SELECCIÓN ESPAÑOLA

El núcleo fuerte de 'Las 15' se abre públicamente al diálogo

Aitana Bonmatí y Patri Guijarro han manifestado su intención de hablar con la Federación en busca de una solución.

Aitana Bonmatí, en un partido con la Selección./REUTERS
Aitana Bonmatí, en un partido con la Selección. REUTERS
Sandra Riquelme

Sandra Riquelme

El núcleo fuerte de 'Las 15' ya está abierto al diálogo. A cuatro meses de la disputa del Mundial, varios pesos pesados del vestuario de la Selección han manifestado públicamente su intención de entablar conversaciones con la Federación con el objetivo de llegar a acuerdos que desemboquen en la mejor solución para todos. Patri Guijarro y Aitana Bonmatí así lo han manifestado en las últimas horas.

"Queremos cambios y esperamos que se solucione pronto", pronuncia Guijarro en RAC1. "Estamos en un momento delicado y nos gustaría que las dos partes nos acercáramos y pudiéramos hablar", sentencia Bonmatí. Es el punto más próximo a una reconciliación que se ha vivido en los últimos meses. Dos jugadoras clave para la Selección ya no descartan en público que vestuario y Federación se entiendan en fechas próximas.

Aun así, continúan defendiendo sus derechos a ultranza, tratando de poner luz al conflicto que les ha apartado de vestir la camiseta de su país. Así lo explica Patri Guijarro: "Cualquier jugadora quiere ir al Mundial. Si no vamos no es por ningún capricho.Queremos cambios y esperamos que se solucione pronto. Estamos trabajando en ello. No sé si iré, pero deben tratarnos como profesionales".

Más rotunda, incluso, se ha mostrado Aitana Bonmatí en Ara, remarcando el mensaje de que su postura no se debe a un arrebato: "Somos súper profesionales y súper ambiciosas y lo que queremos es lo mejor para el fútbol femenino. No creo que las mejoras que estamos pidiendo y que hemos pedido sean porque sí. No nos ha salido un día así como así. Queremos lo mejor para el Barça y para la Selección. Queremos luchar por ser las mejores del mundo y creo que esto dice mucho de nosotras".

Entonces, la centrocampista se abre en canal y explica su parecer actual: "Estamos en un momento delicado y me gustaría que las dos partes nos acercáramos y pudiéramos hablar. Hablar para ver cómo podemos arreglar las cosas por el bien del fútbol femenino. Fuera orgullos y fuera todo: están en juego muchas cosas. Y pido poder tener una conversación y expresas opiniones. Que se nos escuche. No lo hacemos por capricho, lo hacemos por el bien del fútbol femenino".

"Fuera orgullos". Así remarca una necesidad, el punto de partida para que pueda existir una conversación fluida que acabe con el posible regreso de 'Las 15' o, al menos, algunas de ellas. Aitana Bonmatí también quiso ser tajante en torno a las críticas recibidas por la decisión de dejar temporalmente la Selección: "Las personas que nos llaman caprichosas no nos conocen lo suficiente", "ver cómo se nos ha tratado en los medios de comunicación no es justo" o "quien nos conoce sabe que somos profesionales".

Desde el vestuario

"Me gustaría que esto no sea una guerra. No queremos una guerra con nadie". El apunte de Aitana Bonmatí es certero. Estos últimos meses se ha tratado el asunto como una cruenta batalla en la que todos pierden, mientras 'Las 15' lo han vivido como una profunda transformación de sus expectativas como futbolistas: "Han sido meses muy difíciles y para nosotros acudir a la Selección es básico. Es parte de nuestra carrera y de nuestra vida. No yendo estamos perdiendo más que ganando, en todos los sentidos".

Eso, por supuesto, ha entrado de lleno en el vestuario del Barcelona, con seis representantes: Aitana Bonmatí, Mariona Caldentey, Claudia Pina, Mapi León, Patri Guijarro y Sandra Paños. Es inevitable que les afectara en el día a día, entre la presión mediática y la mencionada transformación de sus carreras, sin la vía internacional.

No obstante, desde dentro, han hecho piña para centrarse en el foco principal: "Al principio fue un momento delicado. Aquí, cuando llegamos a la Ciudad Deportiva, todo es Barça, Barça y Barça. El tema de la selección es una cuestión que nos ha sacado mucha energía y, al final, debemos focalizarnos en lo que tenemos ahora, que es el Barça". Continúa: "Hemos hablado abiertamente del tema. Si te quedas las cosas para ti se enquistan y la bola se hace más grande. Son situaciones de las que he aprendido mucho, y seguro que en algún otro momento las gestionaría de otra forma".

Mensajes dispares

No todas las jugadoras que han pedido no ir convocadas a la Selección han mostrado públicamente su disposición al diálogo o, al menos, no en los mismos términos que Bonmatí o Guijarro. Mapi León, en Mundo Deportivo, no ha descartado acudir al Mundial, aunque sigue emitiendo un crítico mensaje sobre la situación con la Selección que no invita a pensar en un diálogo próximo.

"Al final cada uno es libre de decidir qué quiere hacer, cómo quiere ir... Yo soy una persona de ideas muy claras y bastante cabezona. Si creo algo, si pienso que algo no está bien o que no estábamos sacando nuestro máximo rendimiento... Una cosa es que llevemos una semana jugando a esto y quieras exigir, pero cuando ya llevamos años... No quiero comparar, pero yo estoy en el Barça y estoy muy contenta a nivel de todo. No quieres comparar, pero al final comparas y hay muchas cosas que se pueden mejorar", cuenta la central.

Aun así, una de las mejores defensas del planeta afronta con esperanza un futuro próximo en el que se pueda llegar a un entendimiento: "Creo que hay unas cosas que se tienen que cambiar y si no se cambian no se irá. Es decir, quiero ir, sí quiero ir. ¿Me jode si al final no voy? Me va a joder, por supuesto me va a joder mucho porque es una oportunidad muy grande. Es un Mundial. Es que es un Mundial. Es que veías el Mundial de los chicos y piensas 'es que yo quiero estar ahí' pero hay unas cosas que son unos valores que yo tengo y unas creencias y son antes eso que lo otro".

No obstante, las jugadoras cada vez se están abriendo más al gran público para comunicar su sentimiento ante una situación que nunca esperaron vivir. Algunas, como Aitana Bonmatí, piden abiertamente el diálogo. A cuatro meses del Mundial, solo un acercamiento de las partes permitirá a España gozar de algunas de las mejores jugadoras del planeta en Australia y Nueva Zelanda.