugadores que transfieren un bagaje competitivo mucho más pesado que el del resto de sus compañeros, sobre todo en Europa, y eso es algo que por la fuerza se tiene que notar.
El Real Madrid mostró un poderío ya conocido en Anfield, demostrando que hay algo más que buenísimos jugadores en sus gestas, un hilo invisible que une todas sus machadas. Como si no importase que algunos futbolistas se marcharan. Casemiro y Varane han trasladado ese relato al United, como si nunca se hubiesen marchado del Santiago Bernabéu.