BETIS | HOMENAJE A JOAQUÍN

Joaquín da su último discurso bañado en lágrimas: "No sé qué he hecho para tanto cariño"

El capitán, emocionado, ofreció su último discurso en el Benito Villamarín. "Sois la mejor afición del mundo", le dijo a los béticos que llenaron el estadio.

Joaquín llora abrazado por su familia./EFE
Joaquín llora abrazado por su familia. EFE
Samuel Silva

Samuel Silva

Entre lágrimas, no podía ser de otra forma. Así abandonó Joaquín por última vez el Benito Villamarín. Tras dar una vuelta de honor a hombros de su cuadrilla, como si de un torero se tratase. Tras coger el capote y torear en el mediocampo con los olés de una afición a la que no le importó el aguacero que se sumó a la fiesta. Con Rafael Gordillo, José Miguel López Catalán y Ángel Haro a su lado, Joaquín pronunció su último discurso como futbolista del Betis.

"No es que sea difícil, es que no sé si voy a poder. No sé que he hecho para tanto cariño, sinceramente", comenzó el capitán, que no podía contener la emoción después de un partido con el que se le rindió homenaje a esos 23 años en el fútbol profesional. Acompañado por su gente, los del Betis y los de fuera. Con un Benito Villamarín con 59.621 espectadores en las gradas. Nadie se quiso perder el último día del Joaquín futbolista.

"Si me lo permitís, quiero empezar dando las gracias a todos mis compañeros que han venido hoy y han estado en un día tan especial. También a toda la gente que ha hecho posible que sea un día feliz, a toda esa gente que trabaja detrás y no se la ve. Sin vosotros no hubiera sido posible. A mi gente, a mi familia, a mi mujer, a mis hijas. Gracias por estar ahí siempre. Josemi, Ángel, Gordo, Eva, muchas gracias a todos. Vamos a estar al pie del cañón. Como futbolista me voy, pero voy a tener la suerte de seguir trabajando con vosotros para estar a la altura de la mejor afición del mundo. Hoy lo habéis vuelto a demostrar, no a mí, al mundo entero. Viva el Betis y viva la afición del Betis. Muchas gracias, hasta siempre, os quiero", señaló Joaquín en ese último mensaje.

Luego llegó el pasillo hacia el túnel de vestuarios. Junto a su mujer y sus hijas, inseparables desde que en el minuto 63 abandonó su último partido. Con todos sus compañeros aplaudiendo esa retirada hacia las entrañas del Villamarín. Joaquín dijo adiós con un homenaje a su altura. Se va el futbolista, pero se queda la figura, que continuará en el Betis.

Pero Joaquín siempre tuvo un trato excelente con los medios de comunicación y también fue así en su despedida. Con una zona mixta en la que atendió durante más de media hora. "No tengo palabras de agradecimiento para lo de hoy y para toda la vida", señaló el capitán. "La noche ha sido inolvidable. Creo que los béticos se lo han pasado en grande y no puedo pedir más. Estoy feliz porque quería que todos se lo pasasen bien y eso es lo más importante", añadió el portuense, que también reconoció la emoción con la que ha vivido los últimos días: "Llevo una semana llorando por todos lados. Mi mujer me ve con las lágrimas saltadas y dice este hombre se está quedando tonto. Ya no puedo llorar más. ¿Sabes qué pasa? He intentado que el final fuese tan bonito o especial que eso me ha hecho estar un poco más sensible".

También tuvo palabras Joaquín para Gordillo. "Es un cañón. Es un fenómeno. He tenido la suerte de conocerlo muchos años, de compartir muchas historias y joder... Volver estar a su lado y trabajar con él. Voy a intentar disfrutarlo. A don Rafael Gordillo hay que quererlo sí o sí", señaló el portuense, que incluso después, en otro corrillo con la prensa, tuvo un recuerdo para José Antonio Reyes: "Lo queremos y lo recordamos todos los sevillanos. Ha estado en nuestros corazones. Desde aquí le envío un beso a su familia".